Alerta "tory" para Callaghan
La se?ora Thatcher, lady de acero -como la llaman los sovi¨¦ticos-, proclam¨® ayer, por segunda vez en un a?o, el estado de alerta en la jefatura ?tory?. El propio se?or Heath habr¨ªa recibido una carta de la Thatcher en la que se le indica que los conservadores deben estar preparados para asumir el Gobierno ante la inminencia de una crisis laborista, que obligar¨ªa al premier Callaghan a convocar unas elecciones generales anticipadas.Lady de acero, que en menos de treinta d¨ªas ha conversado ya dos veces -secretamente- con el se?or Jack Jones y otros dirigentes de las Trade Unions, no anda desencaminada. Con una mayor¨ªa m¨¢s que exigua en los Comunes, Callaghan tiene hoy que afrontar dos problemas, a cual m¨¢s dif¨ªcil: la autonom¨ªa de Escocia y Gales, que el mismo Callaghan plante¨® para atraerse el respaldo de los diputados galeses y escoceses, y el pacto social con los sindicatos. La marcha de este asunto pareci¨® clara el jueves pasado, cuando el ministro de Industria, Erie Verley, fue recibido a tomatazos por los obreros de la factor¨ªa de la British Leyland, en Birmingham. En cuanto a la devoluci¨®n de poderes, el escollo consiste en que los representantes de Escocia y Gales exigen ahora tambi¨¦n una devoluci¨®n fiscal, es decir, poderes aut¨®nomos en la materia, sin los cuales podr¨ªan terminar por boicotear el proyecto de Callaghan. El petr¨®leo del Mar del Norte, claro est¨¢, anda por medio.?
S¨®lo resta saber si la se?ora Thatcher, opuesta -pero no del todo- a la independencia regional, consigue ponerse de acuerdo con Jones y sus colegas sobre la libertad salarial, que ahora hasta Jones, coautor del pacto, casi preconiza. Si as¨ª ocurre, esta lady de acero puede hacerse de golpe autonomista, e incluso fisco-devolucionista. Y en ese caso, Callaghan tendr¨ªa que ir pensando en abandonar Dowinng Street.
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