La amnist¨ªa total, beneficiosa para el Gobierno
La amnist¨ªa total cuya aplicaci¨®n ha anunciado el ¨²ltimo Consejo de Ministros del Gabinete de Adolfo Su¨¢rez, puede ayudar a resolver los problemas con los que ahora se encuentra el Gobierno en sus di¨¢logos con la Oposici¨®n democr¨¢tica y, sobre todo, en sus relaciones con el PSOE renovado. Esa es la opini¨®n que se tiene en Gran Breta?a, donde un semanario de gran influencia, The Economist, acaba de referirse a la retirada del partido de Felipe Gonz¨¢lez del grupo de los nueve como un hecho que puede tener graves consecuencias en palabras de Ruiz-Gim¨¦nez.Para el semanario m¨¢s importante del Reino Unido, otros l¨ªderes de la Oposici¨®n, retorciendo sus manos como pla?ideras profesionales, le piden al presidente Su¨¢rez que haga las concesiones precisas para que ellos puedan reiniciar sus negociaciones con el Gobierno.
Aparte de la amnist¨ªa total, el PSOE ped¨ªa la neutralidad de la Administraci¨®n y de los medios informativos en las elecciones pr¨®ximas. Para los peri¨®dicos brit¨¢nicos, que ayer publicaban el rumor de que Su¨¢rez iba a pedir a los ministros que quisieran hacer campa?a electoral que dejaran el Gobierno, la mayor parte de esas exigencias est¨¢n en trance de cumplirse.
Sin embargo, la legalizaci¨®n de los hist¨®ricos del PSOE cree el Economist, contin¨²a siendo un problema. El Gobierno puede no haber sido totalmente desinteresa do al defender los derechos democr¨¢ticos de los socialistas hist¨®ricos, dice el Economist, que hace referencia a la intenci¨®n de algunos ministros de asociarse con el Centro Democr¨¢tico y ?aprovecharse de los votos que aquel PSOE pueda obtener en el electorado de centroizquierda?.
El Economist recoge en su art¨ªculo sobre Espa?a los resultados de encuestas p¨²blicas que sugieren que una izquierda no comunista representada en una coalici¨®n de partidos, en la l¨ªnea del Partido Laborista Brit¨¢nico, puede ganar hasta el 40% de los votos. El paso de los espa?oles hacia el socialismo es tan obvio, deduce el semanario, que es de tendencia moderada, que ?incluso la vivaz duquesa de C¨¢diz dijo el otro d¨ªa: ?No s¨¦ c¨®mo dec¨ªrselo a mi marido, pero me siento muy, muy socialista?. Afortunadamente, concluye el Economist, no tiene que dec¨ªrselo a su abuelo, que se llamaba Francisco Franco.
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