El programa econ¨®mico que se negocie debe permitir una reactivaci¨®n controlada
Tres instituciones de peso en el mundo empresarial han formula do diagn¨®sticos y programas de futuro en los ¨²ltimos d¨ªas. El Banco de Bilbao, en el bolet¨ªn Situaci¨®n, que realiza su servicio de estudios, analiza la situaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola al acabar el primer semestre del a?o y formula alguna de las inc¨®gnitas del futuro. Las C¨¢maras de Comercio hacen otro tanto en un an¨¢lisis de coyuntura de uso interno y, finalmente, el C¨ªrculo de Empresarios ha publicado las bases de un programa econ¨®mico denominado ?Estrategia de ajuste para la recuperaci¨®n econ¨®mica?. El programa ha sido realizado bajo la direcci¨®n de Eduardo Punset, economista, ex funcionario del Fondo Monetario Internacional y Banco Mundial, y ex secretario general t¨¦cnico del Ministerio de Industria en la etapa de Alberto Oliart. El programa Punset, asumido por el C¨ªrculo de Empresarios, parece ofrecer una alternativa al programa Fuentes de saneamiento y reforma formulado el pasado a?o. El reciente discurso del ministro de Industria en Gij¨®n, calificado de importante en medios econ¨®micos, parece muy bien sintonizado con las ideas que ahora asume el C¨ªrculo de Empresarios. Situaci¨®n destaca la eficacia del programa de saneamiento al cumplir un a?o de vigencia, aunque se?ala que ?los males del enfermo siguen patentes esperando la mano del cirujano que corrija las causas que originaron la cr¨®nica enfermedad?. Tanto el informe del Banco de Bilbao como el de las C¨¢maras de Comercio coinciden en el ¨¦xito de la lucha contra la inflaci¨®n y el d¨¦ficit exterior. Destacan que es elevado el precio que ha tenido, en cuanto aumento del paro, lo que sit¨²a a este tema en primer t¨¦rmino de las preocupaciones. Se?alan tambi¨¦n que la actividad en el primer semestre ha sido superior a la prevista, aunque no aparecen s¨ªntomas consolidados de recuperaci¨®n de las expectativas empresariales y por tanto de la inversi¨®n.
Situaci¨®n pone de relieve que no se puede considerar que la lucha contra la inflaci¨®n y el desequilibrio exterior ha terminado. Ambos problemas siguen presentes y pueden aparecer en un cambio de coyuntura agudizados sobre situaciones precedentes. El problema que se plantea para cualquier pol¨ªtica futura es el de conciliar una reactivaci¨®n capaz de frenar e incluso reducir el desempleo y un control de los precios y del d¨¦ficit exterior.
Tanto el bolet¨ªn del Banco de Bilbao como el informe de las C¨¢maras de Corriercio concluyen con la necesidad de un compromiso entre la Administraci¨®n y las fuerzas sociales -centrales sindicales y organizaciones patronales para fijar las condiciones de la producci¨®n en el pr¨®ximo a?o. ?Habr¨¢ que decidirse -dice Situaci¨®n- por tasas de empleo satisfactorias y salarlos contenidos contra la posici¨®n insolidaria de salarios altos y mucho paro.? ?Los compromisos -dice m¨¢s adelante- deben permitir afrontar con responsabilidad y eficacia la correcci¨®n del nivel de paro con el restablecimiento de la inversion productiva, mejorando tambi¨¦n el nivel de la productividad media del sistema, ¨²nica forma para alcanzar el crecimiento no inflacionario de la renta de los espa?oles. ?
Alternativa del C¨ªrculo de Empresarios
El programa asumido por el C¨ªrculo de Empresarios y preparado por el economista Eduardo Punset parte de la base de que una pol¨ªtica contractiva de reducci¨®n de la capacidad, de la demanda interna con control monetario riguroso y limitaci¨®n del gasto p¨²blico no es suficiente para hacer frente a la crisis e incluso puede poner en peligro la democracia por el crecimiento del desempleo. El programa propone combinar una pol¨ªtica monetaria rigurosa para evitar tensiones de precios y medidas de reconversi¨®n industrial que permitan reasianar recursos de uno a otro sector y transferir oferta al sector exterior para recuperar el impacto de la crisis energ¨¦tica.
?El problema de Espa?a -dice el texto- es de crisis generalizada de sobreproducci¨®n y, necesidad imperiosa de transferir un 5 % del PNB al exterior. S¨®lo el sector industrial puedegenerar primordialmente el excedente exportable y s¨®lo en el sector industrial cabe planificar a medio plazo la reasianaci¨®n de recursos hacia la exportaci¨®n v los sectores m¨¢s productivos. ?
Y a?ade: ?A la pol¨ªtica industrial corresponde el protagonismo que hasta ahora se asign¨® a la pol¨ªtica monetaria o incluso de rentas y fiscal mucho m¨¢s operativas para contener la demanda.
Adem¨¢s, dice el informe, a la hora de negociar, tanto la Administraci¨®n como la clase empresarial, reducciones de sobreproducci¨®n evidente en sectores claves no se podr¨¢ tener ¨¦xitos sin alternativas razonables de absorci¨®n del desempleo.
Insiste en la necesidad de gradualismo en la aplicaci¨®n del programa y dice que planes a corto plazo son in¨²tiles, ya que de lo que se trata es de programar objetivos a mucho mayor plazo. Con respecto a la pol¨ªtica monetaria y cambiaria, el programa asumido por el C¨ªrculo se?ala que el mantenimiento riguroso de una tasa de crecimiento de disponibilidades l¨ªquidas en un momento expansivo del sector exterior y del p¨²blico que obliga a contraer el cr¨¦dito privado, puede resultar suicida para las empresas y para la inversi¨®n futura. El programa propone reducir el nivel de reservas de forma gradual y practicar una pol¨ªtica de flotaci¨®n de la moneda m¨¢s limpia. Defiende que la mejor pol¨ªtica de precios es una pol¨ªtica monetaria y por ello reclama la supresi¨®n de los controles administrativos de los precios al tiempo que el desmantelamiento de monopolios arancelarios e industriales. M¨¢s adelante el programa insiste en la necesidad de canales de Financiaci¨®n a largo plazo que compensen la desaparici¨®n de los circuitos privilegiados de cr¨¦dito.
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