?Por qu¨¦ las sospechas?

Sucedi¨® con el refer¨¦ndum. La Oposici¨®n hab¨ªa montado su campa?a sobre la abstenci¨®n; fue estrepitosamente derrotada; pero de aquella derrota, ?qui¨¦n se acuerda? Nos parece muy bien que se haya evitado todo triunfalismo en beneficio de la necesaria conciliaci¨®n puesto que el refer¨¦ndum se hizo para eso; pero eso no tiene nada que ver con quienes se comportan como si aquella votaci¨®n no hubiese acontecido nunca.Estamos presenciando ahora un fen¨®meno an¨¢logo con motivo del ¨¦xito pol¨ªtico m¨¢s importante del Gobierno despu¨¦s de aqu¨¦l: la liberaci¨®n de los secuestrados por el GRAPO y la desarticulaci¨®n en marcha de este grupo extremista. Empez¨® cuando se produjo el secuestro del se?or Oriol. Se aseguraba que las cosas no eran lo que parec¨ªan y se apuntaban sospecha de las que incluso sal¨ªa malparada la integridad del Gobierno.Por supuesto, ha habido declaraciones oficiales equivocas o notoriamente torpes y quedan puntos importantes por indagar. Nos sumamos, a los que, sin llegar a los extremos que censuramos, desean que se llegue a una informaci¨®n completa y plenamente satisfactoria. Esperamos tambi¨¦n que el esclarecimiento del asesinato de los abogados laboralistas complete el ¨¦xito de la dif¨ªcil operaci¨®n polic¨ªaca en dos frentes. Pero, volviendo al tema de los secuestros, por cuanto hasta el momento sabemos, no vemos que los hechos puedan ser invalidados por especulaciones retorcidas y artificiosas.?Estamos ante una simple manifestaci¨®n del ?sostenella y no enmendalla?? No querr¨ªamos que la explicaci¨®n fuese otra. Porque tambi¨¦n ah¨ª caben dudas y sospechas.

, 18 febrero