La estrategia econ¨®mico-monetaria, principal tema a trataren la "cumbre" de la CEE

La estrategia econ¨®mico-monetaria -sin olvidar los aspectos energ¨¦ticos y sociales-, las relaciones con Jap¨®n, la ayuda a la agricultura de las regiones mediterr¨¢neas de la CEE frente a la entrada de Grecia, Espa?a y Portugal y los asuntos derivados de la ?cooperaci¨®n pol¨ªtica? (Pr¨®ximo Oriente y Africa), ser¨¢n los cuatro cap¨ªtulos principales de la cumbre de jefes de Estado o de Gobierno de los nueve del Mercado Com¨²n, convocada para el 6 y 7 de julio en Bremen (RF de Alemania).

Tal es el orden del d¨ªa -que podr¨¢ completarse con otros temas- definido en Luxemburgo ayer martes por el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la CEE.Es evidente que el primer grupo de problemas, los monetarios y econ¨®micos, es el m¨¢s importante. Los nueve se preparan a seguir, probablemente, la l¨ªnea trazada por los dirigentes de Bonn -que ocupar¨¢n la presidencia de la CEE en el curso del segundo semestre de este a?o- de imponer cierta disciplina monetaria antes de reactivar ligeramente la econom¨ªa de los nueve. Tarea a la que deber¨¢n contribuir, para ser eficaz, Estados Unidos y Jap¨®n. Diez d¨ªas despu¨¦s del debate comunitario en Bremen, los cuatro principales pa¨ªses de la CEE (RFS de Alemania, Francia, Gran Breta?a e Italia) presentar¨¢n sus prop¨®sitos a norteamericanos (Estados Unidos y Canad¨¢) y japoneses, en el curso de la cumbre, en Bonn, de las siete primeras potencias econ¨®micas del sistema capitalista.

El temario econ¨®mico y monetario a discutir en Bremen no es todav¨ªa un programa r¨ªgido y definitivo. El consejo de Luxemburgo defini¨® ?orientaciones?, insistiendo en las tesis germanas de ordenaci¨®n monetaria.

Se coment¨® ampliamente el encuentro del pasado fin de semana, en Hamburgo, entre el canciller alem¨¢n, Schmidt, y el presidente franc¨¦s, Giscard d'Estaing, entrevista que puede conducir a una ampliaci¨®n de la ?zona de estabilidad? monetaria, donde actualmente ?flotan? en unos m¨¢rgenes reducidos del 2,25% las cinco divisas fuertes de la CEE (marco alem¨¢n, franco belga luxemburgu¨¦s, flor¨ªn holand¨¦s y corona danesa). Una ampliaci¨®n de dicho margen de flotaci¨®n, ilustrado por la imagen de la denominada ?serpiente monetaria?, permitir¨ªa la entrada de las restantes monedas de los pa¨ªses de la CEE (franco franc¨¦s, libra esterlina y lira italiana) que hoy flotan libremente en funci¨®n de las presiones de la oferta y la demanda.

Un proyecto de creaci¨®n del Fondo Monetario Europeo, con funciones an¨¢logas a las del Fondo Monetario Internacional, pero con alcance limitado a los pa¨ªses de la CEE, podr¨ªa, ver tambi¨¦n la luz en la cumbre de Bremen. Los fondos aportados por el conjunto de Estados de la CEE se utilizar¨ªan para socorrer temporalmente a divisas comunitarias en apuros.

Naturalmente el ¨¦xito de la operaci¨®n no depende s¨®lo de los europeos. De ah¨ª que Bonn, as¨ª como las dem¨¢s capitales de la CEE, est¨¦n convencidos que Estados Unidos debe vincularse a la nueva ordenaci¨®n monetaria, con un sost¨¦n a la cotizaci¨®n internacional del d¨®lar.

La presi¨®n comercial japonesa en los mercados de la CEE, con un super¨¢vit a su favor de 5.200 millones de d¨®lares de balanza comercial en 1977 (unos 415.000 millones de pesetas), es otro de los elementos clave para la salud econ¨®mica de la CEE. Los nueve intentar¨¢n convencer a los dirigentes de Tokio de ?moderar? sus ventas a la CEE y, sobre todo, de comprar m¨¢s productos de origen comunitario, entre ellos aviones Airb¨²s.

Europeos, norteamericanos y japoneses deber¨¢n alejar el espectro del proteccionismo, con un avance en el Tokio Round, o negociaciones comerciales multilaterales del GATT (Acuerdo General sobre Tarifas y Comercio), destinado a reducir las barreras aduaneras en el comercio mundial.

Signo de la problem¨¢tica actual, los ministros de Asuntos Exteriores de la CEE cerraron su encuentro de dos d¨ªas en Luxemburgo con la decisi¨®n formal de iniciar negociaciones para la renovaci¨®n de la Convenci¨®n de L?me que asocia a los nueve de la CEE con 53 Estados de Africa, Caribe y Pac¨ªfico, ricos en materias primas y compradores de productos industriales. Tambi¨¦n, signo de los tiempos, los nueve corrigieron en Luxemburgo las previsiones en el sector de producci¨®n sider¨²rgica y construcci¨®n naval, que deber¨¢n reducir sus efectivos en el futuro y reestructurar sus producciones.