Cayetana, duquesa de Alba, se cas¨® con Jes¨²s Aguirre

La ceremonia, oficiada por el padre Jos¨¦ Mar¨ªa Mart¨ªn Patino, provicario de la di¨®cesis de Madrid, tuvo lugar en la capilla privada del palacio de Liria. Fue el padrino Carlos Mart¨ªnez de Irujo, duque de Hu¨¦scar, hijo mayor de la duquesa, y la madrina Carmen Ortiz de Z¨¢rate, madre del novio. Por parte de la duquesa firmaron como testigos, adem¨¢s de sus otros cuatro hijos (Alfonso, duque de Aliaga; Jacobo, Fernando y Cayetano), do?a Mar¨ªa Victoria Marone de Alvarez de Toledo, la duquesa de Santa Cruz y el conde de Teba. Por parte de Jes¨²s Aguirre lo hicieron P¨ªo Cabanillas, el duque de Ari¨®n. Sebasti¨¢n Mart¨ªn Retortillo, condesa de Carbajal, Javier Pradera y se?ora de L¨®pez Aranguren, en representaci¨®n de su marido, ausente en Barcelona. Represent¨® a la autoridad civil el juez Clemente Auger.Invitados

En la ceremonia estuvieron presentes entre otros invitados toda la familia real excepto los propios Reyes y los condes de Barcelona, que por protocolo no asisten a este tipo de actos. El duque de Alburquerque y el marqu¨¦s de Mond¨¦jar representaban a la Casa Real. Junto a los duques de C¨¢diz, los de Badajoz, la infanta Margarita y don Gonzalo de Borb¨®n pod¨ªa verse a los pr¨ªncipes de Baviera y a la gran mayor¨ªa de la aristocracia espa?ola. Personas del mundo de la cultura, la intelectualidad y las artes se dieron igualmente cita para presenciar lo que algunos han calificado de boda del a?o.

No hubo homil¨ªa en la ceremonia, con misa, que dur¨® tres cuartos de hora escasos y que se desarroll¨® en medio de un tono de extraordinaria sencillez. La presencia de fot¨®grafos y representaciones oficiales fue tambi¨¦n estrictamente limitada. No obstante, y dadas las reducidas dimensiones de la capilla, a pesar de las pocas invitaciones cursadas algunos de los invitados tuvieron que permanecer fuera. Despu¨¦s de la boda se ofreci¨® una copa en los salones del palacio de Liria, que abandonaron los invitados sobre las dos de la tarde. Los novios partieron anoche mismo hacia el extranjero, donde permanecer¨¢n hasta el lunes. Pasar¨¢n la Semana Santa en Sevilla en el palacio de las Due?as. Jes¨²s Aguirre se incorporar¨¢, no obstante -seg¨²n dijo ¨¦l mismo-, el lunes santo a su despacho de director general de M¨²sica y permanecer¨¢ trabajando hasta el mi¨¦rcoles. Utilizar¨¢ el t¨ªtulo de duque de Alba.

Cayetana Fitz-James Stuart, duquesa de Alba, tiene 52 a?os de edad. Es madre de seis hijos y viuda de don Luis Mart¨ªnez de Irujo. Posee 47 t¨ªtulos nobiliarios -m¨¢s que la propia reina de Inglaterra-, dieciocho de ellos con grandeza de Espa?a. Su residencia habitual, el palacio de Liria, en la madrile?a calle de la Princesa, es un verdadero museo en el que se conservan cuadros de Goya, Tiziano, Rembrandt, Gainsborough y documentos de enorme valor, entre ellos el testamento aut¨®grafo de Felipe ll.

El novio

Jes¨²s Aguirre y Ortiz de Z¨¢rate tiene 44 a?os, es santanderino, licenciado en Teolog¨ªa y Filosof¨ªa, pol¨ªglota y editor. Director general de M¨²sica desde el pasado mes de septiembre, ha alternado siempre la actividad intelectual con la pol¨ªtica. Conoci¨® a Cayetana hace poco m¨¢s de cuatro meses en casa de los duques de Ari¨®n, con el que Jes¨²s Aguirre guarda una antigua amistad. Con su llegada a la casa de Alba, que se ha distinguido a trav¨¦s de la historia por un importante mecenazgo cultural, ¨¦sta entronca con una gran zona de la intelectualidad antifranquista liberal y de izquierdas. En efecto, Jes¨²s Aguirre fue un notable animador a finales de los a?os cincuenta del Frente de Liberaci¨®n Popular (al que se conoc¨ªa como Felipe en los c¨ªrculos de clandestinidad), si bien nunca perteneci¨® oficialmente a ¨¦l. Persona de extraordinario prestigio en el mundo de las letras, director durante muchos a?os de la editorial Taurus, es amigo personal de Carlos Barral, Juan Benet, Juan Garc¨ªa Hortelano, Jos¨¦ Luis Aranguren, Jos¨¦ Mar¨ªa Castellet, Fernando Savater, Jaime Salinas, Jos¨¦ Mar¨ªa Gil Robles, Jorge Sempr¨²n, Luis de Pablo, Javier Pradera y un largo etc¨¦tera de nombres con notable pasado y presente en la actividad cultural y pol¨ªtica espa?ola.

Vinculado a EL PAIS desde la aparici¨®n del peri¨®dico, perteneci¨® al comit¨¦ asesor de cultura del mismo hasta su nombramiento de director general y ha sido colaborador habitual en nuestras p¨¢ginas.