"La realidad es fant¨¢stica por s¨ª misma"
Entrevista con Guti¨¦rrez Sousa, premio Blasco Ib¨¢?ez 1978
El peruano Jos¨¦ Manuel Guti¨¦rrez Sousa, treinta a?os, residente en Par¨ªs, donde se dedica por entero a la actividad literaria vino por Valencia a recoger el Premio Blasco Ib¨¢?ez 1978. El veredicto del jurado que seleccion¨® su novela As¨ª me dijo Arturo entre 33 originales procedentes de Suram¨¦rica y un n¨²mero menor de espa?oles, lo conoci¨® a trav¨¦s del hilo telef¨®nico.
Este libro de trescientas p¨¢ginas, editado por Prometeo con una sint¨¦tica portada de realidad y sue?os es el primer testimonio impreso de una obra literaria elaborada en prosa y verso con la experiencia vital de viajes por Canad¨¢, M¨¦xico, Londres, India y Par¨ªs. ?Despu¨¦s de haber escrito varias obras quer¨ªa publicar y me preguntaba c¨®mo lo pod¨ªa hacer. Si llegaba a una editorial con mi libro bajo el brazo me iban a decir, ?qui¨¦n es usted?, y yo realmente no era nadie, no hab¨ªa publicado nada para ense?ar. Tambi¨¦n se puede recurrir a recomendaciones aunque esto tampoco es f¨¢cil. En una ocasi¨®n un buen narrador espa?ol me dijo, me gusta tu novela pero no te voy a recomendar porque no quiero tener sombra.?Totem park, Erza, Los hombres de aqu¨ª abajo, Chiara, Antolog¨ªa del cielo verde, todos ellos papeles in¨¦ditos hasta ahora en espera de ofertas editoriales presentan a un escritor suramericano que sali¨® de su pa¨ªs con la llegada de los setenta despu¨¦s que las expectativas de un cambio pol¨ªtico a imitaci¨®n de la revoluci¨®n cubana quedaran frustradas. ? La generaci¨®n de los sesenta en Per¨² compartimos esa esperanza cubana frente a la decadencia capitalista. La llegada de Fidel al poder fue nuestro despertar de conciencia. Despu¨¦s de los a?os sesenta hay una crisis de conciencia, los movimientos guerrilleros que ten¨ªan como objetivo provocar desequilibrios en las fuerzas armadas cometen errores y se acent¨²a la represi¨®n. Yo no particip¨¦ directamente en la guerrilla, pero trabaj¨¦ en una organizaci¨®n de izquierdas. Me siento culpable de este fracaso generacional, que no es un fracaso hist¨®rico porque los cambios hist¨®ricos est¨¢n ajenos a los gustos personales.? Guti¨¦rrez Sousa practica la denuncia del sistema universitario no present¨¢ndose al doctorado de Filosof¨ªa y Letras. Fuera de la Universidad se dedicar¨¢ al estudio de Am¨¦rica Latina hasta que toma la opci¨®n de viajar y centrarse en su oficio de escritor. Su obra cuestiona el militantismo literario.
?El artista es rebelde en la medida que entra en contradicci¨®n con los valores establecidos. Ahora, en cuanto pasa por ser un artista de consumo o se acomoda a una determinada conceptuaci¨®n literaria de una militancia pol¨ªtica ya no es nada. La realidad por s¨ª misma es fant¨¢stica y permite que el poeta, el artista, buscando entre el basural real vea una segunda realidad y recurra a la iron¨ªa para minarla. Es como si a una persona le descubrieses su doble personalidad y le analizases para provocar su ca¨ªda con buena dosis de fantas¨ªa y alucinaci¨®n. De la realidad cotidiana sale toda creaci¨®n literaria.?
Este peruano de largos bigotes califica a Blasco Ib¨¢?ez con la imagen ensay¨ªstica que el soci¨®logo peruano Jos¨¦ Carlos Mari¨¢tegui difundi¨® en sus libros. Seg¨²n el pensador marxista, Vicente Blasco era un buen burgu¨¦s, amante de la revoluci¨®n francesa, de los derechos del hombre y de la fraternidad universal, que quer¨ªa acomodar Espa?a al capitalismo europeo y para ello inculcaba un respeto a la democracia burguesa. ?Blasco Ib¨¢?ez es m¨¢s conocido en Suram¨¦rica corno pol¨ªtico que como escritor?, explica Guti¨¦rrez Sousa.
As¨ª me dijo Arturo presenta a un grupo de adolescentes peruanos que tienen en su amigo Arturo un l¨ªder imaginario, dep¨®sito de los deseos frustrados de una generaci¨®n que ha ido claudicando al transformar su rebeld¨ªa en aceptaci¨®n progresiva de las pautas sociales de su pa¨ªs. La narraci¨®n transcurre en unas coordenadas de realismo trascendental que hace de lo cotidiano metaf¨ªsica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.