Consenso sobre la necesidad de las autonom¨ªas y la descentralizaci¨®n

El tema m¨¢s pol¨¦mico de la jornada de ayer del ciclo ?La Constituci¨®n a debate? estuvo dedicado a ?La organizaci¨®n territorial del Estado?, y tuvo por moderador al senador de designaci¨®n real Justino Azc¨¢rate.Juan Ferrando Bad¨ªa abord¨® el tema ?Naci¨®n, nacionalidades y regiones?. Critic¨® ?la ceremonia de la confusi¨®n? de la proliferaci¨®n de estos t¨¦rminos y record¨® que los siete diputados constituyentes utilizaron los dos t¨¦rminos en el anteproyecto.

Ante el art¨ªculo segundo, que alude al derecho a la autonom¨ªa de las diferentes nacionalidades y regiones que integran Espa?a, se pregunt¨® si con ello se quiere estructurar federalmente al Estado o crear un Estado regional, ya que, seg¨²n la doctrina cl¨¢sica, toda naci¨®n tiene derecho a convertirse en Estado.

El ponente se pronunci¨® a favor del Estado regional como intermedio entre el unitario y el federal. Defendi¨® un enriquecimiento pol¨ªtico de la regi¨®n, que lleva consigo -en opini¨®n del se?or Ferrando- la descentralizaci¨®n legislativa, el autogobierno y la autonom¨ªa.

Gumersindo Trujillo habl¨® sobre ?La regionalizaci¨®n del Estado?. Parti¨® de admitir el concepto de nacionalidad y de regi¨®n. Se mostr¨® contrario a los temores que en algunos sectores hab¨ªan despertado supuestos peligros disgregadores del proyecto constitucional. Afirm¨® que lo que ha puesto en peligro la unidad del Estado ha sido un r¨¦gimen autocr¨¢tico empe?ado en negar los factores diferenciales.

Defini¨® la nacionalidad como el deseo de un pueblo que no est¨¢ organizado como naci¨®n y aspira a tener personalidad pol¨ªtica. No hay que rasgarse las vestiduras -dijo- por la posibilidad de que se creen aut¨¦nticas nacionalidades, y termin¨® criticando aspectos t¨¦cnicos de la Constituci¨®n en el sentido de que al proyecto le faltan cautelas jur¨ªdicas ante posibles intentos separatistas.

Arzallus: "El t¨¦rmino nacionalidades es acertado"

Javier Arzallus abord¨® el tema ?La autonom¨ªa como derecho de las nacionalidades y regiones, Estado regional y Estado regionalizable?. Arranc¨® su disertaci¨®n afirmando que la expresi¨®n nacionalidades que recoge el anteproyecto le parece acertada y progresiva.Hizo un interesante estudio hist¨®rico de las libertades vascas y afirm¨® que si en un momento los vascos defendieron su libertad junto a los absolutistas, en las guerras carlistas fue porque siempre hab¨ªan pactado esas libertades con monarcas absolutos, mientras que los liberales centralistas de entonces se las negaban.

Record¨® que los pueblos tienen derechos al autogobierno, y que el derecho hist¨®rico del pueblo vasco no ha prescrito ni se ha perdido la memoria hist¨®rica de ese derecho. El pueblo vasco -a?adi¨®- reclama la renovaci¨®n del pacto foral.

Se pregunt¨® luego si ha de ser igual el tratamiento constitucional para los distintos pueblos de Espa?a, y asegur¨® que es cada pueblo quien ha de ahondar en hacerse a s¨ª mismo.

Rafael Calvo Ortega trat¨® el tema ?La financiaci¨®n de las autonom¨ªas?. Fue una intervenci¨®n breve y esquem¨¢tica, y analiz¨® las cinco f¨®rmulas posibles de financiaci¨®n de los entes auton¨®micos: subvenci¨®n, concierto, participaci¨®n en los ingresos estatales, recargos tributarios y sistema tributario propio. Expuso los inconvenientes que, a su juicio, ofrecen las cuatro primeras f¨®rmulas, y se inclin¨® decididamente por la ¨²ltima de ellas, es decir, por el sistema tributario propio, que ser¨¢ -dijo- el ¨²nico que permita cumplir las finalidades de las autonom¨ªas.

