M¨²sica y conservatorios

La noticia publicada en su n¨²mero de 30 de marzo, nos informa que profesores y alumnos de los conservatorios de m¨²sica de Espa?a piden: ?S¨®lo los graduados en conservatorios pueden impartir clases de m¨²sica. ? Esto supone que la ense?anza de los conservatorios es la mejor.En Espa?a -mucha gente estudia un a?o o dos de solfeo, pero casi nadie sabe tocar un instrumento. En cambio, en los pa¨ªses anglosajones nadie sabe solfeo, pero hay muchos que tocan instrumentos. En cualquier reuni¨®n de j¨®venes universitarios en Inglaterra es normal encontrar tres o cuatro aficionados que podr¨ªan, f¨¢cilmente, formar un tr¨ªo o un cuarteto.La ense?anza medieval y, anti-musical del solfeo, impuesto por los conservatorios espa?oles, exige un a?o o dos de teor¨ªa al principiante antes de acercarle a un instrumento, y esta es la raz¨®n fundamental de la carencia de ambiente musical en Espa?a. Todo el entusiasmo del estudiante por la m¨²sica se hunde con el solfeo, en vez de ir encauzado hacia el instrumento. Aprender a tocar un instrumento ya afinado, como por ejemplo, el piano, es tan f¨¢cil como aprender a manejar una m¨¢quina de escribir. Cuando alg¨²n amigo me dice que le instruya, en la primera clase le suelo ense?ar a leer las notas, le siento al piano, y le ayudo a descrifrar una melod¨ªa de Mozart. Se encuentra inmediatamente unido al instrumento y a la m¨²sica cl¨¢sica. Sus problemas de ritmo se resuelven autom¨¢ticamente al encajar las dos manos (o acompa?¨¢ndole a d¨²o, si se trata de otro instrumento). Al empezar a tocar arpegios y acordes, le ense?o la base te¨®rica de la armon¨ªa. Y a partir de la d¨¦cima clase este estudiante ya se desenvuelve solo con su instrumento. Har¨¢ progreso si toca mucho y a gusto. As¨ª me ense?aron a tocar a mi, y toco cualquiera de los conciertos de piano de Bcethoven, sin gran esfuerzo, aunque no s¨¦ solfear. El entrenamiento en solfeo s¨®lo tiene justificaci¨®n para cantantes, directores de orquesta o compositores; pero para los aficionados al piano o a otro instrumento afinado, esta tarea tonta es equivalente como a obligar a un escritor a que estudie dos a?os de lat¨ªn antes de permitirle que escriba en espa?ol.

Los conservatorios espa?oles deben modernizar sus sistqmas de ense?anza cuanto antes. Sillegan a formar buenos profesores, ya se cotizar¨¢n en el mercado sin necesidad de imponerlos. Pero si son malos por su sistema de ense?anza anticuada, ?por qu¨¦ ha de protegerles la ley, en perjuicio de la vida musical del pa¨ªs? Cuando un gremio procura dominar con un monopolio alguna de las artes, o las humanidades, a cualquier zona del conocimiento humano, es muy mala se?al para la cultura de esa naci¨®n.