Alianza Popular defender¨¢ la enmiendas a todos los art¨ªculos relativos a la autonom¨ªa

Alianza Popular mantuvo ayer ante la Comisi¨®n Constitucional el voto particular a todo el t¨ªtulo VIII -?De la organizaci¨®n territorial del Estado?-, presentado en su d¨ªa por Manuel Fraga en la ponencia. La actitud de Alianza Popular -que supone que todos y cada uno de los art¨ªculos del mismo son objeto de enmienda por su parte- sorprendi¨® a los restantes miembros de la comisi¨®n y especialmente a los componentes de la ponencia, dado que el voto particular de AP fue presentado por el se?or Fraga en base al texto del 5 de enero, mientras que el del 17 de abril -que es el debatido por la comisi¨®n- fue votado favorablemente por el representante aliancista.

Al anunciar la decisi¨®n de mantener el voto particular, Manuel Fraga explic¨® el sentido del mismo: ? Cuando entramos en lo que, a juicio de este grupo, es la parte de a Constituci¨®n fundamental de la Constituci¨®n -dijo-, no podemos menos que decir que la suerte de este t¨ªtulo incidir¨¢ en el criterio que mantendremos respecto a toda la Constituci¨®n.? ?Importa que haya precisi¨®n y ambig¨¹edad, publicidad y no secreto -a?adi¨®- y que actuemos con plena buena fe, lejos de electoralismos cercanos.?Seg¨²n el se?or Fraga, se plantean dos grandes cuestiones en el t¨ªtulo VIII: ?Si se concibe Espa?a como una naci¨®n que, a trav¨¦s de un Estado formado por la soberan¨ªa popular, procede a organizar su territorio; o si concebimos a Espa?a -y as¨ª se ha expresado ya en esta comisi¨®n con palabras que algunos no olvidaremos jam¨¢s- como una naci¨®n de naciones, un Estado plurinacional. ?

El se?or Fraga cit¨® en varias ocasiones al profesor Brontons, para calificar a las nacionalidades de tapadera y anunciar que este tema puede acabar siendo una bomba de relojer¨ªa en el coraz¨®n de Espa?a. ?Debe decirse aqu¨ª -prosigui¨®- que existe una sola naci¨®n, la espa?ola, crisol de pueblos. Esta es la dimensi¨®n que vamos a defender.?

Para el lider aliancista ?el despiece regional de las facultades del Estado? ser¨¢ un inconveniente para la integraci¨®n en las comunidades europeas, porque la pol¨ªtica comunitaria, se?al¨®, obliga a todos los Estados a conservar sus facultades claras para poder pactar.

El breve discurso del se?or Fraga no fue contestado por ning¨²n otro grupo, si bien el diputado soc¨ªalista Gregorlo Peces-Barba aludi¨® a ¨¦l con motivo del debate del art¨ªculo 130, primero del t¨ªtulo. Se?al¨® que las nacionalidades forman parte permanentemente de la naci¨®n espa?ola y neg¨® que existiera ninguna incompatibilidad con los planteamientos europe¨ªstas. Sabe el se?or Fraga muy bien -dijo que la Rep¨²blica Federal de Alemania, B¨¦lgica o el Reino Unido tienen una estructura m¨¢s descentralizada que la que aqu¨ª nos proponemos, y que son estos pa¨ªses, sin embargo, los que mejor encaje han tenido en la Comunidad Europea. Francia, por el contrario, con su estructura centralista, encuentra muchos problemas.?

En el debate del art¨ªculo 130 se plantearon tres enmiendas. El se?or Fraga pretend¨ªa que se dijera que ?el territorio de Espa?a se divide en regiones. provincias y municipios...?. El Grupo Socialista present¨® una nueva redacci¨®n -a todas luces negociada previamente con UCD, PNV, Minor¨ªa Catalana y Grupo Comunista- por la que se daba una redacci¨®n enteramente nueva al art¨ªculo y se afirmaba que ?el Estado se organiza territorialmente en municipios, en provincias y en comunidades aut¨®nomas?. En contra de este planteamiento intervino el se?or L¨®pez Rod¨® (AP), que califica de ?muy desafortunada? la f¨®rmula socialista. ?El Estado -dijo- no puede organizarse en municipios porque en ese caso los municipios son ¨®rganos del Estado y eso ser¨ªa un menosprecio del municipio.? A?adi¨® que, a su juicio, no cab¨ªa una expresi¨®n m¨¢s estatalista ni m¨¢s centralista que la propuesta por el se?or Peces-Barba.

