Optimismo para la econom¨ªa brit¨¢nica
Cuando todo el mundo ha venido sustentando la profunda convicci¨®n de que las dificultades relacionadas con la balanza de pagos constituye uno de los mayores problemas econ¨®micos de Gran Breta?a, ha sorprendido un tanto a los ingleses -concretamente a los lectores del prestigioso semanario The Economist- el vaticinio de que en el a?o 1978 Gran Breta?a registrar¨¢ el mayor excedente de su balanza de pagos en toda la historia.The Economist circula y se lee en todos los circulos oficiales y en el mundo de los negocios y las finanzas. Lo que dice se toma, por tanto, muy en serio. De modo que su predicci¨®n, -incluso si resulta falsa, tendr¨¢, sin duda, un resultado satisf¨¢ctorio para este pa¨ªs: el de aumentar la confianza del mundo de los negocios en su futuro. Esto, como es bien sabido, es un factor de importancia en toda recuperaci¨®n econ¨®mica.
La inflaci¨®n se habr¨¢ reducido -seg¨²n esas predicciones- a un mero 5% durante los dos pr¨®ximos a?os (es ahora del 14 o del 1-5 %). La productividad aumentar¨¢ a un 4%.
Parece ser que todas estas previsiones se han obtenido, no por puro efecto de la imaginaci¨®n, sino por el m¨¦todo m¨¢s cient¨ªfico posible: el del ordenador electr¨®nico. Se le alimentaron unos datos no refutados ni por el m¨¢s pesimista y salieron resultados que sorprendieron al m¨¢s optimista. Brian Redding, director de la secci¨®n correspondiente en The Economist, habl¨® por la radio para explicarlo: ? El petr¨®leo de los yacimientos del mar del Norte a?adir¨¢ 345.000 millones de pesetas a la balanza de pagos>> ?A?adir¨¢ tambi¨¦n un 1 o un 2% al crecimiento y devengar¨¢ unos 235.000 millones en impuestos. Otro factor -dijo el se?or Redding- es que somos muy competitivos ahora en el extranjero, y una vez que haya vuelto la confianza podemos esperar un tremendo auge de las exportaciones. ?
Brian Redding se?ala que el descenso del nivel de vida brit¨¢nico deber¨¢ terminar el a?o que viene, y de entonces en adelante todo ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil.
The Economist advierte que no hay que olvidar una cosa: la necesidad de un cambio de actitud en este pa¨ªs por lo que a los conceptos de la relaci¨®n entre esfuerzo y, remuneraci¨®n se refiere...
De lo contrario entraremos en otra crisis econ¨®mica a partir de 1978.
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