San Vicente de Alc¨¢ntara: enfrentamiento en el seno de la corporacion municipal
Tres denuncias y una querella se est¨¢n tramitando en los juzgados de instrucci¨®n de Badajoz por presuntos delitos surgidos en el seno de la Corporaci¨®n municipal de San Vicente de Alc¨¢ntara, pueblo de unos 6.000 habitantes a setenta kil¨®metros de la capital. Los presuntos delitos abarcan desde ofensas personales hasta intereses p¨²blicos.
Al parecer, todo empez¨® en 1974 en el acto constituyente del nuevo Ayuntamiento, tras las elecciones municipales, cuando la concejal Mar¨ªa Josefa Le¨®n Mart¨ªn puso una tacha a otro nuevo concejal reelegido, Francisco Tomeno, en virtud del art¨ªculo 79, apartado tres, de la ley de R¨¦gimen Local, por presuntas incompatibilidades, ya que este ¨²ltimo concejal suministraba productos suyos al Ayuntamiento, incluso por partidas superiores a las 10.000 pesetas.A la tacha formulada por la concejal se adhirieron otros cuatro concejales de los ocho de que consta la Corporaci¨®n, los se?ores Jociles, Cano, Segura y Rodr¨ªguez Morujo. Es decir, cinco concejales pusieron la tacha al reelegido se?or Tomeno. Otro de los concejales, Julio Gonz¨¢lez Pedrero, se abstuvo y el resto se hab¨ªa excusado en su asistencia. Era entonces alcalde el farmac¨¦utico del pueblo, se?or Santos, y el secretario (que sigue actualmente), Enrique Flores, abogado.
El Ayuntamiento se constituye sin que quede resuelto el asunto de la tacha, que, por cierto, todav¨ªa sigue sin solucionarse, seg¨²n afirman cuatro concejales. En la sesi¨®n siguiente a la de la constituci¨®n, de primeros demarzo de 1974, hab¨ªa que entrar a conocer sobre lat acha expuesta, pero no asiste la concejal Mar¨ªa Josefa Le¨®n, que la hab¨ªa puesto, ya que se hab¨ªa desplazado a Madrid. El secretario lee el borrador y los concejales lo firman, pero en la tercera sesi¨®n siguiente, que ya asiste la concejal, ¨¦sta dice al serle presentado el libro de actas, que, en relaci¨®n con la tacha se citaba el art¨ªculo 33 del reglamento de Corporaciones Locales y no el que ella hab¨ªa referido que era aquel el que desarrollaba el art¨ªculo 79 y es entonces cuando la concejal pide al secretario que lea el referido art¨ªculo, ya que no sabe en qu¨¦ t¨¦rminos viene expresado el se?alado en el acta. El secretario afirm¨® que se ten¨ªa que leer con la venia del alcalde, y ¨¦ste, que era el mimo concejal tachado quien asum¨ªa el canrgo en funciones, el se?or Tomeno, no dio la venia para que fuera le¨ªdo; por esta circunstancia la concejal se neg¨® a firmar el borrador del acta anterior y cuatroa concejales m¨¢s se adhirieron a la postura tomada por la concejal Mar¨ªa Josefa Le¨®n, alegando que a ellos tampoco se les hab¨ªa le¨ªdo tal art¨ªculo en presencia de la concejal.
Presuntas irregularidades
Durante este tiempo han quedado actas del Ayuntamiento sin firmar por varios concejales. Se pidi¨® al entonces gobernador se?or Zurr¨®n, que solucionara el asunto, ya que persist¨ªan estas presuntas irregularidades. Y el gobernador nombr¨® a F¨¦lix Chaparro ex capit¨¢n del Ej¨¦rcito, alcalde de San Vicente de Alc¨¢ntara.El pasado 28 de julio, el concejal se?or Jociles, present¨® varias mociones al pleno. Una de ellas, ped¨ªa que se leyera el acta de constituci¨®n del Ayuntamiento actual y la de la sesi¨®n siguiente a la de constituci¨®n, con el fin de que el pleno de la Corporaci¨®n municipal diera una soluci¨®n viable al asunto. Dicha moci¨®n fue rechazada por el alcalde, y no lleg¨® al pleno. Ante la falta de inclusi¨®n de la moci¨®n, el concejal se?or Jociles, solicit¨® que se extendiera una certificaci¨®n de las sesiones constituyentes del actual Ayuntamiento, cosa que tambi¨¦n le fue denegada. En el pleno siguiente, en el apartado de ruegos y preguntas, el citado concejal pidi¨® una explicaci¨®n p¨²blica de las causas que motivaron la negativa de la certificaci¨®n y el alcalde le dijo que ya la hab¨ªa contestado por escrito.
El se?or Jociles habl¨® de la obligaci¨®n de dar a una autoridad estas certificaciones, y afirm¨® que, si ¨¦l como concejal no era una autoridad competente, que informara al secretario sobre este asunto. El secretario habl¨® de que necesitaba unos d¨ªas para hacer esto. Aqu¨ª el se?or Jociles afirm¨®: ?Entonces qu¨¦ secretario eres t¨² que ... ? Cort¨® el secretario y posteriormente reflej¨® en el acta las siguientes palabras: ? Entonces qu¨¦ secretario eres t¨²... que no sabes de la misa la mitad. ? Como consecuencia de esto, el_propio secretario del Ayuntamiento ha promovido actuaciones penales en el juzgado de instrucci¨®n de Badajoz, contra el se?or Jociles, por supuestas injurias.
Actuaciones judiciales
Con posterioridad a la moci¨®n, de fecha 28 de julio pidiendo las certificaciones de las actas, el alcalde de San Vicente de Alc¨¢ntara, se?or Chaparro, como presidente de la Corporaci¨®n ha exigido a todos y cada uno de los concejales la firma de las actas que estaban sin firmar desde 1974. Se avisaba a los concejales por medio de oficios, de que en caso de no atender el presente requerimiento ?esta alcald¨ªa pondr¨¢ el hecho en conocimiento del excelent¨ªsimo se?or gobernador civil de la provincia, a los efectos procedentes y del juzgado de instrucci¨®n de este partido por si fuera constitutivo de la figura delictiva tipificada en el art¨ªculo 369 del vigente C¨®digo Penal, en relaci¨®n con el p¨¢rrafo tres del art¨ªculo 119 del mismo texto legal o de cualquier otra?.Seg¨²n parece. los tres concejales que no firmaron las actas siguientes a las de constituci¨®n del Ayuntamiento aducen que no se ha resuelto la tacha y otras irregularidades. Ahora estos tres concejales han sido requeridos por el juzgado de instrucci¨®n para que declaren al respecto, ya que el alcalde ha promovido actuaciones judiciales penales.
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