La tercera enmienda -finalmente retirada- fue present¨¢da por Emilio Gast¨®n, del Grupo Mixto, y preterid¨ªa que se afirmara que las comunidades aut¨®nomas podr¨ªan estar integradas por una sola provincia. Miguel Roca, en nombre de la ponencia, le record¨® que as¨ª se formulaba en un art¨ªculo posterior.

La enmienda del se?or Fraga fue derrotada por dos votos a favor (AP), quince en contra (socialistas, comunistas, PNV, Minor¨ªa Catalana y Grupo Mixto) y catorce abstenciones (UCD).

De nuevo, en el art¨ªculo 131 el se?or Fraga defendi¨® su voto particular a fin de que se insistiera en que no podr¨ªan existir discriminaciones. Miguel Roca exclam¨® que el debate se estaba convirtiendo en un di¨¢logo de sordos y que, en todo caso, la enmienda del se?or Fraga se relacionaba con un art¨ªculo posterior. Su apreciaci¨®n fue estimada por la presidencia de la Comisi¨®n, que dio paso al diputado centrista se?or Bravo de Laguna para que defendiera una enmienda in voce -igualmente pactada con anterioridad por el resto de los grupos parlamentarios- por la que el Estado queda obligado a garantizar efectivamente el equilibrio econ¨®mico entre las diversas partes del territorio espa?ol y se alude a la circunstancias del hecho

Esta redacci¨®n obtuvo unanimidad de todos los diputados, incluidos los se?ores Fraga y L¨®pez Rod¨®. En el turno de explicaci¨®n de voto, el diputado socialista eanarlo se?or Padr¨®n se felicit¨® por la menci¨®n del hecho insular, ?que espero -dijo- se traduzca en futuras leyes que ayuden a las islas Canarias?.

Respecto al art¨ªculo 132, el se?or Frac,a recogi¨® sus anteriores argu mentaciones para solicitar que se Mtrodujera un inciso en el aparta do 2), de forma que quedara ga rant¨ªzado que ninguna autoridad podr¨ªa limitar el derecho de los es pa?oles a establecerse en cualquier parte del territorio y a ejercer su profesi¨®n y trabajo. Sometida a votaci¨®n fue derir )tada por dos vo tos a favor (AP), catorce en contra (socialistas, comunistas, PNV, Mi nor¨ªa Catalana y Grupo Mixto) y quince abstenciones (UCD). En el turno de explica ci¨®n. voto, tanto el comunista Jordi Tur¨¢ como socialista Gregorio Peces- Barba C,j s.ocla 1 sc nalaron e..e la enente ili*lenda de r,,-~:";jido e n wws de la 'tuc*¨®n. Mar¨ªu.,,~l 1, ' raga con- ¨²nst iest¨® que, pese a todo, era necesario insistir. ?La palabra m'aqueto -dijo- no la hemos inventado nosotros.?Ley de Presupuestos

A ntes de entrar en el debate del t¨ªtulo VIII, la Comisi¨®n estudi¨® los ¨²ltimos art¨ªculos del t¨ªtulo ?Econom¨ªa y Hacienda?, en los que se introdujeron numerosas variaciones. Ernest Lluch, de Socialistas de Catalu?a, propuso que en el apartado del art¨ªculo 126 en el que se dec¨ªa que la ley de Presupuestos no podr¨ªa crear ni mod~icar tributos se suprimiera la palabra modificar, a lo que se opuso duramente el se?or L¨®pez Rod¨® (AP). Finalmente una redacci¨®n transaccional defendida por Jos¨¦ Luls Mell¨¢n (UCD) obtuvo los votos de todos los grupos, excepto de AP.

Tambi¨¦n con la sola abstenci¨®n de Alianza Popular se aprob¨® la supresi¨®n del art¨ªculo 127 del anteproyecto, en el que se dec¨ªa que la ley regular¨ªa los t¨¦rminos en los que el Gobierno puede disponer sobre los derechos o bienes de que sea titular el Estado. Seg¨²n expuso el se?or Bravo de Laguna (UCD), este extremo hab¨ªa quedado recogido en el art¨ªculo 124, ya aprobado.

Una mejor redacci¨®n t¨¦cnica del art¨ªculo 128, propuesta por el mismo diputado centrista, y una nueva elaboraci¨®n del 129, defendida por Manuel Fraga, previo consenso con los restantes grupos, fueron aprobadas por unanimidad.