El capit¨¢n del congelador siniestrado en Vigo desobedeci¨® ¨®rdenes de la Marina
El capit¨¢n del congelador siniestrado en Vigo en la madrugada del s¨¢bado, no obedeci¨® las ¨®rdenes de la autoridad de Marina, que podr¨ªan haber evitado que la tragedia alcanzara la dimensi¨®n ya conocida: s¨®lo nueve supervivientes y veintisiete desaparecidos, de los que empiezan a recuperarse los primeros cad¨¢veres, por el momento solamente dos.Nadie sabe las razones por las que el comandante del congelador Mabel no ech¨® los botes salvavidas al agua, todos unidos, para que resultar¨¢ m¨¢s f¨¢cil el rescate, a la una y media de la madrugada, poco antes de que el barco entrara en la zona de rompientes, de la que ya no sali¨®. La autoridad de Marina, a trav¨¦s del pesquero Sonia, insisti¨® reiteradamente en que se llevara a cabo esa operaci¨®n. Este requerimiento no fue atendido y tampoco se hizo caso, al menos parcialmente, a la orden de que lanzaran las anclas con todas las cadenas al mar.
En medios autorizados se estima que ambas medidas habr¨ªan evitado el triste resultado del siniestro.
Partidos pol¨ªticos y organizaciones sindicales han comenzado una campa?a con motivo del siniestro, denunciando la falta de medios de salvamento adecuados a las necesidades de Vigo y su zona de influencia. El Partido Socialista de Galicia-PSOE, que ha pedido una investigaci¨®n y la exigencia de responsabilidades, inici¨® la serie de comunicados, a los que han seguido, entre otros, la Asamblea Nacional Popular Galega y el Sindicato Galego dos Traballadores do Mar. Para todos resulta inexplicable, entre otras deficiencias, que en el momento del siniestro la radio costera m¨¢s pr¨®xima no funcionara por falta de energ¨ªa el¨¦ctrica.
El domingo, las operaciones de rastreo dieron los primeros resultados: fueron localizados los cad¨¢veres del primer oficial y del primer maquinista.
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