El Consejo Espa?ol de Curtidores, disconforme con la adquisici¨®n de Segarra por el Estado

La definitiva adquisici¨®n de la empresa de calzados y curtidos Segarra por el Patrimonio del Estado ha merecido la desaprobaci¨®n del Consejo Espa?ol de Curtidores, seg¨²n una carta remitida por el secretario de esta asociaci¨®n en la que matiza algunos aspectos de la informaci¨®n publicada sobre el caso Segarra, el pasado d¨ªa 17 de septiembre.

La Asociaci¨®n de Curtidores se?ala que en ning¨²n caso ha defendido la liquidaci¨®n de Segarra como una operaci¨®n para eliminar un competidor. La propuesta de los curtidores hecha al vicepresidente Abril, cuando ¨¦ste pidi¨® opini¨®n al sector sobre el futuro de Segarra, se concreta en los siguientes objetivos.?Primero: Creemos que la empresa Segarra debe "privatizarse" nuevamente, sin perjuicio de los buenos oficios de la Administraci¨®n de cara a lograr el m¨¢ximo saneamiento posible del pasivo de aqu¨¦lla, p¨²blico y privado, as¨ª como las mayores incorporaciones posibles a su activo.

Segundo: Descomponer la empresa (en un plazo predeterminado) en diferentes partes como si de empresas distintas se tratase, a tenor de las diferentes especialidades de producci¨®n y comercializaci¨®n. Hay que tener en cuenta para ello que no es igual, por ejemplo, la curtici¨®n de suela que la de cromo, el calzado,de se?ora que el de caballero, o el militar, el vulcanizado, los servicios distintos, etc¨¦tera.

Tercero: Poner a p¨²blica licitaci¨®n cada una de aquellas partes, con absoluta claridad en cuanto a los respectivos b¨¢lances, situaci¨®n de plantillas financieras,etc¨¦tera.

Cuarto: Para tales licitaciones, ofrecer prioridad de participaci¨®n y oferta a los obreros en plantilla correspondientes a cada una de aquellas secciones o partes, a fin de que ellos puedan acceder prioritariamente a tal propiedad, mediante incluso la oferta, a tal fin, de cr¨¦dito oficial en cuant¨ªa e inter¨¦s convenientes. Y s¨®lo en el supuesto de que no se ejerciese o no llegase a buen fin aquella preferencia en las licitaciones, ¨¦stas quedar¨ªan abiertas para cualesquiera otros postores.?

Segarra fue incautada por el Estado, en 1976, a propuesta del ministro de Industria, P¨¦rez Bricio, con el apoyo del de Hacienda, Carriles. El Estado concedi¨® un cr¨¦dito extraordinario de m¨¢s de ochocientos millones para garantizar la supervivencia de la empresa y el mantenimiento de los puestos de trabajo. Posteriormente, y una vez que los administradores del Estado se hicieron cargo de la empresa, se procedi¨® a suscribir un compromiso de responsabilidad social con los trabajadores que permiti¨® reducciones de plantilla.