HughThomas: "La memoria del pasado servir¨¢ a la reconciliaci¨®n entre los espa?oles"
Nueva edici¨®n de su libro sobre la guerra civil en fasc¨ªculos
?Es evidente que en 1936 los dos bandos estaban frente a frente, y es evidente que ahora no ocurre as¨ª. Quiz¨¢ la memoria de la historia pasada ha tenido un papel en ese cambio de rumbo?, dijo Hugh Thomas a EL PAIS en la entrevista celebrada con motivo de la presentaci¨®n de la reedici¨®n de su obra La guerra civil espa?ola, celebrada ayer en un hotel madrile?o. Esta vez se trata de la edici¨®n en fasc¨ªculos de la editorial Urbi¨®n, corregida e ilustrada sobre las anteriores de Ruedo Ib¨¦rico y Grijalbo, con la que se sigue ensanchando la mayor audiencia del escritor brit¨¢nico.
?La m¨¢s importante novedad, lo que le da a esta edici¨®n un car¨¢cter m¨¢s nuevo es -dijo Hugh Thomas- la aportaci¨®n de fotos, carteles y, en general, documentaci¨®n gr¨¢fica. Hay, adem¨¢s, algunos detalles a?adidos en la correcci¨®n de fechas y nombres confusos en las ediciones anteriores y que recogen, de alguna manera, aclaraciones tra¨ªdas por toda esa bibliograf¨ªa que apareci¨® despu¨¦s de la muerte de Franco sobre la guerra civil.?Sobre el papel que los libros de historia reciente tienen sobre el presente, dijo Hugh Thomas:
?Creo que una historia de la guerra civil puede tener un papel importante en la reconciliaci¨®n entre los espa?oles, aunque s¨®lo sea recordando el horror y marcando las diferencias.? Y como hablar de guerra civil pasada es hablar, de alguna manera, de temores espa?oles hacia el futuro, contin¨²a el profesor: ?Adem¨¢s de la actitud de no enfrentamiento que apuntaba antes, hay que decir que en los a?os treinta hab¨ªa un contraste mucho mayor entre ricos y pobres, y esa inocencia pol¨ªtica que ya no queda. En el mundo de hoy, en Espa?a y en Europa, se han recibido muchas y duras lecciones pol¨ªticas. Mi impresi¨®n personal es que la guerra es imposible. Para que ocurriera, har¨ªa falta tambi¨¦n esa preparaci¨®n psicol¨®gica. que ahora no hay. Nadie quiere la guerra ahora. En los a?os treinta, en cambio, todo el mundo estaba listo para el combate, y todo el mundo rechazaba la idea de compromiso, de pacto. Todo el mundo estaba contra el abrazo de Vergara o contra el abrazo de Su¨¢rez... Hubiera sido impensable, y hoy es real, el encuentro entre el Rey y los comunistas, o entre los socialistas y la derecha civil izada. Adem¨¢s -sigue el profesor Thomas-, quiz¨¢ las minor¨ªas puedan tener un papel m¨¢s interesante que antes. Los medios visuales, como televisi¨®n, ocupan a nuestras sociedades m¨¢s que el mundo de la palabra escrita, y son infinitamente m¨¢s poderosos. Tambi¨¦n son mucho m¨¢s elementales y quiz¨¢ ¨¦ste sea el mal de nuestro siglo.?
La otra alternativa es la posibilidad de un golpe de Estado militar. Tambi¨¦n ¨¦sta la rechaza Hugh Thomas: ?Mi impresi¨®n -dice- es que tampoco est¨¢ muy cerca. No conozco la atm¨®sfera que se respira en los cuarteles, pero no parece haber tamVoco nombres militares con carisma... al menos con el carisma de Franco, de Sanjurjo. Es verdad que no hace falta mucho tiempo para que un militar gris adquiera esa dimensi¨®n carism¨¢tica, pero... Adem¨¢s, la situaci¨®n europea e internacional no parece estar por un golpe militar en Espa?a. Yo pienso que Europa es, en realidad, parte de un solo bloque, el occidental, y que el papel de Estados Unidos es muy importante.?
?Pues bien, sospecho que la Administraci¨®n Carter no podr¨ªa dar su aprobaci¨®n a tales hechos, que sin esta aprobaci¨®n tampoco son muy posibles, y mi impresi¨®n es incluso que la CIA tampoco podr¨ªa intervenir en este sentido sin contar con la aprobaci¨®n de su, Administraci¨®n. Sobre todo la CIA de hoy, que ya no es la de los a?os sesenta. En principio, est¨¢ mucho m¨¢s despolitizada y tambi¨¦n mucho mejor controlada, y aunque sea tal vez menos eficaz que entonces, seguramente tendr¨¢ muchas menos personas que trabajen por libre. En suma, considero improbable, pese al terrorismo y al clima un poco movido de la opini¨®n espa?ola, una salida militar violenta a la situaci¨®n pol¨ªtica. ?
La nueva edici¨®n de La guerra civil espa?ola comprender¨¢ seis tomos, con un total de 105 fasc¨ªculos, cuya primera entrega saldr¨¢ a la calle la pr¨®xima semana, con una tirada inicial de 150.000 ejemplares. La parte gr¨¢fica incluye 3.120 ilustraciones seleccionadas entre archivos y colecciones particulares, veinticinco mapas de las principales operaciones militares, 180 dibujos y 105 carteles. Han colaborado en esta edici¨®n, como consejo de redacci¨®n, el Coronel Ram¨®n Salas Larraz¨¢bal, el escritor Luis Romero y el catedr¨¢tico Angel Vi?as. Como asesor t¨¦cnico figura el coronel Mart¨ªnez Bande y Josep Termes ha seleccionado los Carteles.
En el acto de presentaci¨®n, el profesor Hugh Thomas se?al¨® que la nueva edici¨®n tampoco es una historia definitiva. ?Definitiva -dijo- es la ¨²ltima palabra que debe escoger alguien que quiera ser historiador. Van a buscar en vano, como siempre, versiones finales de enigmas, tales como la muerte de Garc¨ªa Lorca, la de Nin o la de Durruti, o una versi¨®n acabada sobre el bombardeo de Guernica. La b¨²squeda de los datos definitivos sigue y va a seguir por muchos a?os. ?
El profesor Thomas, que vive en Londres, prepara en la actualidad un estudio sobre la influencia de la tecnolog¨ªa en la pol¨ªtica.
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