Persiste la ambig¨¹edad gubernamental respecto al pacto socioecon¨®mico

Las negociaciones entre el Gobierno y las fuerzas sociales mayoritarias (CCOO, UGT y CEOE) sobre un posible acuerdo econ¨®mico para 1979 se mantienen dentro de la t¨®nica de ambig¨¹edad que las viene caracterizando. El pacto de la Moncloa parece irrepetible y en esta ocasi¨®n, pese a la voluntad verbal de acuerdo, las posiciones se mantienen distantes, y el di¨¢logo apenas existe.Despu¨¦s de la jornada de reflexi¨®n celebrada el pasado 28 de septiembre, no ha vuelto a convocarse una nueva reuni¨®n conjunta de los tres sectores implicados. Mediante encuentros formales e informales de car¨¢cter bilateral se han dado a conocer las respectivas posiciones y diferencias. El Gobierno se muestra dispuesto a convocar otra serie de contactos formales e insiste en su objetivo no, negociable de conseguir descensos de los niveles de precios mediante una pol¨ªtica de rentas como ¨²nica opci¨®n para reducir la tasa de desempleo o, al menos, cortar su impenitente crecimiento.

Las dem¨¢s fuerzas sociales parecen menos preocupadas por este aspecto. Los sindicatos insisten en conseguir tasas satisfactorias de crecimiento de rentas y multiplicaci¨®n de la inversi¨®n p¨²blica para evitar el paro. Los empresarios reiteran sus demandas de garant¨ªas de cr¨¦dito al sector privado y de una pol¨ªtica de flexibilidad de plantillas.

Diversos medios implicados en la negociaci¨®n consideran viable que a lo largo de la pr¨®xima semana se alcancen unos primeros niveles de acuerdo que podr¨ªan plasmarse en un documento resumen. De ¨¦l podr¨ªa salir la literatura para un proyecto de ley que el Gobierno remitir¨ªa al Parlamento y cuyo contenido b¨¢sico ser¨ªa una indicaci¨®n de tipo salarial compulsiva para el sector p¨²blico y empresas subvencionadas e indicativa para las de m¨¢s empresas. Este tope salarial se situar¨ªa en la zona entre el 12,5 y el 13,5%, de incremento m¨¢ximo de la masa salarial.

Junto a este proyecto de ley, que tendr¨ªa que alcanzar un refrendo parlamentario de los partidos, se consideran veros¨ªmiles acuerdos parciales sobre inversiones p¨²blicas complementarias en vivienda, agricultura y otros sectores generadores de empleo, as¨ª como algunos, traspasos de patrimonio sindical y compromiso de una, pol¨ªtica monetaria y crediticia menos restrictiva que la actual. Se contemplar¨ªa tambi¨¦n la posibilidad de un acuerdo para negociar un pacto de mayor alcance dentro de unos meses.

El retraso y tono de las negociaciones crea cada d¨ªa que pasa m¨¢s inquietud entre los economistas m¨¢s solventes del pa¨ªs, que consideran grave comenzar el a?o sin un acuerdo base entre las fuerzas sociales que permita continuar el esfuerzo de reducir la inflaci¨®n hasta niveles m¨¢s compatibles con nuestros competidores europeos.