Disgusto popular en Canarias por el aumento del precio de la gasolina

?Con la infortunada decisi¨®n de subir el precio de la gasolina, el Gobierno ha prestado un gran servicio a los autonomistas canarios?, aseguraba ayer un destacado l¨ªder canario de la oposici¨®n, quien se explicaba as¨ª: ?A los ojos de los menos mentalizados ha quedado claro que el Gabinete Su¨¢rez, como los anteriores, sigue ignor¨¢ndonos. Su despreocupaci¨®n por los problemas del archipi¨¦lago le ha hecho cometer el error de olvidar las peculiaridades isle?as en cuanto a la naturaleza del transporte y a hacer caso omiso de la ley de R¨¦gimen Econ¨®mico y Fiscal de Canarias, si es que en el Ministerio de Industria sab¨ªan que exist¨ªa.?Todos los medios de difusi¨®n de Canarias, incluyendo los m¨¢s oficializados, han recogido la sorpresa y el disgusto popular suscitados por la subida del carburante. En la calle se aguarda ahora la suerte que pueda correr el recurso que interpondr¨¢n la Junta Interinsular de Arbitrios y la Junta Econ¨®mica de Canarias, cuyo parecer no fue solicitado, y a quien, seg¨²n el citado texto local, correspond¨ªa decidir, raz¨®n por la cual ambas Juntas califican de ?plenamente antijur¨ªdico? el aumento de precio.

En este clima de desconfianza, la misma pregunta ha nacido en boca de economistas, juristas en general, hombres que viven de cerca la vida socio-pol¨ªtica isle?a: ??De qu¨¦ nos va a servir el R¨¦gimen Administrativo Especial??

El pr¨®ximo mes de octubre saldr¨¢ a informaci¨®n p¨²blica el proyecto de R¨¦gimen Administrativo Especial de Canarias. Est¨¢ fuera de duda el contenido democr¨¢tico de la intenci¨®n de los siete cabildos de la regi¨®n -encargado de recoger las sugerencias-, pero la cuesti¨®n fundamental es la de orden pr¨¢ctico: ??Qui¨¦n nos garantiza que Madrid nos har¨¢ caso??

Evidentemente, en Canarias se ha vuelto a replantear, con mayor y m¨¢s amplia base, una crisis de confianza para el poder central, y una m¨¢s decidida aspiraci¨®n hacia una autonom¨ªa que permita el desarrollo del archipi¨¦lago y le ponga a salvo de lejanas decisiones que se adoptan marginando los intereses de la poblaci¨®n insular.