El ministro de Industria defendi¨® la opci¨®n nuclear y anunci¨® posibles restricciones
La catarata de palabras producida ayer en el Congreso de los Diputados, en el debate energ¨¦tico, no se tradujo en ninguna resoluci¨®n de la C¨¢mara. La habilidad del presidente del Congreso, Landelino Lavilla, para aplazar las posibles decisiones hasta despu¨¦s de que la Comisi¨®n de Industria y Energ¨ªa estudie el Plan Energ¨¦tico del Gobierno, produjo numerosas ausencias en el hemiciclo, especialmente en los esca?os centristas, ante la falta de votaci¨®n. El debate energ¨¦tico entre los diputados y los ministros -calificado de di¨¢logo de sordos desde la Oposici¨®n- estuvo flanqueado por el estudio de sendas interpelaciones al Gobierno sobre la situaci¨®n en la c¨¢rcel de Soria y la fuga del ultraderechista. Fernando Lerdo de Tejada. Informan Soledad Gallego-D¨ªaz, Ignacio Alonso y Bonifacio de la Cuadra.
El ministro de Industria y Energ¨ªa, Carlos Bustelo, se mostr¨®, en el debate del Plan Energ¨¦tico Nuclear celebrado ayer en el Pleno del Congreso, partidario del desarrollo del programa nuclear. A?adi¨® que las actuales circunstancias de suministro y precios de los crudo permite prever restricciones en un plazo de tiempo medio, y anunci¨® la creaci¨®n de un Consejo de Seguridad Nuclear, as¨ª como una serie de medidas tendentes al ahorro energ¨¦tico. La Oposici¨®n, sin entrar a discutir la conveniencia de la energ¨ªa nuclear, s¨ª critic¨® la utilizaci¨®n de la misma. Todos los grupos estuvieron de acuerdo en la necesidad de un estudio, informaci¨®n y debate previo a la puesta en marcha de las centrales nucleares en construcci¨®n. El Grupo parlamentario Comunista solicit¨® una moratoria general y el Grupo Socialista del Congreso una moratoria parcial para las centrales con autorizaci¨®n previa de construcci¨®n. Los grupos vascos pidieron la paralizaci¨®n de las obras de Lem¨®niz.El se?or Bustelo comenz¨® su parlamento de cincuenta minutos glosando dos acontecimientos que considera trascendentales en el problema de suministro energ¨¦tico espa?ol: la crisis del petr¨®leo desencadenada por Ir¨¢n, de donde se importan anualmente once millones de toneladas de crudos -el 20% del total de las importaciones espa?olas de crudos- y el accidente sufrido por la central norteamericana de Harrisburg, que ?ha provocado una psicosis colectiva contra la utilizaci¨®n pac¨ªfica de la energ¨ªa nuclear?.
A partir de estos presupuestos, y teniendo en cuenta que en los tres primeros meses del presente a?o el consumo de electricidad se increment¨® en un 6,7%, con respecto al mismo per¨ªodo del pasado a?o, el de gasolina un 11% y el de gas-oil en un 10%, el ministro declar¨® la posibilidad de establecer restricciones a no muy largo plazo de tiempo.
Ante la grave situaci¨®n energ¨¦tica espa?ola actual, y para satisfacer el incremento de demanda previsto, el ministro de Industria sugiri¨® cuatro l¨ªneas de actuaci¨®n: promoci¨®n del ahorro de energ¨ªa, utilizaci¨®n m¨¢xima de las fuentes energ¨¦ticas nacionales, promoci¨®n de la exploraci¨®n e investigaci¨®n de nuevas fuentes y diversificaci¨®n entre las distintas fuentes de energ¨ªa disponibles para garantizar en lo posible el abastecimiento normal.
Despu¨¦s de recalcar que los efectos del accidente de Harrisburg hab¨ªan sido ?en todo momento controlados?, pretendi¨® dar m¨¢s valor a su postura favorable a la energ¨ªa nuclear con citas de declaraciones de altas personalidades de la pol¨ªtica europea, como el canciller alem¨¢n Helmut Schmidt, entre otros. Tras invitar a los socialistas espa?oles a que siguieran el ejemplo alem¨¢n de apoyo a este tipo de fuente energ¨¦tica, destac¨® el bajo coste del kilowatio hora producido en una central nuclear y asegur¨® que la instalaci¨®n de centrales el¨¦ctricas nucleares tiene unos costes de combustible inferiores a sus costes de amortizaci¨®n.
Carlos Bustelo coment¨® a continuaci¨®n ?el perjuicio que a la econom¨ªa nacional est¨¢ ocasionando la paralizaci¨®n administrativa de algunos de los proyectos de centrales nucleares en curso?. Los contratos paralizados ascienden en la actualidad a 150.000 millones de pesetas, lo que supone unos 35.000 puestos de trabajo directos e inducidos.
