Los imprecisos programas laborales de la izquierda

Hasta ahora los partidos obreros, por las precarias condiciones en que viven, se han limitado y se limitan a incluir en sus programas m¨ªnimos algunos puntos aislados y muy gen¨¦ricos sobre pol¨ªtica laboral. Por su parte, los sindicatos de clase han hecho otro tanto, aunque, l¨®gicamente, en sus programas se encuentra mayor concreci¨®n que en los programas de los partidos de izquierda.Con todo, la aportaci¨®n m¨¢s relevante del movimiento sindical organizado ha sido la sistematizaci¨®n de las plataformas reivindicativas que han surgido en torno a las negociaciones de los convenios colectivos y a los movimientos huelgu¨ªsticos. Muchas de esas reivindicaciones tienen naturaleza puramente coyuntural en tanto en cuanto son funci¨®n del momento concreto en que surgen. Tal es el caso, por ejemplo, de las peticiones de determinados aumentos salariales, fs las peticiones de readmisi¨®n de los despedidos o de la liberaci¨®n de los obreros detenidos. Otras reivindicaciones, por el contrario, tienen una dimensi¨®n menos contingente, menos pegada a los temas de cada d¨ªa. As¨ª, detr¨¢s de las conocidas peticiones de que las cuotas de la Seguridad Social o del impuesto sobre el rendimiento del trabajo personal corran a cargo de las empresas, hay, adem¨¢s de la proclamaci¨®n de que los bajos salarios no pueden ser reducidos a¨²n m¨¢s con descuentos, la manifestaci¨®n indubitada de que los trabajadores quieren una distinta ordenaci¨®n de la Seguridad Social y de la pol¨ªtica fiscal.

Muy por encima de las reivindicaciones de dimensi¨®n econ¨®mica est¨¢n las pol¨ªticas y sindicales que afectan a los derechos b¨¢sicos de los trabajadores, tales como la libertad sindical, la libertad de reuni¨®n, asociaci¨®n y expresi¨®n sindical, y el derecho de huelga.

En todo caso, la coincidencia que entre unos y otros partidos obreros existe en torno a los puntos antes mencionados, y la coincidencia asimismo existente entre los sindicatos de clase, me da pie para plantear un tema que entiendo es de la mayor trascendencia pol¨ªtica para el futuro de la oposici¨®n: la alternativa laboral de la izquierda. Esta, necesario es decirlo, carece, hoy, por hoy, de programas laborales globales que articulen las l¨ªneas b¨¢sicas de ordenaci¨®n de las relaciones laborales y de la gesti¨®n y prestaciones de la Seguridad Social. Por supuesto que de los programas pol¨ªticos de cada partido obrero puede deducirse algo de lo que cada uno piensa sobre las relaciones laborales, pero no existen programas p¨²blicamente explicitados.

Hasta hace bien poco los espa?oles apenas si conoc¨ªan alg¨²n peque?o detalle sobre el pensamiento econ¨®mico de los partidos de la oposici¨®n democr¨¢tica. Hoy, ese hueco informativo est¨¢ cubierto. No ocurre otro tanto con la pol¨ªtica laboral, donde se vienen dejando las cosas al espontane¨ªsmo, en no pocos casos desordenado. De ah¨ª que se haga rigurosamente necesario que cada partido obrero, cada sindicato de clase, reflexione sobre c¨®mo entiende han de desenvolverse las relaciones laborales en el futuro inmediato. Por supuesto que las plataformas reivindicativas siguen siendo necesarias, en cuanto articulaci¨®n vertebrada de las luchas obreras. Pero es preciso ir m¨¢s all¨¢. Es necesario, insisto, salir de la etapa de los planteamientos atomizados, puramente coyunturales, para entrar de lleno en la elaboraci¨®n y presentaci¨®n a los espa?oles del pensamiento de los partidos y los sindicatos sobre las relaciones trabajadores-empresarios y sobre la gesti¨®n de la seguridad social. El conjunto coherente y articulado de medidas pol¨ªticas que sobre esos temas propongan los partidos y los sindicatos requiere que unos y otros se sienten a pensar seriamente sobre lo que pretenden ofrecer a los trabajadores espa?oles. El contenido de las alternativas laborales de la izquierda dar¨¢ buena medida del contenido clasista de partidos y sindicatos. Se trata por tanto de un aut¨¦ntico test a la izquierda.

Estos programas tienen dos claras dimensiones. La primera afecta a los preceptos que sobre temas laborales, sindicales y de seguridad social entiende cada partido y cada sindicato que deben figurar en la Constituci¨®n del Estado espa?ol en que ha de cristalizar el per¨ªodo constituyente que la izquierda propugna. La segunda dimensi¨®n estar¨ªa constituida por el panel de leyes laborales y de seguridad social que ha de sustituir al caos legislativo actualmente vigente, de clara inspiraci¨®n capitalista.

Temas como la definici¨®n de los derechos humanos y sindicales de los trabajadores, la jornada laboral, la organizaci¨®n del trabajo, la seguridad e higiene laboral, el control obrero de la empresa, la supresi¨®n del actual sistema de seguridad social para entrar de lleno en una seguridad social para todos los ciudadanos, el control obrero de la seguridad social, la articulaci¨®n de una administraci¨®n laboral al servicio de la comunidad, la superaci¨®n de las Magistraturas de Trabajo, y muchos m¨¢s, requieren que dejemos de hablar de ellos de manera superficial para enfrentarnos con su ordenaci¨®n racional y sistem¨¢tica en forma de programa pol¨ªtico de la izquierda. Al menos tienen que hacerlo los partidos que quieran incorporar sus programas a la realidad del pa¨ªs.