El Gobierno, decidido a paliar el d¨¦ficit municipal de Bilbao

El Ayuntamiento de Bilbao no va a dimitir. Esta es, al menos, la impresi¨®n que se tiene cuando, precisamente hoy, se cumple el ultim¨¢tum dado hace mes y medio al gobernador civil. Los corporativos pusieron tres condiciones para seguir en sus poltronas, y parece que las tres van a cumplirse.

La primera de ellas hac¨ªa referencia a que la primera autoridad provincial tomase las medidas necesarias para evitar nuevas ocupaciones de la casa consistorial, exigencia que se ha tenido en cuenta con ocasi¨®n de las ¨²ltimas manifestaciones celebradas ante el Ayuntamiento.La segunda condici¨®n era contar con el apoyo, aunque fuera impl¨ªcito, de los partidos pol¨ªticos. A pesar de que el PSOE ha pedido formalmente la dimisi¨®n, el PNV ha preferido abstenerse de cualquier decisi¨®n, y UCD les ha instado a que contin¨²en. Ante esta divisi¨®n de opiniones, los corporativos creen que al menos la mayor¨ªa no exige su marcha.

Por ¨²ltimo, quedaba el tema m¨¢s importante: la ayuda de la Administraci¨®n central para poder equilibrar el presupuesto, que presenta un d¨¦ficit cercano a los 1.500 millones de pesetas. Esta condici¨®n no se ha cumplido todav¨ªa, pero el Ayuntamiento parece contar con promesas formales de que en un plazo muy breve se habilitar¨¢n los fondos necesarios. El alcalde de Bilbao, Jos¨¦ Luis Berasategui, se encontraba ayer en Madrid para concretar algunas operaciones en este sentido, y se habla de una ayuda inmediata de casi mil millones a trav¨¦s del presupuesto extraordinario de Urbanismo. Las impresiones son optimistas y se concretar¨¢n casi con toda seguridad en un pleno de car¨¢cter monogr¨¢fico que se celebrar¨¢ el presente mes.