Dos guardias civiles muertos y otros dos heridos en un doble atentado en Guip¨²zcoa
Dos guardias civiles resultaron muertos ayer, a primeras horas de la ma?ana, y otros dos heridos, uno de ellos de suma gravedad,en un doble atentado producido de forma casi simult¨¢nea -diez minutos de intervalo- en dos villas guipuzcoanas distantes entre s¨ª 75 kil¨®metros.
El jeep en el que se desplazaban tres guardias civiles por la carretera de Ormaiztegui a Zum¨¢rraga salt¨® por los aires, al ser activado a su paso un potente artefacto. Los cuerpos de dos de los ocupantes salieron disparados a m¨¢s de quince metros y quedaron destrozados en el suelo. El otro guardia civil fue tambi¨¦n alcanzado por la metralla del artefacto y fue internado en el hospital militar de Vitoria.Diez minutos antes, en la localidad de Renter¨ªa, poblaci¨®n contigua a San Sebasti¨¢n, otro guardia civil resultaba lesionado de gravedad al explosionar un potente artefacto, que se activ¨® al poner en marcha el veh¨ªculo de su propiedad.
Mientras tanto, la psicosis de violencia en este territorio vasco aumentaba cuando el viernes, a ¨²ltimas horas de la noche, se o¨ªan en gran parte de la capital donostiarra la explosi¨®n de seis bombas colocadas en distintos edificios oficiales. De madrugada era asaltada la sede de ElA en Azpeitia.
Cuando ya se conoc¨ªan todos estos nuevos actos de violencia llegaba la noticia de la reivindicaci¨®n de ETA militar de la muerte a tiros el jueves pasado del militante de UCD Luis Candendo P¨¦rez.
Veinte kilos de "goma-2"
A las diez de la ma?ana de ayer, un convoy de la Guardia Civil, compuesto por dos jeeps, se desplazaba por la carretera de Ormaiztegui a Zum¨¢rraga, junto a Villarreal de Urrechua, cuando en una de las revueltas que la carretera hace en el alto de Izaga el segundo de los veh¨ªculos fue alcanzado de pleno por un potente artefacto activado a distancia. En principio se especula con que la intenci¨®n de los agresores era la de haber alcanzado en la misma acci¨®n a los dos jeeps, pero momentos antes uno de ellos hab¨ªa adelantado un cami¨®n, por lo que se distanciaron ambos veh¨ªculos policiales. El artefacto, compuesto por unos veinte kilos de goma-2 y cuatro de metralla, fue accionado desde una distancia de unos sesenta metros por un comando oculto entre unos arbustos.
La potencia de la onda expansiva lanz¨® por los aires al jeep, que fue a caer a unos veinte metros de distancia, mientras que los cuerpos destrozados de dos de los guardias civiles aparecieron a quince metros del veh¨ªculo.
El tercer guardia civil herido fue trasladado a la cl¨ªnica de San Miguel, de Beasa¨ªn, donde fue curado de una herida en la cabeza y otras en diversas partes del cuerpo. El equipo m¨¦dico que le atiende ha calificado su estado de pron¨®stico reservado.
Los dos guardias civiles muertos en el atentado de Villarreal de Urrechua son el cabo primero Jos¨¦ Rodr¨ªguez de Lamas, de 31 a?os, natural de Le¨®n, casado, con dos hijos y adscrito, como la otra v¨ªctima, a una compa?¨ªa de la Guardia Civil de Logro?o. El otro n¨²mero de la Guardia Civil muerto es Leoncio Revilla Alonso, natural de Benavente, de veinticinco a?os de edad, soltero.
Otro atentado en Renter¨ªa
La explosi¨®n del artefacto que caus¨® heridas de suma gravedad al guardia civil Juan Malpica Aguilera fue o¨ªda en todo el puebla de Renter¨ªa a las diez menos diez de la ma?ana. El potente artefacto hab¨ªa sido colocado debajo del autom¨®vil propiedad del lesionado, un Seat 1430 matr¨ªcula de Madrid, del que hace dos meses fue desactivado otro explosivo. La explosi¨®n caus¨® heridas de gravedad a su ocupante, al que destroz¨® materialmente la pierna izquierda y le caus¨® otras heridas en diversas partes del cuerpo.
Trasladado a la Residencia Sanitaria Nuestra Se?ora de Ar¨¢nzazu, de la capital donostiarra, fue intervenido quir¨²rgicamente y en el transcurso de la operaci¨®n le fue amputada la pierna. El arma reglamentaria del guardia civil, que apareci¨® m¨¢s tarde en el turismo, se le debi¨® de disparar en el momento de la explosi¨®n, ya que el cuerpo de Juan Malpica Aguilera presenta un impacto de bala en el pecho.
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