La voz del Rey

?(...) Pues bien, en una perfecta combinaci¨®n de inteligencia, tacto, habilidad y sentido de la responsabilidad hist¨®rica, nuevamente don Juan Carlos ha acertado plenamente en la intenci¨®n y en el tono, en la medida y en los modos. (...)Las palabras del Rey han tenido en tierras argentinas la resonancia que merecen y ejercer¨¢n probablemente un influjo considerable para dar respaldo moral a orientaciones pol¨ªticas que permitan la evoluci¨®n progresivamente normal de la naci¨®n que tanto queremos. Pero lo cierto es que don Juan Carlos no se ha limitado a hablar a los argentinos con voz universal -todos los pa¨ªses de Occidente han estado espiritualmente con ¨¦l-, sino que tambi¨¦n nos ha recordado a los espa?oles cosas que en los momentos de tensi¨®n que vivimos muchos propenden a olvidar: ?Espa?a puede estar orgullosa del proceso de transici¨®n que ha vivido, que no tiene precedentes en la historia reciente y por ello Espa?a est¨¢ mereciendo la admiraci¨®n internacional. La finalidad ¨²ltima era la de devolver al pueblo espa?ol su soberan¨ªa, estructurando desde la legalidad el nuevo sistema pol¨ªtico democr¨¢tico requerido por los espa?oles. El Estado que queremos no es el de unos espa?oles impuestos a otros espa?oles, sino el Estado de todos, de forma que en su seno puedan convivir todas las opciones y alternativas pol¨ªticas.?

29 noviembre