Alemania apoya firmemente la integraci¨®n espa?ola en Europa

(Viene de la primera p¨¢gina)

En el denso programa que los Reyes est¨¢n llevando a cabo hubo tambi¨¦n una recepci¨®n a la colonia espa?ola. El tema de los emigrantes espa?oles (uno de los que se han tra¨ªdo en la carpeta de conversaciones) le fue expuesto a don Juan Carlos en toda su crudeza por dos representante! de los trabajadores espa?oles en este pa¨ªs: los ?gastarbaitters?. La discriminaci¨®n que sufren los 225.000 espa?oles que viven en la RFA (de los que 110.000 trabajan) es total, hasta el punto de que los hijos de los obreros espa?oles tienen serias dificultades para estudiar en los colegios alemanes, y los que lo consiguen apenas pueden ir aprobando cursos.

Los emigrantes le pidieron al Rey que garantizase el voto, a todos los trabajadores espa?oles en este pa¨ªs en las pr¨®ximas elecciones (parece que, seg¨²n fuentes de estos ¨²ltimos, por diversas razones se que dar¨¢n sin votar un 70 % de los residentes en la RFA), el reconocimiento autom¨¢tico de los estudios realizados en Alemania por los espa?oles, la reintegraci¨®n del emigrante a su regreso a Espa?a, una informaci¨®n eficaz que arreglase las situaciones de muchos que no, pueden permanecer en Alemania al no tener permiso de estancia ni trabajo indefinido y una larga serie de puntos relacionados con sus condiciones de vida en este pa¨ªs. EI Rey prometi¨® tener en cuenta sus peticiones. Si ¨¦sta fue una amarga queja, don Juan Carlos pudo escuchar con satisfacci¨®n del portavoz de los emigrantes la felicitaci¨®n de ¨¦stos por ?lo acertado de su elecci¨®n al designar como jefe de Gobierno a Adolfo Su¨¢rez, que est¨¢ colaborando eficazmente a la consolidaci¨®n de la democracia en Espa?a?; hubo, pues, una de cal y otra de arena.La reuni¨®n de don Juan Carlos con Schmidt, tenida despu¨¦s del almuerzo ofrecido por este ¨²ltimo, fue calificada por el ministro de Asuntos Exteriores espa?ol como de muy cordial.

Los temas a tratar fueron los de la pol¨ªtica exterior concerniente, a los dos pa¨ªses, sin descender al terreno de los temas bilaterales, que fueron detenidamente estudiados en los cuatro encuentros que han tenido los se?ores Oreja y Genscher, este ¨²ltimo ministro federal de Relaciones Exteriores.

El se?or Oreja, en rueda de prensa con los informadores espa?oles, confirm¨® la noticia adelantada ayer por EL PAIS de que el Gobierno espa?ol habr¨ªa hecho saber al alem¨¢n su prop¨®sito de solicitar el ingreso formal de Espa?a en el Mercado Com¨²n despu¨¦s de las pr¨®ximas elecciones.

Dos de los temas que han estado presentes en las muchas reuniones del Rey y del se?or Oreja con las autoridades alemanas han sido el mandato de negociaci¨®n de la CEE con Espa?a, aprobado hace algunas semanas en Bruselas, y la ampliaci¨®n de las aguas territoriales de la Comunidad a doscientas millas. Dos decisiones desfavorablemente acogidas por el Gobierno espa?ol.

Los Reyes visitaron al alcalde de Bonn y recibieron al Cuerpo Diplom¨¢tico hispanoamericano acreditado en la capital federal. El Rey expres¨® su satisfacci¨®n porque por vez primera en sus viajes asistiera a este tipo de encuentros (habitual en los viajes de un jefe de Estado) se encontraba un embajador m¨¢s. Se refer¨ªa, naturalmente, al de M¨¦xico, pa¨ªs con el que Es pa?a acaba de establecer relaciones diplom¨¢ticas.Despu¨¦s del almuerzo, la Reina, acompa?ada por la marquesa de Mond¨¦jar, viajaron a Aquisgran, donde visitaron el museo y la catedral.

El viaje a Bonn termin¨® ayer noche con una cena de gala ofrecida, por los Reyes al presidente de la Rep¨²blica Federal y se?ora de Scheel. Fue una cena cordial, como todos los encuentros que se han producido en Bonn, pero no. hubo discurso importante del Rey, corno todo hac¨ªa pensar. Don Juan Carlos se limit¨® a un brindis corto en el que dijo solamente que, la visita ?ser¨¢ un paso de hist¨®rica importancia para la amistad y la colaboraci¨®n de los pueblos alem¨¢n y espa?ol.?

La jornada de hoy

Esta ma?ana, los Reyes saldr¨¢n para Bremen, ciudad-estado de Gobierno socialdem¨®crata radical, donde la acogida no s e espera sea tan favorable como la de Bonn. En cualquier caso, el aut¨¦ntico viaje de Estado ha finalizado anoche.

Don Juan Carlos recibir¨¢ hoy al l¨ªder de los cristiano-dem¨®cratas alemanes (CDU), se?or Kohl, a petici¨®n del pol¨ªtico germano.Si hubiese que decir en dos palabras cu¨¢l ha sido el balance de la visita a la capital de la Rep¨²blica Federal de Alemania no habr¨ªa nada m¨¢s gr¨¢fico que el Gobierno germano no ha hecho otra Cosa que hacer la primera puja en la subasta por la amistad con Espa?a. Si desde que se inici¨® el proceso democratizador espa?ol s¨®lo hab¨ªa habido coqueteos con Espa?a, el presidente Scheel y el canciller Schmidt han hecho la primera proposici¨®n formal de noviazgo a Espa?a. Es, sin duda, este viaje a Bonn un triunfo brillante de la Corona y del Gobierno espa?ol, seguramente por m¨¦ritos propios.