Solares pide una investigaci¨®n sobre sus aguas e instalaciones
La pr¨®xima semana se llevar¨¢n a cabo en Madrid los an¨¢lisis que determinen la existencia o no de bacterias pat¨®genas en una partida de agua de Solares. Como se recordar¨¢ -v¨¦ase EL PAIS, d¨ªas 23, 24 y 25 de febrero-, la Jefatura Provincial de Sanidad de Pontevedra encontr¨® en los an¨¢lisis de control de estas aguas, bacterias aeruginosas, nocivas, susceptibles de causar infecciones. Remitidas las muestras a Madrid, en la Escuela Nacional de Sanidad, no se encontraron tales bacterias aeruginosas, sino del tipo fluorescens no pat¨®genas; por tanto, el agua pod¨ªa ser utilizada. Se da la circunstancia de que en cinco an¨¢lisis realizados a instancias de la Jefatura Provincial de Pontevedra hab¨ªa nocividad, y no en el realizado en Madrid. El jefe del departamento que llev¨® a cabo el an¨¢lisis en Madrid, doctor Ruiz Merino, colabor¨® en un folleto publicitario de la empresa Solares.
Puestos al habla con el director general de la empresa Balneario y Agua de Solares, nos comunic¨® que en esos momentos se estaba redactando una nota, en la que se conten¨ªan las respuestas a nuestras posibles preguntas. La nota, remitida despu¨¦s a nuestra redacci¨®n, es la siguiente:En EL PAIS del d¨ªa 25 de febrero, se dedica una p¨¢gina a acontecimientos de los que es protagonista nuestra agua como consecuencia de una actuaci¨®n de la Jefatura Provincial de Sanidad de Pontevedra.
?Balneario y Agua de Solares, SA? no considera procedente terciar en una pol¨¦mica de car¨¢cter t¨¦cnico de organismos sanitarios oficiales.
No obstante, rogamos la publicaci¨®n de la presente nota.
Por haberse inmovilizado unos cientos de cajas de agua de Solares en la provincia de Pontevedra, por orden de su Jefatura Provincial de Sanidad, est¨¢ en grave entredicho el prestigio de nuestra agua.
Ya anteriormente, en febrero de 1973, y originada en la misma dependencia, se desencaden¨® una campa?a, que tras una serie de actuaciones administrativas, fue rectificada favorablemente para Solares. Tras varias semanas de inmovilizaci¨®n, ¨¦sta fue levantada, tras informe favorable para Solares de la Subdirecci¨®n General de Medicina Preventiva y Asistencial.
En julio de 1975, el Centro Nacional de Alimentaci¨®n y Nutrici¨®n, en un informe sobre las aguas de bebida envasadas que se venden en nuestro pa¨ªs, se?ala que el agua de Solares carece de g¨¦rmenes pat¨®genos.
Posteriormente, en junio de 1976, fue nuestra factor¨ªa met¨®dicamente inspeccionada por la Jefatura Provincial de Sanidad de Santander, con motivo de haber solicitado y conseguido el n¨²mero de registro de industria alimentaria.
Tras casi cuatro a?os de an¨¢lisis, verificaciones y controles de todas clases, el Laboratorio Central de Termalismo y Climatolog¨ªa del Ministerio de Sanidad de la Rep¨²blica francesa, autoriz¨® por treinta a?os la venta de nuestra agua de Solares en territorio franc¨¦s, autorizaci¨®n que se public¨® en el Journal Officiel de la Republique Francaise n¨²mero 2.501, de 27 de mayo de 1976.
No obstante, como pese a todo lo anteriormente dicho, basta al parecer una sospecha no confirmada para que una vez m¨¢s, quede p¨²blicamente en tela de juicio nuestro prestigio como empresa y la confianza que creemos merecer de nuestros clientes, hemos decidido poner todos los medios a nuestro alcance para terminar de una vez con situaciones como la actual.
Para ello, y, entre otras medidas, hemos acordado solicitar con fecha de ayer, al ilustr¨ªsimo se?or director general de Sanidad, que tenga a bien ordenar una investigaci¨®n a fondo de:
a) Nuestro manantial, sus instalaciones y protecci¨®n.
b) Nuestras instalaciones de lavado y embotellado de vidrio.
e) Nuestras instalaciones de fabricaci¨®n y embotellado en PVC.
d) Nuestro sistema de control de calidad.
e) Nuestro laboratorio de an¨¢lisis f¨ªsico, qu¨ªmico y bacteriol¨®gico.
f) Cualquier otro aspecto de nuestra actividad, o de nuestras instalaciones que a juicio de dicha autoridad convenga comprobar.
Creemos suficientemente expl¨ªcito y aclaratorio de nuestra postura lo que antecede.
Una vez aclarada la presente confusa situaci¨®n esperamos poder publicar toda clase de pruebas de nuestra raz¨®n.
Habla el director general de ?Solares?
Rafael Calleja Gonz¨¢lez-Camino, director general de Solares habl¨® con un redactor de EL PAIS.-Solamente una pregunta, ?podr¨ªa aclararnos la relaci¨®n existente entre el jefe del departamento de microbiolog¨ªa de la Escuela Nacional de Sanidad, doctor Ruiz Merino, y su empresa?
-Hace a?os publicamos un folleto y solicitamos colaboraciones a varios especialistas. Como el n¨²mero uno en la materia es el doctor Ruiz Merino, a ¨¦l se acudi¨®. Porque tiene una reconocida talla cient¨ªfica y un gran prestigio.
El folleto a que se refiere el se?or Calleja comentaba, entre otras cosas" el riguroso control a que se somet¨ªan las aguas de Solares.
-?Desde aquella fecha, no ha habido nuevos contactos entre el se?or Ruiz Merino y ustedes?
-Pr¨¢cticamente, no. Le conocemos porque, insisto, es una autoridad en la materia. Es conocido en esta casa y coincidimos en congresos y en reuniones sobre aguas y sobre temas de nuestra especialidad.
Debe recordarse que est¨¢ pendiente a¨²n de resoluci¨®n, por el Supremo, un recurso interpuesto por Solares contra la sanci¨®n de diez millones de pesetas impuesta por haberse encontrado g¨¦rmenes pat¨®genos en algunas partidas del agua embotellada.
Jos¨¦ Manuel Reol Tejada, subdirector general de Farmacia, ha declarado a EL PAIS: ?Hay que distinguir claramente dos aspectos en el tema: el meramente administrativo y el de la responsabilidad p¨²blica. Administrativamente el problema acaba en la Escuela Nacional de Sanidad; es decir, que se hacen an¨¢lisis presuntivos que luego la Escuela Nacional de Sanidad ratifica, aprueba o desaprueba de acuerdo con sus propios an¨¢lisis. El establecimiento jer¨¢rquico acaba ah¨ª. La ¨²ltima palabra la tiene la Escuela Nacional de Sanidad. Ahora bien, a escala de nuestra propia responsabilidad p¨²blica, el problema es distinto. Nuestra misi¨®n es el control y vigilancia constante y permanente. En situaciones como ¨¦sta, nosotros intensificaremos la recogida de muestras, tanto en frecuencia como en cantidades, se har¨¢ vigilancia de las instalaciones de la planta embotelladora e incluso sobre nuestros propios m¨¦todos de an¨¢lisis.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.