Nuevas acciones de caciquismo contra parlamentarios de UCD por Avila

En lo que va de a?o ya son tres los delegados provinciales que han sido separados de sus puestos en Avila y sustituidos por hombres de UCD: la de Obras P¨²blicas y Urbanismo, Mar¨ªa del Coro Cill¨¢n; el de Industria y Energ¨ªa, Carlos Fern¨¢ndez, y la de Educaci¨®n y Ciencia, Irene Alvaro Sanz. En un escrito dirigido a la opini¨®n p¨²blica por el se?or Fern¨¢ndez se menciona que su destituci¨®n obedece a que ?mi gesti¨®n no hab¨ªa resultado del personal agrado a los parlamentarios de UCD?. Asimismo, la agrupaci¨®n provincial de Avila de la UGT ha hecho serias acusaciones de caciquismo contra uno de los parlamentarios del citado partido.

En marzo de este a?o la ex delegada de Educaci¨®n, Irene Alvaro, solicit¨® del ministro su relevo afirmando que se sentir¨ªa ?aliviada? de producirse. La se?ora Alvaro no ha querido ser m¨¢s expl¨ªcita a las preguntas de EL PA?S sobre los motivos que le llevaron a pedir el relevo. Fue sustituida por Mois¨¦s Buenadicha, miembro de la comisi¨®n provincial de Avila de UCD.En junio cesaron de su cargo de delegado provincial de Industria y Energ¨ªa a Carlos Fern¨¢ndez Oliver, sustituido por Jos¨¦ Luis Ortega, hasta entonces subdirector de la Peque?a y Mediana Industria en el mismo Ministerio. En la carta enviada por el se?or Fern¨¢ndez a EL PA?S se cita que ?el cese de los delegados ministeriales a propuesta de los parlamentarios de UCD no es arbitrio original de ¨²ltima hora?, y contin¨²a: ?De las parcas explicaciones o justificaciones que sobre mi cese pude obtener tanto de mi Ministerio como del gobernador civil de Avila, Emilio Contreras, tuve la evidencia de que el ¨²nico motivo de mi destituci¨®n radicaba en que mi corta gesti¨®n (el se?or Fern¨¢ndez actu¨® como delegado desde enero a junio de 1978) no hab¨ªa resultado del personal agrado de los mencionados parlamentarios?. El escrito termina apuntando que si no se aclaran suficientemente las verdaderas razones de los ceses no se ?podr¨¢ tachar de iluso? a quien piense en ?un montaje caciquil y alicorto sobre los hombres y las tierras de Avila?.

Otra denuncia sobre las supuestas actitudes caciquiles de los parlamentarios de UCD en Avila parte de la agrupaci¨®n provincial en dicha provincia de UGT. Seg¨²n sus documentos, el senador Dar¨ªo Benito, secretario municipal en Navaluenga, se hizo con una serie de terrenos que se han revalorizado en m¨¢s de un 1000%.

Numerosos cargos

El se?or Benito acumula los cargos de senador, vicepresidente de la Diputaci¨®n Provincial, secretario municipal de Navaluenga, presidente de la Uni¨®n de Empresarios del Sindicato Provincial de Actividades Sanitarias, vicepresidente primero del Consejo Provincial de Empresarios, director de la Compa?¨ªa de Seguros Hermandad Sanitaria y director gerente de la cl¨ªnica Santa Teresa. Debido a que por sus funciones en estos organismos no pod¨ªa atender debidamente la Secretar¨ªa Municipal de Navaluenga, nombr¨® un secretario suplente, aunque durante a?os fue ¨¦l quien firm¨® las actas de las sesiones.

El precio de las parcelas

El Ayuntamiento de Navaluenga puso en p¨²blica subasta una serie de terrenos municipales para atraer la instalaci¨®n de colonias de nuevos residentes. De acuerdo con esta finalidad, los compradores de las parcelas se compromet¨ªan a iniciar las obras de construcci¨®n en el plazo de un a?o y a terminarlas en dos. En cambio, las 43 parcelas compradas por Angel Madrigal, hombre de confianza del diputado, no estaban sujetas a tales condiciones. Las parcelas se compraron a cien pesetas el metro cuadrado, y hoy, debido a los nueve a?os transcurridos desde entonces, se est¨¢n vendiendo a un precio medio de 1.200 pesetas metro cuadrado. Algunas de las parcelas fueron utilizadas para la construcci¨®n de chalets particulares del se?or Benito, el se?or Madrigal, el secretario suplente de Navaluenga, Consolaci¨®n Barrios, un auxiliar del Ayuntamiento, Luis S¨¢nchez, y otros.Las edificaciones se realizaron sin pasar por los tr¨¢mites de parcelaci¨®n, licencia de obras ni plan parcial. A mayor abundamiento, dado que los chalets no ten¨ªan agua, se permiti¨® establecer una conducci¨®n de agua desde el pueblo, situado a 3,5 kil¨®metros, que pasa por los terrenos comunales de la Dehesa Boyal, sin que el Ayuntamiento reclamara el pago de tasas fiscales ni de servidumbre de paso, que ascender¨ªan a varios millones.