Acuerdo franco-sovi¨¦tico para prevenir accidentes nucleares
La agencia sovi¨¦tica de noticias Tass inform¨® ayer que Francia y la Uni¨®n Sovi¨¦tica firmaron un acuerdo referente a la ?prohibici¨®n del empleo accidental y no autorizado de armas nucleares?.El acuerdo lo firmaron los ministros de Asuntos Exteriores de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y Francia, Andrei Gromiko y Jean Sauvagnargues, respectivamente, en presencia de los tres altos representantes sovi¨¦ticos del Partido y el Gobierno, Breznev, Kossyguin y Podgorny.
La presencia en el acto de la firma del secretario general del Comit¨¦ Central del PCUS, Le¨®nidas Breznev, resalt¨® un acto que hasta entonces hab¨ªa revestido poca importancia. Comenzando con el escaso relieve que prest¨® la prensa sovi¨¦tica a la llegada de Sauvagnargues el jueves pasado a Mosc¨².
Sin embargo, la actitud de ayer corvirti¨® a un acto protocolario en un acontecimiento solemne.
A pesar de ciertas cr¨ªticas en las ¨²ltimas semanas, los sovi¨¦ticos demostraron que a¨²n tienen confianza en la pol¨ªtica exterior francesa y que la referencia de Breznev en el XXV Congreso del PCUS, en febrero-marzo pasado, permanece inalterable. En aquella ocasi¨®n coment¨® el secretario general, ?Tenemos en alta estima nuestras relaciones con Francia y estamos dispuestos a ampliar a¨²n m¨¢s la esfera de detente y cooperaci¨®n entre lo dos pa¨ªses?.
El acuerdo fue ultimado en la ¨²ltima visita de Gromiko a Par¨ªs los d¨ªas 27 al 30 del pasado mes de abril. Si bien, la iniciativa de conseguir esta medida nueva en las relaciones franco-sovi¨¦ticas parti¨® del presidente Giscard durante la entrevista que mantuvo con Breznev en 1974. Hasta despu¨¦s de la conferencia de Helsinki, la URSS no hab¨ªa respondido concretamente a las propuestas francesas. Luego en poco menos de un a?o, los puntos de vista de Breznev se flexibilizaron hasta el punto de conseguir el acuerdo, definitivamente ultimado con la visita de Gromiko a Par¨ªs.
De la lectura del acuerdo firmado se extrae la primera consecuencia de que ambas partes est¨¢n dispuestas a ampliar la cooperaci¨®n en materia de detente de forma muy similar a la que han venido manteniendo los Estados Unidos y la Uni¨®n Sovi¨¦tica.
Junto a las promesas verbales de intentar evitar cualquier accidente nuclear se destaca el hecho de un reforzamiento en la comunicaci¨®n directa entre el Kremlin y el El¨ªseo, para evitar malentendidos. El tel¨¦fono rojo ser¨¢ apoyado por una l¨ªnea directa v¨ªa sat¨¦lite. En caso de accidente nuclear, la situaci¨®n se ?clarificar¨¢ r¨¢pidamente?, entre Par¨ªs y Mosc¨².
Finalmente, la visita de Sauvagnargues no permite saber en un principio si Breznev visitar¨¢ en el curso del presente a?o Francia, tema que tambi¨¦n abord¨® Gromiko en su ¨²ltima entrevista con Giscard.
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