Sectores de la curia y cardenales cuestionan el pontificado de Juan Pablo I

?La elecci¨®n del nuevo Papa ser¨¢ menos simple que la del anterior porque, no obstante las apariencias, Juan Pablo I hab¨ªa comenzado ya a desilusionar?, escrib¨ªa ayer el diario laico-socialista La Repubblica. Podr¨ªa parecer absurda esta afirmaci¨®n mientras en todo el mundo se est¨¢n escribiendo r¨ªos de palabras para aclamar la ?esperanza? que el nuevo Papa hab¨ªa abierto en la Iglesia y a¨²n m¨¢s all¨¢. La verdad es que a la gente, despu¨¦s de Pablo VI, un Papa problem¨¢tico y angustiado y que hablaba el lenguaje del mundo pol¨ªtico y diplom¨¢tico, este Papa que re¨ªa y sonre¨ªa siempre, que hablaba con los ni?os, que usaba el dialecto y explicaba el catecismo con an¨¦cdotas, gustaba mucho, aunque se supiera que era muy tradicional, que hab¨ªa sido un gran luchador contra el divorcio y que era claramente anticomunista.

Pero al mismo tiempo empezaba a no gustar a la parte de la curia m¨¢s tradicional porque ?se les escapaba?. No gustaba a los te¨®logos ortodoxos porque ?no era preciso?, y un Papa, dec¨ªan, ?debe estar muy atento cuando habla?. No gustaba a muchos de los que lo hab¨ªan elegido del ala m¨¢s moderada porque empezaron a darse cuenta que algunos de sus gestos, muy aplaudidos por la gente, pod¨ªan llevarle m¨¢s all¨¢ de lo que ¨¦l mismo, por formaci¨®n, representaba hasta el momento de su elecci¨®n: un conservador.Tampoco gustaba al mundo de la cultura. Algunos psicoanalistas laicos lo definieron como la ?anti-cultura?, y los cat¨®licos progresistas hab¨ªan ya contado las veces que hab¨ªa hablado en un mes de ?disciplina? y de ?obediencia? y hab¨ªan hecho la lista de los autores ?reaccionarios? que hab¨ªa citado en sus discursos. Hoy se puede decir que era un Papa ?parad¨®jico?, que empezaba a gustar a algunos que no lo habr¨ªan votado y a disgustar a m¨¢s de uno de quienes le hicieron la campa?a electoral.

Para los seguidores del obispo Lef¨¦bvre, el rebelde tradicional, la respuesta es muy sencilla: ?Si Dios lo ha llamado despu¨¦s de un mes de pontificado est¨¢ claro que no quer¨ªa que reinase.? Lo dijo el padre Coache apenas conocida la noticia de su muerte. Es la tesis tradicional de la m¨¢s vieja teolog¨ªa que afirma que Dios protege tanto a su Iglesia que ning¨²n Papa la puede destruir porque antes que cometer errores graves para la fe ?se lo llevar¨ªa con ?l?.

Juicios encontrados

El cardenal Flori, ex arzobispo de Florencia, una de las mayores personalidades de la Iglesia intransigente italiana, famoso te¨®logo, declar¨® ayer que esta muerte ?es un misterio y un designio de Dios?. Seg¨²n Flori, ?este Papa ten¨ªa una caracter¨ªstica: no pronunciar nunca condenas, prefer¨ªa el di¨¢logo?, y a?adi¨®: ??Pero qui¨¦n sabe d¨®nde ir¨ªa a parar la Iglesia con un Papa que dialoga siempre?? En una audiencia, el papa Luciani hab¨ªa dicho que Dios ?m¨¢s a¨²n que padre, es madre?, y Flori responde: ?No, por amor de Dios, fue todo una equivocaci¨®n; esta afirmaci¨®n podr¨ªa desencadenar una serie de problemas, no s¨®lo de car¨¢cter eciesiol¨®gico, sino, tambi¨¦n, psicoanal¨ªtico, porque se podr¨ªa hablar de un complejo de Edipo no resuelto.? Y a?adi¨®: ?Y lo digo yo, que soy un antiguo catedr¨¢tico de la universidad lateranense.?Por lo que se refiere al sucesor del papa Luciani, este viejo conservador, que tiene a¨²n mucho influjo entre los cardenales moderados, dijo abiertamente que ?despu¨¦s de este trauma la Iglesia necesita una figura s¨®lida... ; vivimos en tiempos dif¨ªciles y la historia la hacen los hombres, por eso hace falta un Papa joven, vigoroso, heroico?. ?Hablaba de Benelli?

En las dem¨¢s declaraciones de los dem¨¢s cardenales se empieza ya a distinguir un com¨²n denominador: no basta un p¨¢rroco bueno para poder soportar el peso del papado tal como se concibe, es decir, una mezcla de Evangelio y de diplomacia, de obispo y de jefe de Estado, de hombre de Dios y de mediador entre los Estados.

Todos est¨¢n de acuerdo en que el coraz¨®n del papa Luciani se par¨® porque no pudo soportar ni la emoci¨®n ni su falta de experiencia curial. Un exponente de la curia dijo ayer abiertamente: ?El Papa vivi¨® un mes de infierno en el Vaticano.?

A la busca de un Papa curial

Por eso se empieza a pensar que esta vez los cardenales, ante el golpe recibido, ser¨ªan m¨¢s prudentes: buscar¨¢n un candidato que sea un pastor, que no desilusione la esperanza popular que hab¨ªa despertado el papa Luciani, pero, al mismo tiempo, que tenga experiencia de la curia o de la diplomacia vaticana. Hay quien piensa que incluso para hacer una reforma a fondo del complicado mecanismo del Estado m¨¢s peque?o, pero m¨¢s potente del mundo, el m¨¢s indicado no es un Papa que ?no sepa nada de este mundo?, porque podr¨ªa acabar siendo manejado, sino un Pont¨ªfice que conozca este mundo sin amarlo demasiado, que lo conozca lo suficiente para no dejarse contaminar y para poder luchar. Pablo VI quiz¨¢ no hizo todo lo que hubi¨¦semos deseado, pero lo poco que hizo lo pudo realizar porque hab¨ªa vivido treinta a?os dentro de la curia y hasta lo hab¨ªan echado por ?peligroso?.Todo esto hace pensar que el pr¨®ximo c¨®nclave, que se abrir¨¢ el d¨ªa 14, no ser¨¢ de los m¨¢s f¨¢ciles, a pesar de que los cardenales hace un mes dijeron ya todo, se pusieron de acuerdo sobre las l¨ªneas generales y sobre las necesidades de la Iglesia en este momento. Pero ya uno de los mayores influenciadores del c¨®nclave, el cardenal Koenig, de Viena, ha dicho: ?Ser¨¢ muy dif¨ªcil encontrar otro Luciani que sepa despertar tanta simpat¨ªa en la gente.?