GRAPO: un misterio sin desvelar
Doce d¨ªas despu¨¦s de la liberaci¨®n de los se?ores Oriol y Villaescusa, los detenidos de los GRAPO contin¨²an en la Direcci¨®n General de Seguridad. No existe todav¨ªa auto de procesamiento, pero se cree que el juez encargado del caso podr¨ªa incoar el sumario pr¨®ximamente.
A este respecto se asegura en c¨ªrculos solventes que ha habido discrepan cias entre el juez del n¨²mero 8, de guardia el d¨ªa del secuestro del se?or Oriol, y el del n¨²mero 1, que era el antiguo titular del Tribunal de Orden P¨²blico. Este hab¨ªa re clamado su competencia, dado que el d¨ªa del secuestro el TOP segu¨ªa existiendo, pero finalmente se habr¨ªa decidido que al desaparecer despu¨¦s dicho Tribunal la compe tencia, l¨®gicamente, ser¨ªa del juez de guardia. Otras fuentes se?alan que el asunto podr¨ªa pasar a la Audiencia Nacional.Hay que decir que el ¨²nico resultado consolidado de las investigaciones hechas p¨²blicas pone de relieve la existencia de los GRAPO como un grup¨²sculo de extremistas de izquierda, activistas fanatizados de escasa formaci¨®n y mediano entrenamiento. Seg¨²n ha declarado el se?or Oriol, sus secuestradores guardaban varios libros sobre la revoluci¨®n rusa, que le¨ªan con frecuencia y que ten¨ªan cuidado de no olvidar en sus desplazamientos. Abominaban de Carrillo y del PCE, lo mismo que de Brejnev, la Uni¨®n Sovi¨¦tica y la actual China. Sus modelos te¨®ricos ser¨ªan la China de Mao y Albania. No se ha negado la posibilidad de que este grupo de borrachos de violencia, espiritualmente enfermos, que han elegido el mal como ideal, seg¨²n los calific¨® el comisario Conesa, pudiera haber sido manipulado o infiltrado por gentes de diverso signo pol¨ªtico. Pero esta posibilidad no se ha confirmado en absoluto. Tampoco puede hablarse, por el momento, de un mismo plan que asocie los asesinatos de Atocha y el del estudiante Arturo Ruiz con los secuestros y la matanza de polic¨ªas y guardias civiles, aunque ninguna hip¨®tesis es descartable.
Sobre los repetidos intentos negociadores del Gobierno durante el secuestro, se ha sabido que el nuncio ofreci¨® su mediaci¨®n, lo mismo que el se?or Ruiz-Gim¨¦nez, que fue el que puso en contacto a la Presidencia del Gobierno con el grupo de abogados que viaj¨® a Par¨ªs. Estos no han explicado claramente todav¨ªa las razones por las que no les fue permitida en primera instancia su entrada en la capital francesa. Por otra parte, se ha podido confirmar que durante los mismos d¨ªas un enviado de la familia, primero en Bayona, luego en Madrid y, m¨¢s tarde, en Par¨ªs, trat¨® de establecer Contactos con los GRAPO, a fin de llevar a cabo una negociaci¨®n sobre un rescate a cambio de una gran cantidad de dinero. Por otra parte, ha trascendido que existen numerosas diferencias entre los abogados a la hora de decidir la defensa de los detenidos. Estas diferencias se establecen sobre la base de la militancia pol¨ªtica de los letrados y las consignas de los diversos partidos que no quieren verse implicados en el asunto.
Mientras tanto, los GRAPO insisten en que deben ser tratados como prisioneros de guerra. Seg¨²n fuentes de la familia Oriol, Cerd¨¢n, el jefe del comando, ha solicitado incluso habliar con el ministro de la Gobernaci¨®n, pues aduce que es el general en jefe del comando del Ej¨¦rcito vencido. En virtud de lo mismo han rechazado la defensa de abogados civiles.
Por ¨²ltimo, las numerosas contradicciones en que han incurrido los protagonistas de los hechos y las propias notas oficiales no han logrado establecer la necesaria clarificaci¨®n de los mismos. He aqu¨ª una muestra de esto que decimos:
8 de febrero. Detenci¨®n de Juan Jos¨¦ D¨ªaz Fern¨¢ndez, ?Mart¨ªn?, en las proximidades, de San Fidel. Declara su propio domicilio. No declara, sin embargo, el domicilio de la calle San Fidel, donde ¨¦l y Hierro Chom¨®n vigilaban a los secuestrados. No confiesa la utilidad de las llaves que se le ocupan. No se rastrea la zona de San Fidel.
9 de febrero. Olegario S¨¢nchez Corrales es detenido. ?Esa misma noche se monta un servicio de vigilancia?, que culminar¨¢ ?momentos m¨¢s tarde? con la detenci¨®n de Cerd¨¢n (nota oficial del d¨ªa 14). Conesa declarar¨ªa a ABC que la detenci¨®n de Cerd¨¢n se produjo el d¨ªa 11, a las 10,20 de la ma?ana.
?Deciden cambiar inmediatamente de lugar a los secuestrados... Es el d¨ªa 9, mi¨¦rcoles? (Conesa).
10 de febrero. Un polic¨ªa detecta el coche utilizado por Cerd¨¢n, pista que sirve para montar el servicio de vigilancia sobre ¨¦l y para su ulterior detenci¨®n. ?Esto suced¨ªa la noche del jueves, 10? (Conesa).
11 de febrero. Conesa declara en ABC: ?Los secuestrados hab¨ªan estado juntos hasta esa misma ma?an¨¢?, la nota oficial nos indica que los traslados se efectuaron el d¨ªa 9. Oriol declar¨® a la prensa. extranjera que fue el d¨ªa 8.
Como puede verse, del relato oficial del suceso y de las declaraciones del director de las investigaciones es imposible deducir de una manera clara la fijaci¨®n, en el tiempo, de las detenciones y de las liberaciones.
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