Los vecinos de Pe?a Chica, contra la divisi¨®n del barrio
Doscientas familias del barrio de Pe?a Chica dirigieron hace unos d¨ªas un informe al gerente municipal de Urbanismo y al arquitecto jefe de la Gerencia para explicar al organismo municipal la situaci¨®n de una zona en la que confluyen una serie de intereses inmobiliarios con la lucha que los firmantes vienen manteniendo desde hace cuarenta a?os.
Seg¨²n los vecinos, el principal problema con el que se encuentra el barrio se centra en la repartici¨®n existente de la zona al haber quedado dividido en dos Juntas de Compensaci¨®n, que afectan a los pol¨ªgonos 22 y 23, y una parte del terreno que se expropiar¨ªa por el Ministerio de Obras P¨²blicas para la realizaci¨®n del cuarto cintur¨®n de Madrid.El barrio, fundado hace 40 a?os, comenz¨® sus problemas cuando fue incorporado al t¨¦rmino municipal de Fuencarral y qued¨® bajo el Plan Veguilla Valdezarza Vertedero. En un informe social que un grupo de vecinos realiz¨® posteriormente se protest¨® por la situaci¨®n que resultaba de la aplicaci¨®n de este Plan. Seg¨²n el informe, el Plan hab¨ªa sido realizado sin tener en cuenta a los vecinos y las edificaciones existentes. De esa forma, opinaban, ?los vecinos somos entregados a las inmobiliarias a trav¨¦s de las Juntas de Compensaci¨®n?.
Estas inmobiliarias a las que se refieren son: Azagra, SA y Cooperativa San Enrique que poseen en la actualidad un 60 por 100 de los pol¨ªgonos a trav¨¦s de la compra de terreno a los antiguos propietarios. Con la creaci¨®n de las Juntas de Compensaci¨®n los 200 propietarios que quedan en la sona son minor¨ªa frente a las decisiones que tomen las empresas constructoras.
Estas, que comenzaron inmediatamente la construcci¨®n de viviendas ?han destrozado el barrio? ,a juicio de los vecinos que adem¨¢s acusan a las empresas de haber realizado la construcci¨®n de viviendas sin licencias.
El resultado de las obras realizadas hasta el momento han hecho protestar repetidas veces a los vecinos: ?nos han cerrado caminos naturales; ni los taxis, ni las ambulancias pueden entrar, han aislado nuestras viviendas?.
Peligros
Otros problemas con los que se han encontrado los vecinos como consecuencia de las obras de construcci¨®n afectan a unos desmontes que suponen un peligro por su proximidad a las viviendas. Este peligro no s¨®lo es f¨ªsico sino que aprovechando la poca iluminaci¨®n existente se han dado ya varios robos y agresiones contra los peque?os propietarios. El ¨²ltimo de ellos fue ayer, en la calle Villaamil.
La falta de transportes en la zona se hace m¨¢s evidente ante la carencia absoluta de escuelas, institutos, centros de Formaci¨®n Profesional, o ambulatorios, raz¨®n por la que diariamente los vecinos deben recorrer los descampados que rodean el barrio con grave peligro para su integridad f¨ªsica. Ante esta situaci¨®n y a petici¨®n del secretario del director general de la Vivienda, se realiz¨® una encuesta entre los vecinos para ver las posibles soluciones. El resultado de la misma as¨ª como todos los tr¨¢mites realizados durante los tres ¨²ltimos a?os han sido totalmente nulos, ?estamos hartos de buenas palabras y de la falta de decisiones que nos permiten dormir tranquilos?.
Las peticiones de los vecinos se centran en la paralizaci¨®n de las obras iniciadas y suspensi¨®n de las licencias concedidas o a punto de concederse hasta que no se haya llegado a un acuerdo entre todos los afectados; creaci¨®n de una Comisi¨®n mixta (vecinos, inmobiliaria, Gerencia) que estudie la modificaci¨®n del Plan; la petici¨®n al Ministerio de la Vivienda para que promueva viviendas sociales en los 10.500 metros cuadrados que los peque?os propietarios pueden ofrecer al organismo estatal y la solicitud de sanciones ejemplares para las ilegalidades de las inmobiliarias. ?Los vecinos estamos dispuestos a defender nuestros derechos. No estamos dispuestos a ser carne de la especulaci¨®n?.
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