Pa¨ªs Vasco: todos contra el partido del Gobierno
?Todos contra UCD? podr¨ªa ser el titular de la cr¨®nica en torno a la pol¨ªtica de alianzas adoptada por los diferentes partidos vascos en un largo fin de semana de reuniones, contactos y negociaciones de cara a la elecci¨®n de alcaldes.
Parece claro que en Euskadi el partido centrista no va a lograr m¨¢s alcald¨ªas de las que obtuvo directamente por mayor¨ªa absoluta de concejales electos. De eso se van a encargar los partidos nacionalistas (entre los que no existe una clara pol¨ªtica de alianzas generalizada -aunque s¨ª es presumible un apoyo en ¨²ltima instancia-) y los partidos de clase, que parecen decididos a apoyarse entre s¨ª contra UCD y quiz¨¢ frente a los nacionalistas en casos aislados.En principio, UCD, a la vista de estos acuerdos entre partidos, es la perdedora. No ocupar¨¢, quiz¨¢, si no es por ?carambola? o descuido, m¨¢s que las veintis¨¦is alcald¨ªas logradas directamente con sus siglas en las elecciones (nueve en ?lava y diecisiete en Navarra).
Aunque el partido centrista no ha hecho p¨²blica su pol¨ªtica de alianzas en el Pa¨ªs Vasco, parece claro que en los casos en los que no tiene opci¨®n a ocupar la alcald¨ªa podr¨ªa apoyar a los candidatos de PSOE y PNV con el fin de evitar que el puesto vaya a parar a manos de partidos de izquierda abertzales.
El PNV, que ya tiene aseguradas directamente la mitad pr¨¢cticamente de las alcald¨ªas de todas las poblaciones de Vizcaya, Guip¨²zcoa y ?lava, incluidas casi con toda seguridad las tres capitales, ha decidido que en los ayuntamientos en los que no tenga la mayor¨ªa absoluta o posibilidades de lograr un alcalde, dar¨¢ un voto abertzale (Euskadiko Ezkerra o Herri Batasuna) al partido que mejor situado est¨¦ para optar al puesto. UCD queda descartada.
Por su parte, Euskadiko Ezkerra es partidaria de apoyar a .los partidos de izquierda -sean de clase o abertzales- que tengan m¨¢s posibilidades de obtener la alcald¨ªa. Entre PNV y PSOE -lo han afirmado p¨²blicamente- se inclinar¨ªan por el segundo partido, y s¨®lo apoyar¨ªan claramente al Partido Nacionalista Vasco para evitar que cualquier alcald¨ªa sea ocupada por UCD.
En este extremo coincide Herri Batasuna, que salvo en la citada circunstancia, est¨¢ s¨®lo dispuesta a apoyarse a s¨ª misma. En el resto de los casos parece que se inclinar¨¢ por la abstenci¨®n, salvo que exista alg¨²n cambio de ¨²ltima hora.
El acuerdo PSOE-PCE a escala estatal parece que puede tener tambi¨¦n su versi¨®n a escala de Euskadi, aunque no de una forma tan clara como en otras nacionalidades y regiones. El PSOE ha anunciado que no apoyar¨¢ a UCD y que su voto puede oscilar entre PCE -priotariamente-, Euskadiko Ezkerra e incluso otras fuerzas de la izquierda. Herri Batasuna parece quedar fuera del punto de mira.
Actitud clara en este sentido ha adoptado ya el PC de Euskadi, que p¨²blicamente ha afirmado que negar¨¢ su apoyo a la coalici¨®n abertzale radical en tanto sus dirigentes apoyen la lucha de ETA militar.
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