Los partidos pol¨ªticos, contra el Tribunal de Cuentas como ente de control del gasto p¨²blico

?El pleno del Tribunal de Cuentas del Reino no es un ¨®rgano democr¨¢tico y est¨¢ excesivamente politizado, por lo que est¨¢ incapacitado para cumplir con su misi¨®n, que consiste en controlar la actividad econ¨®mica del sector p¨²blico?, dijo Ram¨®n Tamames en el curso de una mesa redonda celebrada ayer tarde en Madrid sobre El control econ¨®mico del sector p¨²blico en una sociedad democr¨¢tica.Esta reuni¨®n ha sido organizada por funcionarios del Tribunal de Cuentas, y en la misma han intervenido representantes de los cuatro partidos pol¨ªticos mayoritarios. Por el Partido Comunista, Ram¨®n Tamames; por el PSOE, Enrique Bar¨®n; por UCD, Santiago Rodr¨ªguez Miranda, y por AP, Manuel Fraga.

Existi¨® unanimidad entre los participantes en la reuni¨®n, excepto Fraga Iribarne, en criticar la situaci¨®n actual de este organismo, y los tres ponentes propugnaron una mayor independencia pol¨ªtica, con objeto de que el Tribunal de Cuentas pueda asesorar con mayor eficacia al poder legislativo.

El se?or Rodr¨ªguez Miranda, de UCD, plante¨® la necesidad de un control posterior a la ejecuci¨®n de los gastos p¨²blicos, control que debe ser efectuado por un ¨®rgano externo al propio poder ejecutivo, ya que es muy dif¨ªcil, incluso en el contexto de una sociedad democr¨¢tica, que la Administraci¨®n sea capaz de controlarse a s¨ª misma. Insisti¨® sobre la necesidad de la independencia pol¨ªtica del Tribunal de Cuentas y en que este organismo permanezca al margen de los vaivenes pol¨ªticos para que no suceda lo que ya pas¨® durante la Rep¨²blica.

El diputado socialista Enrique Bar¨®n calific¨® al Tribunal de Cuentas de ?archivo mayor del Reino?, al que van a parar todas las cuentas del Estado, pero debido a su falta de independencia pol¨ªtica respecto al Ministerio de Hacienda -ya que sus cargos son de designaci¨®n pol¨ªtica- es incapaz de cumplir una funci¨®n de aut¨¦ntica fiscalizaci¨®n del gasto p¨²blico.

El diputado de Alianza Popular Fraga Iribarne se manifest¨® contrario a un aumento excesivo del sector p¨²blico, lo que considera incompatible con una econom¨ªa de mercado, y propugn¨® la necesidad de que el sector p¨²blico tenga el menor tama?o posible, porque, a la larga, ser¨¢ imposible controlar su gesti¨®n a partir de un cierto tama?o.

El control pol¨ªtico de la actividad econ¨®mica del sector p¨²blico -dijo Fraga- debe corresponder exclusivamente al Parlamento, y se?al¨® la necesidad de no provocar una ruptura con el pasado de este organismo, que ha sido enormemente eficaz dado los medios de que dispon¨ªa. Reconoci¨®, no obstante, que en una sociedad democr¨¢tica es imprescindible un control p¨²blico representativo de la gesti¨®n econ¨®mica del Estado, y propugn¨® una mayor dotaci¨®n de medios para el Tribunal de Cuentas en el futuro.

Para Ram¨®n Tamames, el Tribunal no cuenta con el suficiente grado de independencia, y su labor de revisi¨®n de las cuentas del Estado no puede realizarla eficazmente por falta de medios materiales y de profesionalizaci¨®n.