"La radiaci¨®n de la Naturaleza tambi¨¦n es da?ina"

?Una central nuclear aumenta la radiactividad de la atm¨®sfera en medio milirrem-a?o a una distancia de un kil¨®metro, mientras que la radiactividad de origen natural se cifra en los cien milirrems. No creo que nuestras c¨¦lulas sean tan sabias como para distinguir las radiaciones procedentes de una fuente natural o de la industria, de forma que ¨¦stas le hagan da?o y las otras no. ?Esta manifestaci¨®n del doctor Sir Edward Pochin, miembro de las comisiones de protecci¨®n radiol¨®gica de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud y de la CEE, fue hecha ayer en Bilbao en el transcurso de una rueda de prensa convocada por la Academia de Ciencias M¨¦dicas con motivo de la conferencia que pronunciar¨¢ ma?ana sobre los efectos de la radiactividad.

En opini¨®n de este experto ingl¨¦s, que ha investigado el tema por espacio de treinta a?os, el temor a la energ¨ªa nuclear ?est¨¢ basado, en gran parte, en el desconocimiento de las cantidades de radiaci¨®n que emite una central de esta naturaleza y en la impresi¨®n que tiene la gente de que se le impone un tipo de energ¨ªa sin la adecuada informaci¨®n?.

El doctor Pochin afirma que no tendr¨ªa inconveniente en vivir en las inmediaciones de una central nuclear, y que, de hecho, ya residi¨® un tiempo en Kerala, al sur de la India, donde la radiactividad natural no es de cien milirrems, sino de mil.

Esta ¨²ltima s¨®lo se sabe que haya producido da?os graves en personas cuando se encontraba todav¨ªa en fase experimental, en Estados Unidos y Yugoslavia. ?Toda radiaci¨®n -a?ade- puede ser da?ina, incluso la que reside en la naturaleza, pero hay que asumirla. La m¨ªnima elevaci¨®n de radiactividad que origina una central no parece que pueda modificarla morbilidad de una poblaci¨®n o su capacidad inmunol¨®gica, que s¨®lo se modifica a partir de los 100.000 milirrems, irradiaci¨®n que se emplea en los trasplantes, de coraz¨®n para evitar el rechazo.?

Al hablar de las dosis radiactivas que produce una central nuclear, el doctor Pochin puntualiza que en su, c¨¢lculo se tiene en cuenta la vida media de cada elemento y el efecto acumulativo que se registra en determinadas especies animales o vegetales. A?ade finalmente que en los pa¨ªses que conoce se ha asumido la energ¨ªa nuclear, si bien en Estados Unidos existe una oposici¨®n a las plantas de reprocesamiento.