Estancamiento casi absoluto de la Conferencia de Belgrado

La resistencia sovi¨¦tica en materia de derechos humanos y su deseo de crear un mecanismo de ?consultas? que servirla para ?congelar? los bloques militares del Este y el Oeste, que ha sido rechazado por los occidentales, ha conducido a la Conferencia de Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (CSCE) a un estancamiento casi absoluto. La delegaci¨®n espa?ola, que considera haberse asegurado ya la realizaci¨®n del ?tercer Helsinki? en Madrid, a fines de 1980, se est¨¢ limitando a actuar como simple mediadora o componedora de entuertos. Pero la representaci¨®n sovi¨¦tica acaba de presentar una nueva propuesta de declaraci¨®n final ?desprovista por completo de sustancia?, seg¨²n declar¨® ayer a EL PA?S un delegado norteamericano, lo que por el momento hace in¨²tiles todos los esfuerzos ?conciliadores?.

El embajador Arthur Goldberg, jefe de los enviados de Washington a este ?segundo Helsinki? de Belgrado, dijo hace unas horas a este diario que su pa¨ªs se ha ?resignado? ya a que la ?conferencia concluya sin ninguna clase de resultados, excepto -a?adi¨®- la voluntad expresa de todos los participantes de continuarla en Madrid?. El embajador espa?ol, Juan Luis Pan de Soraluce, que hace unos d¨ªas debi¨® someterse a una operaci¨®n quir¨²rgica de urgencia, se expres¨® en t¨¦rminos parecidos.De acuerdo con lo convenido en octubre pasado, cuando se inici¨® aqu¨ª este gran debate internacional, las 35 naciones signatarias del acta final de Helsinki deber¨ªan concluir sus trabajos ma?ana con una declaraci¨®n que supusiese un progreso respecto de los acuerdos firmados en la capital finlandesa, sobre derechos humanos, desarme y cooperaci¨®n entre los bloques. La falta absoluta de acuerdo -que es en lo ¨²nico en lo que todos est¨¢n de acuerdo- ha inducido ya a postergar la fecha de clausura, que podr¨¢ fijarse entre el pr¨®ximo d¨ªa 28 y el 3 de marzo. La decisi¨®n final sobre ese punto deber¨¢ adoptarse hoy.

La propuesta sovi¨¦tica sobre ?no ampliaci¨®n? de la OTAN y del Pacto de Varsovia, presentada varias veces por la URSS en el curso de este concili¨¢bulo, tiene el prop¨®sito, seg¨²n indicaron Goldberg y otros delegados occidentales, de impedir, durante los dos o tres pr¨®ximos a?os, la aproximaci¨®n de Espa?a a la Organizaci¨®n del Tratado del Atl¨¢ntico Norte (OTAN).

Espa?a y la OTAN

La delegaci¨®n espa?ola reiter¨® ayer a EL PA?S que Espa?a no hizo a los representantes sovi¨¦ticos en Belgrado ?ninguna promesa de mantenerse alejada de la OTAN? a cambio de la aceptaci¨®n, por Mosc¨², de que la tercera fase de la CSCE se lleve a cabo en Madrid.Tanto los espa?oles como otros diplom¨¢ticos occidentales nos confirmaron que en el verano de 1977, durante la fase preparatoria de esta conferencia, se registr¨® un ?tanteo? sovi¨¦tico en esa direcci¨®n. En esa ocasi¨®n -y posteriormente-, el se?or Pan de Soraluce le manifest¨® con claridad al jefe de la representaci¨®n de la URSS que Espa?a no condicionaba ?de ninguna forma? su pol¨ªtica en relaci¨®n con la OTAN a la realizaci¨®n de la CSCE en Madrid. ?Se trata de una cuesti¨®n (la de la OTAN) -le dijo Pan de Soraluce a Yuri Vorontzov- que depende exclusivamente del Gobierno y del Parlamento espa?ol.? Por ¨®rdenes expresas de Madrid, Pan de Soraluce tambi¨¦n explic¨®, al parecer, que el proceso de ingreso o no ingreso en la OTAN incluir¨¢ probablemente un refer¨¦ndum y ?demandar¨¢, por lo menos, dos o tres a?os de maduraci¨®n?.

Tal perspectiva es la que habr¨ªa inducido finalmente a la URSS a aceptar la candidatura espa?ola. Pero en este momento los expertos sovi¨¦ticos mantienen que el proceso de acercamiento entre Espa?a y la OTAN ?se est¨¢ acelerando notablemente?, tal como lo habr¨ªa sugerido en Belgrado el propio Vorontzov, lo cual explica el inter¨¦s de Mosc¨² en promover, en el contexto de la CSCE, el comit¨¦ encargado de estudiar la limitaci¨®n de los bloques militares.

Entre estas discordias de fondo, el tema de los derechos humanos es utilizado por unos y otros como el ariete visible de la batalla. En su ¨²ltima oferta de declaraci¨®n final, la URSS insiste en reducir ese punto a la m¨ªnima expresi¨®n. El documento sovi¨¦tico se mantiene a¨²n en reserva, pero fuentes competentes hicieron llegar ayer a EL PA?S su texto completo. En el p¨¢rrafo correspondiente se lee lo siguiente: ?Los participantes se de clararon dispuestos a proseguir ampliando la cooperaci¨®n en el campo humanitario, tal como se dispone en el acta final (de Helsinki): contactos entre personas, informaci¨®n cultura y educaci¨®n?.

Goldberg y sus colegas alemanes, daneses, brit¨¢nicos, etc¨¦tera, no aceptan semejante ?temperamento?.