Los novilleros intentan revalorizar el toreo de Capa

Dice el t¨®pico: ?Cambi¨® la seda por el percal.? Pero es lo t¨ªpico ?Cambi¨® la seda por la tela de mascar.? El capote queda, cada vez mas, como un utensilio a morder por el espada de turno Una mirada a las figuras con que contamos nos dar¨¢ el triste panorama de c¨®mo se torea hoy de capa. Vaya por orden de actuaciones, de astros a fugaces luminarias:Manzanares capotea de ac¨¢ para all¨¢ y ya est¨¢. Es dificil verle en una ver¨®nica a derechas; m¨¢s a¨²n, en un quite; en la brega se inhibe o se hace un l¨ªo. Paquirri es eficaz en la brega, cuando la practica; en la ver¨®nica es sobrio y sin arte; suele rematar con revoleras. Ni?o de la Capea tiene las contadas habilidades de Manzanares y alguna vez dar¨¢ una chicuelina. Paco Alcalde es algo parecido a la negaci¨®n con el capote, salvo en chicuelinas de par¨®n. El Viti fue (y, por tanto, debe seguir siendo) un espl¨¦ndido int¨¦rprete de la ver¨®nica y la media ver¨®nica, sin m¨¢s repertor¨ªo. En la actualidad, los toros le tropiezan demasiado el capote, y es una pena. D¨¢maso Gonz¨¢lez tiene su fuerte en los pases de la muleta y con el capote no admite el m¨¢s ligero juicio. Palomo Linares carece de arte, pero hay que agradecerle que alguna vez se aventure por la chicuelina o la gaonera. Paco Camino, estilista de la chicuelina, aseado en la ver¨®nica, sobre todo por un lado, a veces (muy pocas veces) imprime gusto e incluso arte al lance. Angel Teruel, sin arte en esta modalidad torera, puede llegar a ser impecable en la brega.

Y as¨ª seguir¨ªamos, para encontrarnos alguna excepci¨®n: Curro Paula, Julio Robes sobre todos; Andr¨¦s V¨¢zquez, que a?ade repertorio al buen hacer, y muy pocos m¨¢s en el escalaf¨®n. Hay al rededor de 260 matadores de toros en activo, 3.000 novilleros y aspirantes, y para encontrar uno que sepa manejar a conciencia el capote tendr¨ªamos que buscarlo con lupa y, en circunstancias excepcionales. As¨ª est¨¢n las cosas.

Parad¨®jicamente, son los novilleros quienes m¨¢s se esmeran en revalorizar o resucitar estas suertes. Las instrumentan con los de fectos que son naturales en quienes empiezan, pero su intenci¨®n ya es una actitud que merece resaltarse. El domingo, en Las Ventas, S¨¢nchez Puerto, que tuvo una actuaci¨®n mediocre en conjunto, adem¨¢s de la larga cambiada de rodillas (que esa s¨ª se prodiga a todos los niveles), ejecut¨® ver¨®nicas en las que ganaba terreno y hasta las dio con ambas rodillas en tierra, mientras imprim¨ªa temple y mando al lance. El festejo fue de los que llamamos malos, pero no ser¨ªa justo calificarlo as¨ª cuando hubo ese detalle del toreo de capa, tan caro de ver y con frecuencia extra?o en las corridas con figuras y de abundante concesi¨®n de trofeos.