Ecevit inicia en Mosc¨² la "ostpolitik" turca

El primer ministro turco, Bulent Ecevit, lleg¨® ayer a Mosc¨² con el prop¨®sito de dar comienzo a lo que el propio premier calific¨® recientemente ante EL PAIS de ostpolitik de Turqu¨ªa.

Con esa ostpolitik, respaldada inicialmente por un acuerdo de ?ayuda mutua? y cooperaci¨®n econ¨®mica con la URSS, cuyos detalles se fijar¨ªan en el curso de esta visita, el Gobierno socialdem¨®crata de Ankara intentar¨¢ poner en marcha su ?nuevo concepto de defensa?, apuntalar su posici¨®n internacional en el contexto de sus enfrentamientos con Grecia por Chipre y el mar Egeo, y fortalecer su papel pol¨ªtico dentro de la OTAN, sensiblemente reducido por el embargo de armas decretado por Estados Unidos contra Turqu¨ªa tras la invasi¨®n turca de Chipre, en julio de 1974.El convenio de cooperaci¨®n econ¨®mica entre Ankara y Mosc¨², que inevitablemente incluir¨¢ tambi¨¦n un principio de colaboraci¨®n pol¨ªtica, abrir¨¢ la puerta a una serie de inversiones y facilidades tecnol¨®gicas sovi¨¦ticas -acompa?adas, quiz¨¢, de suministro de armas- por un valor de hasta 3.000 millones de d¨®lares durante los pr¨®ximos diez a?os. En 1977 el ¨ªndice de inflaci¨®n super¨® en Turqu¨ªa el 50 %, y el de desempleo el 20 %, sobre todo, en algunas zonas deprimidas de Anatolia. La ocupaci¨®n militar de Chipre supone tambi¨¦n para Ankara una sangr¨ªa considerable (alrededor de 150 millones de d¨®lares anuales). El dinero sovi¨¦tico puede constituirse, pues, en una de las escasas v¨ªas de continuidad para los planes de desarrollo trazados por el equipo de Ecevit.

Estados Unidos y la Alianza Atl¨¢ntica observan con preocupaci¨®n estos primeros pasos de la ostpolitik turca. En Washington y Bruselas todo el mundo recuerda que hace apenas unos d¨ªas la presidencia de la conferencia anual de la OTAN fue ocupada, precisamente, por el se?or Ecevit. Tambi¨¦n se sabe que el Gobierno sovi¨¦tico ha decidido retirar a algunas de sus tropas destacadas en la frontera turco-rusa con el fin de facilitar la ostpolitik de Ankara. A nadie le pasa desapercibido, adem¨¢s, el hecho de que el viaje de Ecevit a Mosc¨² coincide con las negociaciones entre el presidente Jimmy Carter y el Congreso norteamericano para lograr el levantamiento del embargo de armas. Finalmente, parece claro que esta ostpolitik del socialdem¨®crata Ecevit encaja perfectamente con la del socialdem¨®crata Helmut Schmidt, quien durante la visita de Ecevit a Bonn, a fines de mayo, prometi¨® al dirigente turco venderle armamento por m¨¢s de doscientos millones de d¨®lares y, a la vez, critic¨® duramente a Washington por el mantenimiento del embargo.

Pero los aspectos estrat¨¦gicos priman en este sentido sobre los pol¨ªticos. Desde hace un a?o Mosc¨² presiona a Ankara para obtener facilidades navales en el puerto de Iskenderum; la URSS sostiene que la presencia de su flota ah¨ª ?equilibrar¨¢? la situaci¨®n militar en el Mediterr¨¢neo oriental y asegurar¨¢ el envio de petr¨®leo de Irak a Turqu¨ªa. El Gobierno anterior del derechista Suleyman Demirel rechaz¨® las pretensiones sovi¨¦ticas, pero Ecevit puede sentirse inclinado ahora a aceptarlas. Por si fuera poco, en el curso de las pr¨®ximas semanas se reabrir¨¢ en Ankara la embajada cubana; ser¨¢, probablemente, el actual embajador de Cuba en Bulgaria, acompa?ado de docenas de funcionarios, quien presentar¨¢ sus credenciales al presidente Koruturk, una de las figuras conservadoras m¨¢s revelantes del pa¨ªs.