Moratalaz: el Ministerio de Educaci¨®n no reconoce 24 unidades escolares

Desde 1972, a?o en que fueron creadas ocho aulas prefabricadas para impartir clases de EGB, la Asociaci¨®n de Vecinos y Cabezas de Familia de los pol¨ªgonos E y Z de Moratalaz se hacen cargo de los gastos que estas aulas ocasionan, teniendo en cuenta que desde 1972 se han construido un total de veinticuatro locales. Cuando han recurrido al Ayuntamiento para que corriera con los gastos del alquiler de las aulas, les han respondido que era imposible porque el centro no est¨¢ creado oficialmente, mientras que la respuesta del Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia ha sido que no les incumb¨ªa porque los locales no son un centro oficial. Ante estas respuestas, el presidente de la asociaci¨®n manifest¨® la extra?eza de los vecinos de que no se les considere centro oficial a efectos de financiar locales y profesorado mientras que para servicios de mantenimiento y limpieza s¨ª les env¨ªan dinero, adem¨¢s de haber permitido la creaci¨®n de una Asociaci¨®n de Padres de Alumnos, de cuya existencia tiene total conocimiento el Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia.Esta situaci¨®n comenz¨® en 1972 cuando la asociaci¨®n vio el d¨¦ficit de plazas escolares existentes en el barrio y consigui¨® que el Ministerio abriera ocho unidades de EGB. Entonces consiguieron a trav¨¦s de Antonio Horcajo, entonces jefe local del Movimiento, que la inmobiliaria Urbis cediera unos locales voluntariamente. La asociaci¨®n consigui¨® profesorado, con car¨¢cter de contratado, y las aulas empezaron a funcionar sin estar adscritas a ning¨²n organismo.

Nuevamente, en 1974, se abrieron catorce nuevas aulas que junto con las anteriores quedaron vinculadas al colegio nacional Sainz de Vicu?a. A partir de ese momento tanto padres de alumnos como la asociaci¨®n empezaron a enviar cartas al Ministerio solicitando la creaci¨®n urgente de un colegio. M¨¢s tarde se crearon dos nuevas unidades que pasaron a depender del colegio Nuestra Se?ora de la Monta?a.

A finales de 1975, la asociaci¨®n plante¨® a la Delegaci¨®n de Ense?anza la necesidad de crear un aut¨¦ntico colegio. La respuesta fue que en cuanto tuvieran terrenos se empezar¨ªa a construir. Tras gestiones realizadas por los vecinos, ante Gerencia Municipal de Urbanismo y Area Metropolitana, se enteraron que desde el 31 de enero de 1973 el pol¨ªgono R de Moratalaz estaba reservado para zona escolar, pero que el Area Metropolitana tiene el proyecto de destinar el pol¨ªgono tambi¨¦n para viviendas. La asociaci¨®n de vecinos manifest¨® que no est¨¢n dispuestos a consentir que el proyecto se modifique, quieren que ese terreno sea dedicado ¨ªntegramente a zona escolar.

?La oposici¨®n de los vecinos no fue a un centro destinado para subnormales, sino que igualmente se hubieran opuesto a cualquier otro tipo de taller. Por otra parte, la instalaci¨®n de un taller de cer¨¢mica puede ser peligroso; Nosotros no nos fiamos de las inspecciones hechas por el Ayuntamiento.? As¨ª justificaron dos vecinos de la finca en que se encuentra el taller situado en la calle Augusto Gonz¨¢lez de Besada, n¨²mero dos, y donde los vecinos han impedido la entrada al cuarto de contadores a los electricistas que iban a enganchar los cables de los hornos a la red.

Para intentar aclarar las posturas de cada una de las partes se celebr¨® ayer una rueda de prensa en los locales de la Asociaci¨®n de Vecinos y Cabezas de Familia de los pol¨ªgonos E y Z de Moratalaz. D¨ªas antes, la asociaci¨®n hab¨ªa invitado a los 57 vecinos de la finca, por medio de una carta, pero a la rueda s¨®lo asistieron el presidente y vicepresidente de la comunidad, quienes en un primer momento negaron pertenecer a la junta directiva y se presentaron como dos inquilinos que ?hab¨ªan le¨ªdo la carta, pero que pensaban que se iba a tratar del problema de los subnormales de una forma general y pensando que la reuni¨®n podr¨ªa enriquecerles?. Despu¨¦s de manifestar esto, la directora del centro les aclar¨® que all¨ª se iba a tratar de un problema muy concreto referente a subnormales que est¨¢n en el taller de unos bajos, situados en la finca de la que ellos eran presidente y vicepresidente. Estos dos se?ores calificaron entonces la reuni¨®n de ser ?una encerrona?.