Un Consejo de la Revoluci¨®n, defensa de la democracia parlamentaria en Portugal
El Consejo de la Revoluci¨®n ha roto el silencio en defensa de la democracia parlamentaria para advertir contra el peligro de un golpe de Estado derechista en Portugal.A escasos d¨ªas del quinto aniversario de ?la revoluci¨®n de los claveles?, y cuando la prensa derechista hace campa?a contra un regreso de los militares de izquierda al protagonismo pol¨ªtico, ha causado sensaci¨®n el art¨ªculo publicado en el oficioso Diario de Noticias por el general de brigada Franco Charais, cosejero de la revoluci¨®n, ex comandante de la regi¨®n militar del Centro, el hombre que en agosto de 1975 contribuy¨® de manera decisiva a la victoria de la izquierda moderada sobre los ?revolucionarios?, encabezados por el entonces primer ministro Vasco Goncalves.
Bajo el t¨ªtulo de ?Las Fuerzas Armadas y el per¨ªodo de transici¨®n?, el art¨ªculo del general Charais se pronuncia contra la actitud tomada por el jefe de Estado Mayor de la Fuerza A¨¦rea, general Lemos Ferreira, inmediatamente despu¨¦s del rechazo por el Parlamento del proyecto de presupuesto elaborado por el Gobierno Mota Pinto.
El general Lemos Ferreira anunciaba que, por falta de disponibilidades financieras, la aviaci¨®n portuguesa dejaba de asegurar una serie de misiones de apoyo a la poblaci¨®n civil. Para Charais, esta ?ins¨®lita? toma de posici¨®n representa una clara ?forma de presi¨®n sobre un ¨®rgano de soberan¨ªa, la Asamblea de la Rep¨²blica, que es la m¨¢s genuina expresi¨®n de la voluntad popular?, y un apoyo, no menos claro, ?a un Gobierno por ella derrotado?.
Para Charais es, pues, ?la alta jerarqu¨ªa militar? la que subvierte ahora el proceso de regreso de los militares portugueses al apoliticismo de los cuarteles. Afirmaci¨®n que implica, por primera vez, una defensa p¨²blica, por parte de un representante cualificado del Consejo de la Revoluci¨®n, de por lo menos algunos de los militares de izquierda sancionados despu¨¦s del 25 de noviembre de 1975.
M¨¢s all¨¢ del hecho puntual, el ?caso Lemos Ferreira? constituye, para el general Charais, un s¨ªntopreocupante del regreso de la ?alta jerarqu¨ªa? castrense a ?interferencias abusivas en el dominio de la lucha pol¨ªtico-partidaria?, contra las que es imprescindible tomar med¨ªd as, ya que ?no es admisible la coexistencia en las FFAA, muy especialmente en su alta jerarqu¨ªa, de militares que pretenden cumplir los imperativos constitucionales y de militares que se les oponen deliberadamente?.
?Si los primeros -advierte el general Charais- tienen con ellos la fuerza de la raz¨®n, a los otros s¨®lo les queda la raz¨®n de la fuerza, la que, de ser suficiente, llevar¨¢ inevitablemente al golpe militar o, como m¨ªnimo, a la militarizaci¨®n del r¨¦gimen, puerta abierta para el golpe constitucional. ?
Se atribuye al general Franco Charais demasiados conocimientos pol¨ªticos para que ¨¦ste no tenga conciencia de las repercusiones de tama?as afirmaciones, en el momento de crisis que Portugal conoce actualmente. Queda por saber los motivos que lo llevaron a romper as¨ª el silencio observado durante cerca de tres a?os. ?Ser¨¢ ¨¦ste el canto del cisne de un Consejo de la Revoluci¨®n que el primer ministro Mota Pinto calificaba hace unos d¨ªas de ?¨®rgano pr¨¢cticamente abolido? y a quien denegaba cualquier poder de control sobre la acci¨®n del Gobierno? Para saberlo, ser¨ªa preciso saber hasta qu¨¦ punto la intervenci¨®n de Charais tiene el apoyo del general Eanes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.