River y Atl¨¦tico vuelven enfrentarse en la final del Carranza
Pese a clasificarse con cierta comodidad para la final del Carranza, el Atl¨¦tico no gust¨®. El Bolonia fue un rival muy d¨¦bil, que amontonaha hombres atr¨¢s sin que eso le diera ninguna seguridad defensiva y que se mostr¨® muy inocente en el ataque. Ante un rival as¨ª, el Atl¨¦tico no acumul¨® muchos m¨¦ritos, aunque gan¨® con justicia, a pesar de que jug¨® con diez hombres los ¨²ltimos veinte minutos por expulsi¨®n de Marcial.Jug¨® el Atl¨¦tico, lo mismo que el Bolonia, con un exceso de precauciones defensivas. Por delante de la l¨ªnea habitual de cuatro defensas quedaba Eusebio, como un l¨ªbero adelantado. Marcial, Leal y Guzm¨¢n formaban la l¨ªnea media, Avala basculaba en zonas de media punta y s¨®lo Rub¨¦n Cano era un aut¨¦ntico atacante. Aunque tanto Percira como los laterales sub¨ªan a veces alataque,cuando lo hac¨ªan eran relevados por alg¨²n hombre de la media en la retaguardia. El p¨²blico se pas¨® el partido pregunt¨¢ndose por qu¨¦ el Atl¨¦tico manten¨ªa esas precauciones ante un equipo que, a su vez, defend¨ªa descaradamente con cinco hombres y mostraba muy poca profundidad en sus contraataques.
Y es que el Bolonia se mostr¨® como un rival muy flojo. Ya tra¨ªa el cartel de ?cenicienta? del torneo, pero ha estado muy por debajo de lo que cab¨ªa esperar. Sin seguridad defensiva, a pesar de sus muchos hombres y con un pobre nivel medio en las individualidades, no ha sido equipo digno del Carranza, torneo que siempre ha exhibido calidad. De cuando en cuando se le ha visto sacar el bal¨®n bien jugado de la defensa, pero sin llegar al ataque nunca con peligro.
El Atl¨¦tico domin¨® porque su superior calidad t¨¦cnica le bastaba para eso. Pero no se entreg¨®, y su f¨²tbol result¨® soso. El primer tiempo lo anim¨® ¨²nicamente Guzm¨¢n, corret¨®n y voluntarioso como siempre y, esta vez, adem¨¢s, acertado. Los dos goles llegaron por acciones suyas. Marcial dio un buen tono tambi¨¦n en esta primera parte, pero el Atl¨¦tico no hizo ni mucho menos unjuego brillante.
En la segunda mitad, adem¨¢s, el equipo rojiblanco pretendi¨® tomarse un descanso, visto que ten¨ªa el partido encarrilado y que la final ha de resultarle m¨¢s dif¨ªcil. Pero se le complicaron las cosas con el gol del Bolonia -en fuera de juego- y con la expulsi¨®n de Marcial, que hizo una chiquillada, pues contest¨® a una dura entrada de Vicenzi -que las prodig¨®- con un patad¨®n que le hizo ver la tarjeta roja. Pero el Atl¨¦tico le ech¨® genio al final del partido, y eso fue lo bastante para que el d¨¦bil Bolonia, lejos de alcanzar el empate, admitiera un tercer gol que sentenciaba el partido. El Atl¨¦tico estar¨¢, pues, en la final, en la que se ver¨¢ de nuevo las caras con el River, que le arrebat¨® el Villa de Madrid. Marcial, expulsado, no jugar¨¢ la final, que ser¨¢ televisada en directo. Los dos equipos disputaron una re?ida final en el Villa de Madrid, lo que permite esperar con inter¨¦s este nuevo enfrentamiento.
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