El 48 % de los casos de esterilidad depende del hombre
El 48% de los casos de esterilidad en las relaciones de la pareja destinadas a la procreaci¨®n depende del hombre. Esta es la conclusi¨®n a la que ha llegado el profesor Franco Di Silverio, director de la cl¨ªnica urol¨®gica de la Universidad italiana de Chieti y promotor del I Congreso sobre Esterilidad Masculina, que se ha celebrado en Roma a lo largo de esta semana.
?Por razones psicol¨®gicas o por motivos org¨¢nicos, el hecho es que en los ¨²ltimos a?os ha aumentado masivamente el n¨²mero de varones afectados por este mal. Ya no se puede continuar manteniendo la falsedad hist¨®rica de que es siempre la mujer la que tiene dificultades de procrear?, declar¨® el profesor Di Silverio en la jornada de conclusiones del congreso. Esta tesis es defendida tambi¨¦n por importantes ur¨®logos de Florencia, Bolonia, Roma y Mil¨¢n. ?Si las mujeres tuvieran poder en los peri¨®dicos la conclusi¨®n a la que han llegado estos catedr¨¢ticos se hubiera publicado en las primeras p¨¢ginas, pero como se trata de algo que humilla a los ?machos?, se perder¨¢ en las p¨¢ginas ?cient¨ªficas?. As¨ª calific¨® las conclusiones de estos m¨¦dicos un colectivo femenino de Roma. Durante los trabajos del congreso los m¨¢s famosos estudiosos de endocrinolog¨ªa, urolog¨ªa, gen¨¦tica y neuropsiquiatr¨ªa han denunciado la proliferaci¨®n de sex¨®logos que se anuncian cada vez m¨¢s en las p¨¢ginas de los peri¨®dicos como ?taumaturgos de las disfunciones generativas?.Esta es la demostraci¨®n m¨¢s evidente, dijo un catedr¨¢tico, de la irresponsabilidad que existe en este sector. Se inventan, por ejemplo, para la erecci¨®n, mecanismos absurdos y de mal gusto, obligando a tantos hombres a gastarse un dineral cuando podr¨ªan ser curados de sus trastornos sin gastarse un c¨¦ntimo en un organismo universitario, ya que en muchas ocasiones se trata s¨®lo de problemas de tipo psicol¨®gico. Si los hombres acudieran a estas consultas serias, al mismo tiempo, muchas mujeres dejar¨ªan de ser ?torturadas? literalmente con ex¨¢menes infinitos para descubrir la causa de su ?esterilidad? cuando quiz¨¢ se trata de que su marido no posee espermatozoides o la temperatura de ellos es demasiado alta para que puedan ser fecundos. Tambi¨¦n podr¨ªan evitarse una enormidad de trastomos en este campo si las madres tuviesen m¨¢s cuidado en observar a sus hijos durante la edad del desarrollo para que no se produzca en los adolescentes una retenci¨®n testicular, que en la mayor¨ªa de los casos ser¨¢ causa de esterilidad masculina.
Por lo que se refiere al problema de la ?investigaci¨®n? en este campo, por ejemplo, para estudiar nuevas posibles causas del aumento de la esterilidad masculina y de las dificultades en la erecci¨®n, provenientes posiblemente del ambiente f¨ªsico o social o psicol¨®gico en el cual se vive. Algunos especialistas durante el congreso denunciaron la falta de sensibilidad del poder p¨²blico. Las m¨¢s cr¨ªticas durante el congreso fueron las mujeres. Aunque parezca imposible en el siglo XX, se trat¨® tambi¨¦n el caso de la dificultad que en ciertos ambientes cat¨®licos se encuentra para investigar si la causa de la infecundidad es el hombre. Una raz¨®n muy utilizada es decir que la moral cat¨®lica proh¨ªbe la manipulaci¨®n del esperma. De este modo se puede mortificar durante a?os a una mujer para investigar las causas de su esterilidad porque no se puede examinar el esperma del marido, ya que s¨®lo est¨¢ permitido en el acto conyugal y en vistas de la procreaci¨®n. El resto se considera masturbaci¨®n y, por tanto, pecado. Una de las catedr¨¢ticas presentes al congreso declar¨® en una entrevista que esto m¨¢s que un problema de moral es un problema del ?racismo masculino que a¨²n persevera en las iglesias donde la mujer sigue a¨²n consider¨¢ndose como subordinada al hombre en todo?.
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