"El d¨²o de la africana" y "La alegr¨ªa de la huerta"

La compa?¨ªa Isaac Alb¨¦niz contin¨²a su brillante temporada de zarzuela en el Centro Cultural de la Villa. Me parece que sus ¨²ltimas dos reposiciones son El d¨²o de la africana y La alegr¨ªa de la huerta, pues luego jugar¨¢n en sus carteles con t¨ªtulos ya presentados (Marina, La corte de fara¨®n, etc¨¦tera). Como siempre, la asistencia en este caso ha sido masiva y el p¨²blico, eminentemente popular, muestra su agrado por el g¨¦nero y aplaude a sus int¨¦rpretes. Tanto El d¨²o, de Miguel Echegaray y Caballero, como La alegr¨ªa, de Garc¨ªa ?lvarez, Paso y Chueca, son piezas favoritas por la gracia de la partitura -par¨®dica y casi operet¨ªstica en el primer caso, enraizada en lo ?folkl¨®rico? en el segundo- como por la ligereza del libreto, en especial el del D¨²o de la africana, nacido en el momento del imperio meyerberiano. Debi¨® ser grande para dar lugar a piececillas como la de Caballero, como lo fue el de Rossini que dio ocasi¨®n a otra obra de g¨¦nero chico, El barbero de Sevilla. En realidad, m¨¢s que a los autores, se caricaturiza el mundo de la ¨®pera de telones adentro.Pilar Abarca, Rosa Abril, Luis Quir¨®s, Rafael Castej¨®n y todos los dem¨¢s, incluida la entusiasta directora Dolores Marco, recibieron el homenaje del adicto auditorio.