Despu¨¦s de afirmar que ?sin energ¨ªa nuclear seguiremos dependiendo de forma absoluta del petr¨®leo? y de que sin un abastecimiento diversificado y m¨ªnimamente asegurado ?no hay soberan¨ªa ni margen para una pol¨ªtica exterior real y efectiva?, el ministro manifest¨® que el Gobierno ?est¨¢ dispuesto a asumir la responsabilidad que le corresponde de tomar las decisiones oportunas en un plazo inmediato?.
Carlos Bustelo cerr¨® su parlamento diciendo que la ?energ¨ªa nuclear no es de derecha ni de izquierda? y exponiendo la necesidad de ?conseguir un amplio consenso social que apoye la pol¨ªtica energ¨¦tica del Gobiemo?.
Entre las medidas inmediatas del Gobierno anunciadas por el ministro de Industria figuran: un proyecto de ley de creaci¨®n del consejo de seguridad nuclear, fomento de las inversiones para estimular el ahorro energ¨¦tico, regulaci¨®n y medidas de apoyo a la autogeneraci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica, est¨ªmulos y beneficios para las provincias en funci¨®n de su potencia el¨¦ctrica instalada y promoci¨®n de la exploraci¨®n y aprovechamiento de los recursos minerales energ¨¦ticos. Otras medidas de actuaci¨®n inmediata son: preparaci¨®n de un plan de restricciones en el consumo de combustibles y carburantes para un supuesto de emergencia, contingentar el fuel-oil con destino a centrales t¨¦rmicas y otros sectores de gran consumo e iluminaci¨®n gradual de subvenciones a diversos productos energ¨¦ticos.
Oposici¨®n: caos nuclear
Dentro de las intervenciones de los grupos parlamentarios, Javier Solana, del Grupo parlamentario Socialista del Congreso, comenz¨® diciendo que ?el discurso del se?or Bustelo no es de recibo? para apostillar que ?entrar en la ¨®rbita del vicepresidente segundo del Gobierno, se?or Abril, parece que lleva consigo la transmisi¨®n de una sensaci¨®n de caos?. Javier Solana afirm¨® que es indispensable la nacionalizaci¨®n de la red de alta tensi¨®n, como necesaria es la creaci¨®n de un ente del petr¨®leo, y a?adi¨® que su grupo parlamentario no desea un debate existencial de ?energ¨ªa nuclear s¨ª o energ¨ªa nuclear no?.
Al tocar este tema destac¨® que las p¨®lizas de seguro de las compa?¨ªas el¨¦ctricas no cubrir¨ªan las indemnizaciones derivadas de un grave accidente nuclear, a lo que el ministro de hacienda, Garc¨ªa A?overos, respondi¨® m¨¢s tarde informando que se hab¨ªa redactado un proyecto de ley de cobertura de estos riesgos. Finaliz¨® Javier Solana solicitando la creaci¨®n de un consejo de seguridad nuclear dependiente del Parlamento que supervise las tres centrales nucleares en funcionamiento, que no se d¨¦ permiso de construcci¨®n a las siete centrales que lo tienen solicitado, y una moratoria para la construcci¨®n de aquellas cuatro centrales que tienen autorizaci¨®n previa.
Ram¨®n Tamames, del Grupo parlamentario Comunista, centr¨® su intervenci¨®n en la idea de que el Gobierno no tiene un plan energ¨¦tico y que la convocatoria de ayer significaba un respaldo jur¨ªdico del Parlamento a un esquema de funcionamiento energ¨¦tico inaceptable. Despu¨¦s de realizar una serie de acusaciones, entre otras el derroche de combustibles de algunos transportes urbanos y el mal funcionamiento de la Renfe -temas que fueron contestados por el ministro de Transportes, S¨¢nchez Ter¨¢n-, pidi¨® la constituci¨®n de un ente nacional de hidrocarburos, una consulta popular y una moratoria para el programa nuclear. Defini¨® que es el Consejo General Vasco y el pueblo vasco quienes deben decidir sobre el futuro de Lem¨®niz
En representaci¨®n de Coalici¨®n Democr¨¢tica intervino Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, quien declar¨® que el mercado petrol¨ªfero no s¨®lo est¨¢ encarecido, sino tambi¨¦n enrarecido. El se?or Areilza apost¨® por la energ¨ªa nuclear, que debe plantearse como una soluci¨®n de Estado que no exige perder el tiempo, y explic¨® los recelos contra esta fuente energ¨¦tica como consecuencia de su utilizaci¨®n b¨¦lica y su car¨¢cter secreto y misterioso.
En su respuesta a las distintas intervenciones, el ministro de Industria declar¨® que Espa?a, de hecho, se encontraba en una moratoria nuclear.
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