Constituido el Partido de los Socialistas Catalanes

El domingo qued¨® constituido el Partido de los Socialistas Catalanes, resultante de la fusi¨®n del Partit Socialista de Catalunya (Congr¨¦s) (PSC-C), el Partit Socialista de Catalunya (ex Reagrupament) (PSC-R) y la Federaci¨®n Socialista Catalana del PSOE.

Todas las fuentes, incluso las m¨¢s optimistas, coincidieron en se?alar que esta uni¨®n era, por ahora, m¨¢s formal que real. En este sentido, ser¨¢ obligado hablar durante largo tiempo, estableciendo todo tipo de distinciones, de los dirigentes procedentes de uno y otro partido como elementos pol¨ªticos no homog¨¦neos. El trecho de camino que queda por recorrer para convertir en operativa esta fusi¨®n es, a¨²n muy largo.Los congresos de fusi¨®n desarrollados a lo largo del pasado fin de semana, no estuvieron exentos de incidentes ni de controversias, demostrativas, adem¨¢s, de la. existencia de corrientes internas en. el seno de los dos mayores partidos; ahora fusionados, el PSC-C y el PSOE.

Se produjo adem¨¢s la paradoja. consistente en que el partido en cuyo seno se dio un mayor rechaz¨® al proyecto unitario fue el PSOE, pese a que es absolutamente indudable que este sector es el que se lleva la parte del le¨®n en la direcci¨®n del nuevo partido. En cambio, el gran sacrificado, el PSC-R, partido que en su d¨ªa fundara Josep Pallach, acept¨® sin rechistar las condiciones draconianas que se le impusieron y que se concretan en la presencia de un solo dirigente del PSC-R en la nueva ejecutiva.

Con una cierta iron¨ªa, un dirigente del PSC-R manifest¨® a El PAIS que comprend¨ªa esta total aceptaci¨®n de las duras condiciones impuestas a su partido y su falta de reacci¨®n. ?Nosotros no podemos decir nada -afirm¨®- porque para traer hasta esta fusi¨®n a nuestro partido hemos perdido un 305,10 de nuestros militantes.?

Descalabro de la tendencia catalanista

Con relaci¨®n al PSC-C es de indicar el total descalabro de la tendencia de base m¨¢s catalanista, la denominada ?segundo congreso?. Ello fue paralelo a una aceptaci¨®n total del proceso de fusi¨®n por parte de los dirigentes del PSC-C con mayor renombre en la militancia m¨¢s catalanista, concretamente los diputados Ernest Lluch y Raimond Obiols.Los hechos m¨¢s espectaculares se produjeron en el seno de la Federaci¨®n Socialista Catalana del PSOE. Se concretaron en la desaprobaci¨®n, por amplia mayor¨ªa de votos, de la direcci¨®n saliente muy particularmente la gesti¨®n del hasta ahora primer secretario, Josep Mar¨ªa Triginer.

La p¨¦rdida de prestigio de Triginer no es algo nuevo. Fue expuesta en estas p¨¢ginas en una serie de art¨ªculos que fueron desmentidos por el PSOE de Catalu?a. La reaIidad confirma ahora aquellas primeras afirmaciones.

Las mayores cr¨ªticas a Triainer ven¨ªan del hecho de que no informara al resto del partido del proceso unitario. Ello cre¨® una incre¨ªble confusi¨®n. consistente en que, incluso delegados al congreso del PSOE. de este fin de semana, ignorasen que se iba a la fusi¨®n con los otros dos partidos. Incre¨ªble pero cierto.

En el seno del propio PSOE, los sectores m¨¢s esc¨¦pticos desde siempre a una fusi¨®n con el PSC-C -los denominados ?espa?olistas?- consideran ahora que el tipo de fusi¨®n logrado es una victoria para el PSOE, ya que, en su opini¨®n, equivale a una mera integraci¨®n en el PSOE.

Las concesiones del PSOE

En este sentido, un representante de esta corriente, Joaqu¨ªn Jou, miembro del comit¨¦ federal del PSOE, manifest¨® a EL PAIS: ?Nosotros hemos hecho concesiones l¨¦xicas, tales como admitir el t¨¦rmino "soberan¨ªa". Pero cabe preguntarse a qu¨¦ equivale ese, t¨¦rmino si luego se admite que coticemos a nivel estatal y que exista una misma disciplina parlamentaria en el seno del PSOE.?En efecto, la victoria de hecho del PSOE aparece realmente evidente pese a los amagos l¨¦xicos. Pero esta victoria no puede homogeneizar dos realidades diferentes, analizables incluso, en t¨¦rminos marxistas, como protagonistas en ciernes de una aut¨¦ntica lucha de clases interna. En efecto, el PSC-C es esencialmente un partido de profesionales e intelectuales de origen catalanista, pertenecientes a la burgues¨ªa peque?a y media. El PSOE es, en cambio, el partido que recibe masivamente el voto de los inmigrantes de otras zonas de Espa?a a¨²n poco integrados en la realidad catalana. Tradicionalmente adem¨¢s. el PSOE ha sido en Catalu?a uno, de los blancos preferidos por la burgues¨ªa catalanista en sus cr¨ªticas al ?espa?olismo?.

Revent¨®s, secretario del nuevo partido

En esta realidad contradictoria. uno de los papeles m¨¢s dif¨ªciles le ha correspondido a Joan Revent¨®s, designado primer secretario del nuevo partido. De origen indiscutiblemente catalanista, miembro de una familia de la m¨¢s alta burgues¨ªa catalana, Revent¨®s deber¨¢ conducir un partido cuya direcci¨®n, en sus puestos clave, estar¨¢ en manos de obreros inmigrados cuya conciencia social parte de criterios muy f¨¢cilmente diferenciables de los que dieron lugar al nacimiento del PSC-C.En el terreno electoral, la fusi¨®n y el peso del PSOE en su formulaci¨®n concreta apuntalar¨¢n la fuerza de los socialistas en el entorno industrial de Barcelona -feudo comunista durante la lucha contra el franquismo- pero pueden acentuar la p¨¦rdida de votos socialistas en L¨¦rida y Gerona como indican recientes encuestas de opini¨®n efectuada por la Presidencia del Gobierno y reveladas en estas p¨¢ginas (ver EL PAIS de 15 de junio). En efecto. la peque?a burgues¨ªa catalanista puede perfectamente no comprender o no compartir esta nueva realidad del socialismo catal¨¢n.