Juicio en Lisboa contra un miembro de la PIDE
Un miembro de la PIDE (polic¨ªa Internacional y de Defensa del Estado), acusado de asesinar al militante comunista Jos¨¦ D¨ªaz Coelho, est¨¢ siendo juzgado en Lisboa. En virtud de una ley aprobada por el Consejo de la Revoluci¨®n en 1975, el ex miembro de la polic¨ªa pol¨ªtica salazarista puede ser condenado a ocho a?os de prisi¨®n.Anteriormente, un juez del Tribunal Militar de Lisboa se hab¨ªa negado a iniciar el proceso por considerar que la mencionada ley era ?anticonstitucional?. Finalmente, el Tribunal Supremo ha decidido que la ley se ajusta perfectamente a la Constituci¨®n y los ex polic¨ªas ser¨¢n juzgados. Como siempre, los partidos pol¨ªticos portugueses est¨¢n divididos en cuanto al tema: comunistas y socialistas son partidarios de que sean juzgados y socialdem¨®cratas y centristas prefieren que el tema sea olvidado.
Oficialmente, la PIDE contaba con unos 2.000 ?funcionarios? que perdieron su empleo con el golpe de Estado de ?los capitanes?. Algunos centenares lograron huir, pero no menos de 1.200 fueron a dar con sus huesos en la c¨¢rcel. El tema ha sido siempre pol¨¦mico, porque las autoridades militares han ido liberando intermitentemente a los antiguos polic¨ªas. Actualmente, el n¨²mero de detenidos, entre los que se encuentra su ¨²ltimo director, el comandante Silva Pais, no es superior a la decena.
La ley que ser¨¢ aplicada a los ?pides? por su retroactividad, y de aqu¨ª la acusaci¨®n de inconstitucionalidad, puede hacer recaer sobre los agentes una condena de dos a ocho a?os de prisi¨®n. La condena, sin embargo, indican las autoridades militares, ?les ser¨ªa impuesta por extralimitarse en sus funciones? y ?no por pertenecer a la polic¨ªa pol¨ªtica, raz¨®n por la que no todos ser¨¢n juzgados.
La realizaci¨®n de los juicios contra las ?pides? cuenta con la oposici¨®n incluso de algunos militares, que consideran que ¨¦stos ?s¨®lo cumplieron con su deber?. Algunos observadores se?alan que, como en el caso de los terroristas de extrema derecha, importantes revelaciones que complicar¨ªan a personalidades civiles y militares, podr¨ªan darse a conocer en estos juicios.
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