Los graciosos
?Vienen en tromba y cuentan con la magn¨ªfica caja de resonancia de la TVE. Atentos a los vientos que soplan, saben que ahora lo que se lleva es poner a caer de un burro a los pol¨ªticos. ?oras, ?ores, puedo prometer y prometo; Felipe, moreno de verde luna; Carrillo, la monja.Son los graciosos oficiales y al p¨²blico de general les hace mucha gracia. ?Qu¨¦ divertido hacer profesi¨®n de antidem¨®crata sirvi¨¦ndose de la democracia! ?Qu¨¦ divertido criticar la amnist¨ªa, la libertad, los partidos, las elecciones, el Congreso! Antes, cuando todos ellos tambi¨¦n hac¨ªan las gracias por los peri¨®dicos y los escenarios, presum¨ªan de apol¨ªticos y dec¨ªan -?por qu¨¦ ser¨ªa?- que el arte y la gracia nada ten¨ªan que ver con la pol¨ªtica. ( ... )
Es un humor -de alguna forma hay que calificarlo- que milita en la antidemocracia. Pero, ojo, si en defensa de la igualdad de oportunidades en la campa?a, a alguien con criterio se le ocurre meter mano en tanta majader¨ªa, aparecen los defensores de la libertad para lanzar el anatema: "Censores", dicen como insulto. ?Y qui¨¦nes son esos defensores de la libertad? Resulta que un diario que profesa amor y cari?os por la extrema derecha desestabilizadora; los "pasotas" de post¨ªn, que "pasan" de pol¨ªtica, t¨ªo, y un corto etc¨¦tera de antidem¨®cratas reconocidos.
Hay que dejarse de tanta guasa reaccionaria y reconocer, mal que nos pese, que el se?or S¨¢nchez Polack -"Tip"- es asistente perpetuo. a los m¨ªtines de la extrema derecha; hay que aceptar que Mari Carmen -con los mu?ecos a cuestas- engorda los m¨ªtines de don Blas; hay que decir que los monos de Summers pod¨ªan ir en la revista Fuerza Nueva con propiedad de criterios.
Si tanto les molesta la democracia, pueden pedir direcciones a su compa?ero de profesi¨®n Bigote Arrocet. El chileno, que all¨¢ dej¨® a los rojos de la Unidad Popular, les podr¨ªa indicar hoteles y peri¨®dicos que bajo Pinochet les dar¨ªan asilo y buenos recibimientos. ?
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