Apoteosis gitana en el Congreso de Diputados
El hemiciclo de las Cortes fue ayer el marco de una aut¨¦ntica apoteosis gitana, que concluy¨® con la aprobaci¨®n de una proposici¨®n no de ley, defendida por el diputado gitano Juan de Dios Ram¨ªrez Heredia (UCD), quien cosech¨® numerosos aplausos y v¨ªtores a lo largo de una brillante intervenci¨®n en defensa de la poblaci¨®n gitana, que levant¨® el ¨¢nimo de la C¨¢mara. Entre otros objetivos de la proposici¨®n no de ley, el diputado destac¨® la necesidad de derogar tres art¨ªculos del reglamento de la Guardia Civil, en los que se establece una represi¨®n especial contra los gitanos.A trav¨¦s del cambio de inflexi¨®n de la voz, la adopci¨®n de un tono de mitin, el recurso a la an¨¦cdota llena de sal y pimienta o la descripci¨®n cruda de los padecimientos gitanos, el se?or Ram¨ªrez Heredia construy¨® una de las piezas oratorias m¨¢s emotivas y eficaces de las pronunciadas desde el 15 de junio.
Manifest¨® que la defensa de los gitanos, de su dignidad humana como una minor¨ªa, no pod¨ªa ser patrimonio de ning¨²n partido, ni de centro, ni de izquierda, ni de derecha, porque en definitiva se trataba de la defensa de unos hombres y mujeres.
Pidi¨® a los diputados que votaran favorablemente su propuesta para que desaparezcan tres art¨ªculos del reglamento de la Guardia Civil contra los gitanos, en l¨ªnea con toda una trayectoria de represi¨®n.
Record¨® que los preceptos cita dos del reglamento de la Guardia Civil tienen su precedente en disposiciones de la ¨¦poca de los Reyes Cat¨®licos, en las que se ordenaba dar cien azotes a los gitanos y cincuenta a las gitanas si no viv¨ªan en un sitio determinado, y el env¨ªo a galeras perpetuamente si insist¨ªan en su actitud transhumante. Record¨® tambi¨¦n que Hitler asesin¨® a medio mill¨®n de gitanos durante la segunda guerra mundial, y que 18.000 gitanos fueron fusilados en 1943, en los bosques de Bolonia. Con tono espeluznante, el se?or Ram¨ªrez Heredia a?adi¨® que, en aquella ocasi¨®n, a los ni?os peque?os se les destroz¨® la cabeza contra los troncos de los ¨¢rboles para ahorrar munici¨®n.
Despu¨¦s de esta excursi¨®n hist¨®rica, el diputado gitano dijo que todav¨ªa subsiste la discriminaci¨®n, aunque los gitanos y los payos puedan viajar en el mismo autob¨²s y asistir al mismo cine. ?Pero aqu¨ª la indiscriminaci¨®n que existe es la de la indiferencia?, consistente en aplaudir al artista gitano, pero marginar a miles de ciudadanos por ser de esta condici¨®n.
Describi¨® el infortunio de muchas comunidades gitanas, en algunas de las cuales las ratas pasean por encima de la cara de los ni?os durante la noche, y a las que las autoridades dificultan sus tradicionales ocupaciones de compra y venta.
Aludi¨® m¨¢s tarde a la disonancia entre lo que ocurre en el Parlamento y en el pueblo, para el que palabras como consenso y otras de uso frecuente entre la clase pol¨ªtica no son entendidas. Manifest¨® que esta era una ocasi¨®n para acercar el Parlamento al pueblo. Insisti¨® en la situaci¨®n de marginaci¨®n de los gitanos, que viven en aut¨¦nticos ghetos donde se mueren de hambre en n¨²cleos de Valladolid, Alicante, Zaragoza y, otras ciudades espa?olas.
Apel¨® al Gobierno y a su partido y cit¨® concretamente a Adolfo Su¨¢rez, cuya par¨¢bola feliz sobre el tr¨¢nsito democr¨¢tico fue glosada as¨ª por el se?or Ram¨ªrez Heredia: ?Pero se?oras y se?ores, para aquellos que no disponen de ca?er¨ªas ni de casa, ni de agua ni de electricidad. ?c¨®mo vamos a hablarles de transici¨®n pol¨ªtica y democracia pac¨ªfica? Yo he sido partidario de la reforma democr¨¢tica, pero ante la lucha contra la miseria, opto por la ruptura.? Un nuevo aplauso, grande, rubric¨® estas palabras.
Seguidamente, intervino el diputado comunista Josep Sol¨¦ Barber¨¢, para expresar su asentimiento a la proposici¨®n no de ley. Sometida a votaci¨®n la proposici¨®n no de ley fue aprobada por 285 votos a favor, ninguno en contra y una abstenci¨®n, de Miguel Riesgo (AP), marcada por error, al parecer.
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