Divisi¨®n provincial canaria
El d¨ªa 11 de los corrientes apareci¨® en su peri¨®dico una defensa de la divisi¨®n de Canarias en dos provincias, en base a una interpretaci¨®n peculiar de la forma en que el corresponsal de EL PA?S en Las Palmas localiza sus informaciones: Las Palmas capital, l¨®gicamente, de la provincia de su nombre.Ciertamente, el ?pleito insular? existi¨® y cal¨® profundamente en nuestro pueblo, siendo su consecuencia m¨¢s palpable la divisi¨®n provincial de 1927, y suponiendo siempre un escollo para la soluci¨®n de los problemas del archipi¨¦lago.
Pero querer reavivar hoy esas rencillas significa, en el mejor de los casos, ignorar la realidad actual. El actual proceso democr¨¢tico ha revelado los rasgos diferenciales de nuestro pa¨ªs. Todas las fuerzas progresistas han defendido planteamientos nacionales o regionales, y tan s¨®lo peque?os grupos de la derecha han propugnado alternativas provincialistas.
Hoy, en Canarias, se piensa mucho m¨¢s en t¨¦rminos de ?peculiaridades insulares?, y se presta una mayor atenci¨®n a las patentes desigualdades entre islas menores y mayores que a las diferencias artificialm ente creadas entre las dos provincias administrativas.
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