Por una diferencia de 70 votos, en una agitada sesi¨®n, se aprob¨® la Reforma del C¨®digo Penal
La sesi¨®n plenaria tuvo. junto a otros atractivos, la incertidumbre del resultado -por vez primera en 35 a?os de Cortes Espa?olas-, a la que cabe sumar la viveza, del di¨¢logo entre el presidentFern¨¢ndez-Miranda y algunos procuradores disidentes en los moinentos de mayor confusi¨®n, la constataci¨®n de la firme posici¨®n anticomunista de amplios sectores de la C¨¢mara, que no se conforman con la exclusi¨®n jur¨ªdica de] PC sino que exigen, adem¨¢s, su condenaci¨®n pol¨ªtica, y la curiosa coincidencia de posiciones entre los procuradores m¨¢s inmovilistas y algunos de los m¨¢s avanzados, en la votaci¨®n,negativa contra el proyecto de ley aprobado ayer.La decantaci¨®n de actitudes a trav¨¦s de tres votaciones nominales sucesivas, llev¨® a unir coyunturalmente al m¨¢s puro bunker y a la m¨¢s neta progres¨ªa parlamentaria: los primeros, porque no hab¨ªan logrado introducir la ?licitud expresa del Partido Comunista, y los segundos, porque hab¨ªa sido rechazada la propuesta que exclu¨ªa del juego pol¨ªtico a los partidos conti-arios al pluralisrilo.para G-_-Zu. dirle, respetuosa pero antirregla mentariamente, la consideraci¨®n yAl comienzo de 1.-~ sesi¨®n, el ~,,iior Fern¨¢ndez-riliranda expres¨® ii s~,.!,,ido al nuevo Gobierno y, a su 1,residente, Adolfo Su¨¢rez, a quien cesc¨® acierto y le anunci¨® su colaboraci¨®n.Expres¨® tambi¨¦n el ?afectuoso saludo a Carlos Arias, que hoy, nos honra -dijo- al tomar asiento entre nosotros como procurador en Cortes?. Los procuradores aplaudieron en este moiriento -no lo hab¨ªan hecho al ser aludido el nuevo presidente del Gobierno-, y el se?or Arias Navarro, desde su esca?o, tuvo que incorporarse y saludar.Antes de iniciarse la sesi¨®n, nu merosos procuradores abrazaron y felicitaron al se?or Su¨¢rez y a los restantes miembros de? Gobierno que ocuparon -la mayor¨ªa de ello por primera vez-, su lugar en el banco azul, tras jurar, los que no son procuradores por otro concepA continuaci¨®n, con una gran moderaci¨®n en el tono, defendie ron el dictamen de la Cornisi¨®n de Justicia, por la ponencia, Escriv¨¢ de Roman¨ª, y en nombre del Gobierno, Landelino Lavilla.Seguidamente, el presidente de las Cortes manifest¨® con tono ir¨®nico el recuerdo que se le hab¨ªa hecho, tanto desde dentro comodesdejuiera, de sus obligaciones Agradezco que se mefortalezca la memoria, dijo. y pas¨® a se?alar que sus facultades reglamentarlas no le permit¨ªan infringir las normas es tablecidas para el procedimiento de urgencia, que se remiten al Re glamento en lo que se refiere al de recho a intervenir en el Pleno. Era la respuesta a los procura dores de los cuatro grupos parla mentarios que se hab¨ªan dirigido al presidente de las Cortes para pevotaci¨®n en el Pleno de un texto espont¨¢neo por el que se declarar¨¢n il¨ªcitos en todo caso, los grupos, asociaciones o partidos comunistas, nacionales o internacionales. Con el texto. se pretend¨ªa aco rralar las remotas posibilidades que pudieran quedar de que un comunismo nacional pudiera ser admitido. Y los grupos parlamen tarios citados hab¨ªan confiado en liacerlo viable a destienipo, a trav¨¦s de la capacidad interpretativa y supletoria de las lagunas produci das por duda u omisi¨®n. Pero para el presidente Fern¨¢ndez-M ?randa no hab¨ªa dudas. Nada le obligaba a someter el texto a votaci¨®n v todo se lo imped¨ªa. Lament¨¢ndolo -dijo ten¨ªa que cumplir el Reglamento. En cuanto a la sugerencia que, en calidad de voto particular, hab¨ªa sido aprobada por la Comisi¨®n de Justicia, el se?or Fern¨¢ndez-Mi randa deleg¨® sus atribuciones en el Pleno, al que pregunt¨® si conside- raba procedente que fuera someti do a votaci¨®n el texto sugerido. Se trataba de una mera votaci¨®n prospectiva, por la que el mismo Pleno que aprob¨® las l¨ªneas funda mentales de] dictamen, permitiera modificar el punto quinto del art¨ªculo 172 de? C¨®digo Penal, en un sentido diferente al aprobado por el Pleno.7 La votaci¨®n ordinaria no fue suficiente, ni siquiera