Gonz¨¢lez Casanova: "Hay que redistribuir el poder pol¨ªtico y econ¨®mico"

El ¨²ltimo ponente fue Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez Casanova, que habl¨® sobre ?Socialismo y autonom¨ªas?. Justific¨® hist¨®ricamente las posiciones socialistas respecto al problema, y afirm¨® que esa ideolog¨ªa trata, en definitiva, de redistribuir el poder pol¨ªtico y econ¨®mico entre todos los miembros de la comunidad frente a la oligarqu¨ªa que trata de concentrar esos mismos poderes. Las autonom¨ªas son as¨ª, instrumento necesario de esa redistribuci¨®n.La alternativa de poder-afirm¨®-, consiste no s¨®lo en hacerse con un Gobierno centralista, sino en acercar el poder al pueblo, precisamente a trav¨¦s de las autonom¨ªas.

Afirm¨® que los socialistas no estaban de acuerdo con el anteproyecto en esta materia, porque fija, exclusivamente, las competencias indeclinables del Estado, pero no se fija la constitucionafidad de los futuros estatutos. ?No hay -dijo- una lista de competencias de las autonom¨ªas, y ello se presta al forcejeo, a la disputa y a la controversia.?

Los socialistas piensan tambi¨¦n combatir parlamentariamente el veto del poder central a las normas de los parlamentos regionales, ya que con ello se niega, en su opini¨®n, la autonom¨ªa pol¨ªtica.

Se trata, en definitiva -dijo-, de crear un Estado nacional espa?ol, pero para que esto no sea s¨®lo ret¨®rica hay que distribuir el poder pol¨ªtico y econ¨®mico. ?No hablo de redistribuci¨®n, en sentido comunista, ut¨®pico -afirm¨®-, sino en profundidad.?

Caciquismo y autonom¨ªas

Un debate sobre el peligro del caciquismo como fantasma que puede rondar las autonom¨ªas cerr¨® la segunda jornada de ?La Constituci¨®n, a debate?, y, concretamente, el tema de la organizaci¨®n territorial del Estado.En el coloquio sobre las autonom¨ªas, moderado por Justino de Azc¨¢rate, el profesor Pedro de Vega plante¨® la alternativa de la regionalizaci¨®n como posibilidad de funcionamiento de todos los servicios de las regiones y consolidaci¨®n de la democracia o, por el contrario, como medio para la continuidad de las oligarqu¨ªas.

Gonz¨¢lez Casanova le contest¨® que la regionalizaci¨®n favorece la democracia y no interesa a la derecha, porque el caciquismo perder¨¢ poder. En cambio, Juan Ferrando, recordando la experiencia italiana, acept¨® el peligro de que la regionalizaci¨®n sea capitalizada por las oligarqu¨ªas.

Xabier Arzallus asegur¨® que las autonom¨ªas ser¨¢n un factor de democratizaci¨®n por cuanto es una f¨®rmula de control del pueblo. En cuanto al peligro de aprovechamiento por parte de los poderes caciquiles, record¨® que lo que es cierto es que la oligarqu¨ªa se aprovech¨® del centralismo durante los ¨²ltimos cuarenta a?os.

El se?or Mart¨ªnez Bande, recordando la Constituci¨®n de 1931, defendi¨® que la que ahora se elabora aluda a la naci¨®n espa?ola y se suprima la expresi¨®n cultura ib¨¦rica, as¨ª como pidi¨® que en el Senado no est¨¦n representados s¨®lo los espa?oles de, los territorios aut¨®nomos. Justino de Azc¨¢rate, antes de dar por concluida la sesi¨®n, tranquiliz¨® al citado se?or sobre los dos ¨²ltimos extremos de su inquietud.