Un parto retrasa la expulsi¨®n de los ocupantes de una vivienda
Razones humanitarias motivadas por el parto de una mujer que, junto con su marido, hab¨ªa ocupado recienteniente un piso vac¨ªo del INV, hicieron que la Polic¨ªa Armada aplazara una semana el desalojo previsto para las diez y media de la ma?ana de ayer. La vivienda ocupada llevaba siete a?os sin habitar. Est¨¢ situada en el barrio de La Ventilla, en la calle Joaqu¨ªn Dicenta, bloque 50, n¨²mero 7.La inicial adjudicataria es una se?ora mayor, Carmen S¨¢ez, enferma, que hace siete a?os se traslad¨® a vivir con una hija suya a un piso de ¨¦sta en el barrio del Pilar. La nueva adjudicaci¨®n de este piso, estaba prevista para una familia del barrio, seg¨²n decisi¨®n de la comisi¨®n mixta formada por la asociaci¨®n de vecinos y funcionarios de la Delegaci¨®n de la Vivienda.
Para poder realizar legalmente esta segunda adjudicaci¨®n es necesario que Carmen M¨¦ndez hubiera hecho entrega de las llaves del piso al Instituto Nacional de la Vivienda. Sin embargo, desde primeros de este mes, en que se le pidieron las llave, la se?ora M¨¦ndez se ha negado sistem¨¢ticamente a entregarlas.
En medio de esta espera, un matrimonio joven -?no m¨¢s de dieciocho a?os?, informaron los vecinos- se instalaron en la vivienda al margen de los planes de la asociaci¨®n de vecinos, de la Delegaci¨®n e incluso de los vecinos del inmueble.
En el momento de la ocupaci¨®n, la mujer se encontraba a punto de dar a luz, cosa que ocurri¨® finalmente esta misma semana. Por eso, al llegar ayer por la ma?ana la polic¨ªa a desalojar a la pareja y encontrarse con el beb¨¦ reci¨¦n nacido, decidieron dar un nuevo plazo de una semana, en principio, para que el matrimonio encuentre un alojamiento en el que meterse.
Juan Carlos Al¨ªa, presidente de la Asociaci¨®n de Vecinos de La Ventilla, manifest¨® a EL PAIS que ?este hecho es malo y negativo para el barrio. El matrimonio joven ha ocupado el piso al margen de la asociaci¨®n. Hay gente muy necesitada en el barrio y ellos son los primeros a la hora de aprovechar estas viviendas. Lo que ha ocurrido ahora me parece un incidente lamentable del que es responsable la burocracia administrativa?.
Las ocupaciones por libre de viviendas vac¨ªas no solamente contrar¨ªan los planes de las juntas directivas de las asociaciones vecinales, sino que tambi¨¦n son mal acogidas por algunos sectores de familias del barrio. Ello se debe a que ¨²ltimamente son muchas las parejas j¨®venes que por falta de recursos econ¨®micos se instalan en una vivienda vac¨ªa, aunque ¨¦sta est¨¦ fuera de su barrio. Sin embargo, las asociaciones defienden a ultranza un minilocalismo que no rebasa los l¨ªmites geogr¨¢ficos del barrio.
Una de las vecinas del inmueble, Elisa Sedano, manifest¨® a EL PAIS su desacuerdo con esa ocupaci¨®n por libre. ?La pareja que se ha metido en la casa son dos chiquitos que jugaban a los matrimonios y les ha salido mal. Las consecuencias del juego las pagamos ahora nosotros, porque si no hubiera sido por el ni?o, la polic¨ªa los hubiera desalojado.?
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