Aprobada la suspensi¨®n de derechos constitucionales

Solamente los senadores Carlos Ollero (de la Agrupaci¨®n Independiente) e Isa¨ªas Zabala (Senadores Vascos) se abstuvieron en la votaci¨®n del apartado segundo del art¨ªculo 50 del proyecto de Constituci¨®n aprobado por el Congreso, en el que se establece la posibilidad de suspensi¨®n ? para personas determinadas, en relaci¨®n con las investigaciones correspondientes a la actuaci¨®n de bandas armadas o elementos terroristas?, de las garant¨ªas constitucionales referidas a la duraci¨®n de la detenci¨®n preventiva, a la inviolabilidad de domicilio y al secreto de las comunicaciones. Los dem¨¢s grupos votaron favorablemente y rechazaron. las propuestas de supresi¨®n de Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s y Luis Mar¨ªa Xirinacs.

El citado art¨ªculo, que fue uno de los puntos esenciales en el consenso logrado entre los grupos parlamentarios del Congreso, establece que una ley org¨¢nica podr¨¢ determinar la forma y los casos en que, con la necesaria intervenci¨®n judicial y el adecuado control parlamentario, podr¨¢n ser suspendidos tales derechos, as¨ª como que ?la utilizaci¨®n injustificada o abusiva de las facultades reconocidas en dicha ley org¨¢nica producira responsabilidad penal, como violaci¨®n de los derechos y libertades reconocidos por las leyes?.

Estas garant¨ªas parecieron suficientes al Grupo Socialista,en nombre del cual su portavoz, Francisco Ramos, manifest¨® que, a la vista de los mecanismos legales de que se dota al Gobierno, ¨¦ste deber¨¢ explicar a las C¨¢maras la ineficacia de las actuaciones policiales.

El se?or Ollero defendi¨® que fuera el Tribunal Constitucional el encargado de determinar el alcance y las personas afectadas por la suspensi¨®n de derechos citada. Por su parte, los se?ores Xirinacs y Bandr¨¦s se opusieron en¨¦rgicamente al precepto. Este ¨²ltimo consider¨® que supon¨ªa una amenaza a todo el Estado, pero especialmente al pueblo trabajador vasco, a trav¨¦s de un estado de excepci¨®n solapado. Asegur¨® que la paz no llegar¨¢ por la v¨ªa de la represi¨®n ni de los castigos de guerra, como la supresi¨®n de los conciertos econ¨®micos vascos. Pidi¨® a los senadores que reflexionaran sobre el siguiente p¨¢rrafo de un editorial de EL PAIS de 17-5-77: ?Tal vez alg¨²n d¨ªa hagan examen de conciencia quienes condenaron desde sus elevados cargos a los muchachos andaluces, extreme?os y castellanos, de origen campesino y popular, que integran las filas de la Guardia Civil y de la Polic¨ªa Armada, a tener que aplicar una pol¨ªtica de orden p¨²blico que llevaba impl¨ªcito el derramamiento de sangre, y que les hac¨ªa vivir en un clima de impopularidad y hostilidad.?

Previamente, la Comisi¨®n Constitucional del Senado aprob¨® el art¨ªculo 49, que regula la instituci¨®n del defensor del pueblo, con peque?as modificaciones de estilo a cargo de UCI). La propuesta de Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, encaminada a que en las comunidades aut¨®nomas existiera tambi¨¦n la instituci¨®n del defensor del pueblo, fue rechazada por la comisi¨®n.

La sesi¨®n se inici¨® ayer con el rechazo de una enmienda defendida por Justino de Azc¨¢rate, solicitando incluir un nuevo art¨ªculo que declare el est¨ªmulo y la protecci¨®n del Estado a la iniciativa privada en orden a actividades de servicio e inter¨¦s general.