con el sistema de visibilidad manifiesta. Y hubo que proceder a la primera votaci¨®n riorninal. El Gobierno se abstuvo. Por una diferencia de 23 votos, el Pleno dio v¨ªa libre a la consideraci¨®n del texto por el que la alusi¨®n a los partidos totalitarios de discipliria internacional se sustitu¨ªa por la ilicitud de las asociaciones que, ?por su objeto, programa, actuaci¨®n o circunstancias, atenten a la dignidad o a la libertad humanas, o sean contrarias al pluralismo asociativo como medio para la participaci¨®n pol¨ªtica?. La f¨®rmula parec¨ªa tener el consenso de la ponencia y del Gobierno, en nombre de las cuales los se?ores Escriv¨¢ de Rornan¨ª y Lavil¨ªa, hab¨ªan estimado correcta la sugerencia, sin rechazar de plano el texto aprobado por el Pleno, y sin mencionar siquiera la propuesta no reglamentarla de los cuatro grupos parlarnentarios. En la votaci¨®n de esta sugerencia, el Gobierno volvi¨® a abstenerse. Previamente, hubo momentos de confusi¨®n a prop¨®sito del cierre de las puertas de acceso al hemiciclo. Ante los nervios de algunos procuradores. Fern¨¢ndez-Miranda ordenaba alternativamente ?-¨¢branse-?, ?i ci¨¦rrense-?, y ante i 1 1 1 alguna pregunta que le formul¨® por escrito, al parecer, el se?or Fern¨¢ndez de la Mora, se?al¨®: ?Repasen, se?ores procuradores, nuestro Reglamento?. (El citado procurador hab¨ªa dedicado parte de la sesi¨®n a leer y subrayar un libro que, desde la tribuna de prensa, no parec¨ªa coincidir con ninguna de las ediciones conocidas del Reglamento de la C¨¢niara). La sugerencia progresiva de la Comisi¨®n deJusticia fue rechazada por una diferencia de 42 votos. Terminada esta votaci¨®n, y pocodespu¨¦s de haber le¨ªdo una nota que le entreg¨® en mano el se?or Su¨¢rez, el se?or Fern¨¢ndez-Miranda anunci¨® que a continuaci¨®n se votaria por separado el punto quinto del art¨ªculo 172, seg¨²n el dictamen de la ponencia, y despu¨¦s el dictamen, en su totalidad.Aprobado finalDe ser posible reglamentariamente tal votaci¨®n, hab¨ªa supuesto la posibilidad de que se eliminara el grotesco texto alusivo a la disciplina internacional y los partidos te) ta 11 ta rio s. Pero e 1 se?or Fern¨¢ndez-M )randa pareci¨® preferir pensarlo mejor y concedi¨® un descanso, al t¨¦rm no del cual manifest¨® que lo que proced¨ªa era someter a votaci¨®n la totalidad del dictamen. Pretendi¨® el presidente de las Cortes no alterar demasiado la hora del almuerzo de los procuradores, y se hizo votaci¨®n ordinaria. No pareci¨® suficientemente clara, y hubo que repetirla nominalmente (por tercera vez, 530 procuradores fueron llamados a votar). La frustraci¨®n producida entre los procuradores del sector inmovilista por la no toma en consideraci¨®n ,de su propuesta -as¨ª como, seg¨²n ,se respiraba en los pasillos, la indignaci¨®n que les originaba que Fern¨¢ndez-M ?randa no colaborara con ellos- hizo que se viera peligrar la aprobaci¨®n del proyecto de ley. A estos noes se unieron los de algunos otros procuradores -del tipo contestatario de los hermanos Cerc¨®s y Fidel Carazo (¨¦ste portaba unos zapatos rojos, ajuego con una corbata del mismo color)-, que tambi¨¦n se mostraron contrarios al proyecto de ley sobre modificaci¨®n del C¨®digo Penal. El Gobierno -al,,unos de cuvos miembros hac¨ªan su recuento par,Acular de los votos (el presidente ~Su¨¢rez, Osorio, Reguero, Lozano. De la Mata)- vot¨® en esta ocasi¨®n s¨ª y el resultado total fue de 70 votos de diferencia a favor del dictarnen. Terminado el Pleno, a las tres menos diez de la tarde, tras m¨¢s de cuatro horas de sesi¨®n, el sector de procuradores derrotados, encabezado por el anterior presidente de i.as Cortes, Rodr¨ªguez de Valc¨¢rcel, insistieron erre que erre en que se condene al Partido Comunista, y con la firma de m¨¢s de 60 procuradores, presentaron una proposici¨®n de ley para que se a?ada un nuevo p¨¢rrafo al apartado quinto del art¨ªculo 172 del C¨®digo Penal por el que se declaren ?l¨ªcitos los grupos, asociaciones o partidos coniunistas nacionales o internacionales.
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