Los belgas temen ser sustituidos por Francia en Zaire

Mientras los primeros paracaidistas belgas que participaron en la ?operaci¨®n rescate? en Kolwezi regresaban a Bruselas, el Parlamento belga viv¨ªa una sesi¨®n extraordinaria tumultuosa a prop¨®sito de la situaci¨®n en el Zaire. El debate fue un exponente, en realidad, del temor de los medios econ¨®micos belgas que temen perder sus privilegios en el Zaire, a favor de intereses franceses, gracias a una pol¨ªtica m¨¢s clara de apoyo militar al r¨¦gimen del general Mobutu, por parte del presidente Valery Giscard D'Estaing.El Gobierno belga orden¨® el regreso de 1.300 paracaidistas, que iniciaron su vuelta anoche al aeropuerto militar de Melsbroek. Sin embargo, por medidas de seguridad complementarias, un batall¨®n, seiscientos hombres y material, permanece estacionado en la localidad de Kamina, a trescientos kil¨®metros de KoIwezi.

Adem¨¢s de los ochocientos millones de d¨®lares de inversiones belgas en el Zaire (contra veinte millones por parte de Francia) los belgas canalizan casi la mitad de la comercializaci¨®n del cobre del Zaire. A trav¨¦s de acuerdos con ?Gecamines?, sociedad de Estado del Zaire, los belgas participan en inversiones y explotaci¨®n de los ricos yacimientos de cobre.

Parece claro que el objetivo de los rebeldes era destruir parcialmente les yacimientos de Kolwezi, para acentuar la crisis econ¨®mica del r¨¦gimen del presidente Mobutu. Las 500.000 toneladas anuales de cobre exportado (el 7% del consumo mundial) representan el 70% de los ingresos de Zaire por exportaciones. La inundaci¨®n de algunas minas, la destrucci¨®n de instalaciones industriales en otras, hace creer a los expertos belgas que ser¨¢ necesario un per¨ªodo de seis meses para restablecer la producci¨®n normal.

Restablecer r¨¢pidamente la producci¨®n obliga a un regreso de t¨¦cnicos europeos. Muchos de los refugiados anunciaron que s¨®lo volver¨¢n a Shaba con protecci¨®n de, tropas occidentales. ?Estar¨¢ dispuesta B¨¦lgica, con las eventuales repercusiones pol¨ªticas interiores, a mantener unidades militares en el Zaire? Francia parece menos escrupulosa 3, habla, incluso, de la creaci¨®n de una ?fuerza interafricana de seguridad?, entre tropas europeas de los pa¨ªses de la CEE (que son al mismo tiempo de la OTAN) y tropas africanas.

Los belgas no podr¨¢n seguir insensibles a la evoluci¨®n en el Zaire, ante un proyecto de ayuda francesa, un cr¨¦dito inmediato de cinco millones de d¨®lares de Arabi a Saudita a trav¨¦s de la OPEP, y una sesi¨®n, a mediados del raes pr¨®ximo, que debe decidir en Bruselas la nueva pol¨ªtica de cooperaci¨®n entre B¨¦lgica y Zaire.