Rumores de movimientos pol¨ªtico-militares en Chile
A primeras horas de la tarde de ayer comenzaron a circular en diferentes capitales europeas rumores sobre una supuesta revuelta c¨ªvico-militar contra el r¨¦gimen del general Pinochet. En Par¨ªs, fuentes pr¨®ximas al MIR y a sectores de la Unidad Popular, confirmaron la existencia de acontecimientos en Chile, aunque a la hora de cerrar esta edici¨®n no existiera verificaci¨®n alguna a estas afirmaciones.
Testimonios recibidos en EL PAIS alud¨ªan al general Herman Brady, recientemente pasado a la reserva, como cabeza visible del pronunciamiento, que estar¨ªa apoyado por sectores pol¨ªticos centroderechistas, aglutinados en torno a la Democracia Cristiana.Poco despu¨¦s de iniciarse los rumores, una emisora de los Pa¨ªses Bajos emit¨ªa una informaci¨®n, fechada por su corresponsal en Santiago, seg¨²n la cual el dirigente dem¨®crata-cristiano chileno Eduardo Frei, apoyar¨ªa el levantamiento militar, que ya habr¨ªa cristalizado en incidentes en las principales ciudades del pa¨ªs andino.
Mientras tanto, ninguna de las grandes agencias internacionales de prensa emit¨ªa noticia alguna coincidente con los citados rumores. Una agencia de noticias con sede en Roma, sin embargo, enviaba despachos a todas sus delegaciones en los cuales se?alaba encontrarse abarrotada de versiones no confirmadas sobre movimientos pol¨ªtico-militares en Chile, sin que poseyera todav¨ªa en su sede indicador alguno de que aqu¨¦llas fueran veraces. Ni las grandes agencias norteamericanas, ni las europeas, enviaron una sola l¨ªnea al respecto, si bien, mediada la tarde, el silencio observado en las delegaciones de las agencias ubicadas en Santiago de Chile, contribu¨ªa a mantener en vilo las redacciones de los medios alertados por los testimonios antes mencionados.
Graves dificultades
Ayer se conoci¨® el contenido de una carta que ocho personalidades chilenas han hecho llegar al presidente Pinochet, pidi¨¦ndole que arbitre urgentemente medidas de reforma econ¨®mica. En la carta se advierte el distanciamiento cada vez m¨¢s profundo entre las decisiones oficiales y el inter¨¦s de los trabajadores.
El importante documento, m¨¢s importante a¨²n por venir de personas nulamente sospechosas de hostilidad al r¨¦gimen de Pinochet, agrega que algunos sectores militares intentan crear una superestructura pol¨ªtica sin sustento popular. ?No creemos posible, sin da?o para el actual Gobierno, que pueda mantenerse la incomunicaci¨®n existente desde 1973.?
Las protestas pol¨ªticas contra el r¨¦gimen chileno se han acentuado incluso en el interioir del pa¨ªs. El viernes se celebr¨® en una bas¨ªlica de Santiago una misa de solidaridad con el dirigente democristiano Jaime Castillo, quien realiza desde hace dos d¨ªas una huelga de hambre en Caracas porque la Junta Militar le impide regresar a u pa¨ªs. A la misa asistieron el ex presidente de la Rep¨²blica, Eduardo Frei, democristiano, y otros l¨ªderes de este partido disuelto. A la salida del templo se produjo una manifestaci¨®n en la que un centenar de j¨®venes gritaron consignas favorables al retorno de un r¨¦gimen constitucional.
El presidente Pinochet ha enviado recientemente a la comisi¨®n de juristas que elabora un borrador consiitucional instrucciones sobre las l¨ªneas generales a las cuales habr¨¢ de atenerse la ley Fundamental, cuya entrada en vigor se prev¨¦ para el a?o 1980.
Las directrices incluyen la preservaci¨®n, dentro del articulado constitucional, de la ?infiltraci¨®n ideol¨®gica marxista-leninista ?, as¨ª como se refiere a la creaci¨®n de un poder de seguridad ?que afiance el sistema presidencial chileno mediante una autoridad fuerte?.
Al documento se incorpora una puntualizaci¨®n sobre la necesidad de que la Constituci¨®n impida el establecimiento de sistemas electorales capaces de facilitar el que los partidos pol¨ªticos se conviertan en conductores monopol¨ªsticos de la participaci¨®n ciudadana.
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